Fuí hasta Héctor.
(Tn)- ¿Y bien?
Héctor- ¿Por que te fuiste así sin despedirte de mí?
(Tn)- No lo ví necesario.
Héctor- Me importas (Tn), más de lo que piensas.
(Tn)- Héctor no por favor... Sabes lo importante que eres para mí, pero no puedo seguir así mientras tu pasas de mí.
Héctor- Lo siento por todo lo que te he hecho de verdad, ahora que no estás me doy cuenta de lo mucho que me haces falta?
(Tn)- ¿Cómo? -no debía creerlo, en el fondo sabía que era mentira, no era la primera vez que lo hacía.
Héctor- Que me he dado cuenta que te quiero joder. -empezó acercarse a mí, yo ni si quiera podía articular palabra, quería besarlo, claro que quería, pero no debía. Me aparté de él.
(Tn)- Lo siento Héctor, no puedo, no quiero volver a caer. -Salí corriendo, lágrimas empezaron a salir de mis ojos y miles de recuerdos invadieron mi mente. Estuve corriendo sin rumbo durante 15 minutos, llegué a unos edificios que parecían abandonados, no podía más y me senté en el suelo. ¿Por qué tenía que volver aparecer? Demasiadas preguntas sin respuesta...
Empezó a sonar mi móvil, no sabía cuantas horas llevaba ahí sentada, pero ya estaba anocheciendo. Cogí mi móvil, era Dani, me había olvidado de él.
Dani- ¡¿Donde estás?! -gritó.
(Tn)- No... No lo sé Dani -empecé a llorar.
Dani- Eh pequeña, ¿que te pasa?
(Tn)- Dani te necesito, ven por favor.
Dani- ¿Dónde estas?
(Tn)- En unos edificios abandonados, son de colores pero no sé exactamente donde están, las paredes están llenas de graffitis.
Me colgó. Dejé el móvil en el suelo y apoyé mi cabeza en la pared. A los 15 minutos más o menos apareció una sombra, era Dani, lo sabía.
Dani- ¿(tn)? ¿Eres tú?
(Tn)- Sí -dije muy suave, estaba muy cansada. Se acercó a prisa y me abrazó.
Dani- Me tenías preocupado, ¿que ha pasado?
(Tn)- Vámonos a casa por favor, allí te explico.
Me ayudó a levantarme y fuimos para casa, durante el camino no hablamos, me llevaba abrazada por la cintura y yo iba pensando en como le iba a explicar todo y cual iba a ser su reacción...