Llegamos a casa. No me acordaba de que Noelia y Jesús pasaban el día fuera, genial, cada vez me ponía más nerviosa.
Dani- ¿Me vas a explicar ya?
(Tn)- Dani pero no te enfades por favor.
Dani- Cuenta.
Le conté todo, incluso que Héctor quiso besarme y a mi me apetecía hacerlo.
Se levantó y salió de casa dando un portazo, este día no podía ir mejor. Necesitaba a Noe, pero no quería molestarla, le quedaba una semana y un día y no quería estropeársela. Dani no contestaba mis llamadas, ni mis mensajes. Decidí meterme en la cama. Iba a bajar la persiana y ví algo que hizo que el mundo se me cayera encima.
¿Era Dani? ¿Besándose con otra? Sí, era Dani. No quise ver más, me metí en la cama e intenté dormirme, imposible. Demasiadas emociones y sentimientos en poco tiempo, muy poco tiempo. No quería saber nada más de Dani, en el fondo sabía como era Dani con todas las chicas, y que como otra más, me iba a utilizar y nada más. Me aguantaba las ganas de llorar, pero no pude más. Rabia, dolor, impotencia acompañaban a cada lágrima, necesitaba desconectar por un tiempo.
