Al día siguiente
Sebas pasó por Calle a su casa, estaba hermosa pero en el fondo sabía que tenía tristeza que ni el maquillaje podía disimular del todo.
Llegaron a la casa dónde sería la ceremonia.
El altar y las sillas para los invitados estaban ya listas en un gran jardín. Faltaba una hora para que comenzara la boda.
Calle estaba con Sebastían que trataba de tranquilizarla. En un momento Calle miró hacia arriba y logró ver en una ventana de la casa a Poché con su vestido de novia.
Se despidió de Sebas y subió a aquella habitación.
Calle abrió la puerta y de inmediato todas voltearon a verla y Juana dió una indirecta para dejarlas a solas.
Ambas se acercaron y se tomaron de las manos.
Poché: Otra vez tú
Calle (sonrió): Así es
Calle la tomó de la mano y le dió una vuelta admirando su vestido y lo hermosa que se veía.
Calle: Al parecer nuestra historia llega a su final...
Poché tomó a Calle del rostro y juntaron sus frentes
Poché: Calle...dime que no me casé y no lo haré
Calle: Poché, mi amor, esa respuesta está en ti, siempre has sabido qué es lo correcto
Poché: Calle por favor dame una respuesta concreta, no puedo casarme con Gabriel porque aún sigues en mi corazón, por favor dime que no me casé, dime que me amas y te aseguro que detengo la boda, pero si me dices que me casé y que ya no me amas, me casaré con Gabi.
Calle: Poché, tu ya sabes la respuesta, con el simple hecho de depender de mi para casarte o no, estás dudando, pero ahora dime tú....Eres feliz a su lado? Si o no?
Poché: Sí...pero
Calle la interrumpió: Ahí esta tu respuesta.
Poché: Calle...eso quiere decir que ya no me amas?
Calle le limpió la lágrima a Poché
Calle: Quiero decir que sacrifico mi felicidad por la tuya, yo sería incapaz de decirte que ya no te amo porque sería una completa mentira, pero si debo hacerlo para convencerte lo haré.
Calle tomó a Poché del rostro y mirándola fijamente con sus ojos llorosos, tragó saliva y armándose de valor dijo:
Calle: Ya...no te amo Poché
Poché abrazó fuertemente a Calle. Calle limpió las lágrimas de Poché y acercándose a su oreja le susurró "Será la última vez que lo pueda hacer y no voy a desaprovechar mi oportunidad".
Calle se agachó y la besó. Se despegaron y Calle le dijo "Te veo abajo, no tardes que tu futuro esposo te espera".
Calle salió de la habitación y Poché quedó en shock después de todo lo que había pasado.
Se volvió a maquillar un poco para arreglar lo que las lágrimas habían arruinado, miró por la ventana y todo el mundo estaba allí. Poché ya tenía clara su decisión así que abrió la puerta, bajó de las escaleras y se encontró con su papá que la acompañaría al altar.
La música comenzó a sonar, los invitados se pusieron de pie mientras veían caminar a Poché con su papá.
El papá de Poché le dió un fuerte abrazo y se la entregó a Gabriel, ambos subieron al altar tomados de la mano, ambos estaban muy nerviosos.
El padre pidió atención y dió inicio a la ceremonia.
LLegó el momento de los votos, inició Gabi y le dedicó unas hermosas palabras a Poché diciéndole lo mucho que la amaba.
Calle se sintió un poco mejor al saber que Gabi amaba de verdad a Poché y que la quería hacer muy feliz.
Gabriel dijó el sí acepto y le colocó su anillo a Poché.
Era turno de ella, tenía un pequeño papel donde tenía unas notas sobre lo que quería decirle a Gabi, lo sacó y sin querer su mirada la llevó hacia Calle que estaba en la primera fila.
Poché le quitó la mirada a Calle, la fijó en el papel, luego en su anillo y finalmente en que la persona con la que se estaba casando era Gabriel.
Arrugó el papel en su mano y comenzó a hablar...
