Los días se habían vuelto semanas y estas se convirtieron en meses, quien diría que en unos 5 meses las cosas cambiarían de una manera muy poco particular, para Katsuki en todo este tiempo le han pasado tanto cosas buenas como malas.
Como siempre prefiere recordar todo su sufrimiento para que estos sean despejados por las buenas noticias, en primer lugar estaba temporalmente comprometido con una persona que odiaba con todo su ser, encima la tenía que ver cada mes, lo cual era un calvario para el, su mejor amigo Denki se fue a una misión un tanto larga con algunos soldados que igualmente tenía ciertas amistades, entre ellos se encontraba Kirishima y debía admitirlo los extrañaba, sus ocurrencias lo hacían descansar de tanto ajetreo real, las responsabilidades del reino habían crecido, debido a que en un año se coronaría como rey y debía acostumbrarse a las responsabilidades, gracias a esto no pudo ir a la misión con sus amigos, tampoco podía viajar con su dragón, recientemente había comenzado la época de apareamiento por parte de los dragones, algo que debía ser interrumpido debido a su eminentemente reducción, en pocas palabras todo lo que antes poseía, para sentir libertad y felicidad se le estaba escapando de las manos. Pero por otro lado las cosas buenas o la cosa buena de todos estos cambios era su mano derecha, Deku.
Quién diría que esa persona lo apoyaría tanto y se preocuparía tanto por el, literalmente estaba desplazando a Denki como su mejor amigo, gracias al gran corazón que posee siempre le apoya en todo lo que puede, sabe cuando está mal y trata de animarlo, aparte agradece que el peliverde sea un sabelotodo, como el le suele decir, ya que lo ayuda mucho en sus obligaciones para que estas sean menos agotadoras, claro hay cosas que aún le molestan de aquel chico, como su forma de hablar rápidamente cuando está preocupado o analizando, Su gran desconfianza y cada vez que está cerca de él, se siente mareado, confuso, algunas veces se sonroja cuando le sonríe, eso es lo que más odia de su Deku.
Pero dejaría todos sus lujos por mantenerlo a su lado, principalmente en su cumpleaños.
Normalmente se le realizaba una fiesta privada con todos sus amigos y su madre, sin embargo como últimamente todo a tomado un rumbo diferente, Mitsuki decidió darle un gran festejo, con el pretexto de que quiere festejar el último año que su hijo será menor de edad, pero Katsuki conoce las verdaderas intenciones de su madre, las cuales son encontrarle a alguien que pueda amar, como si el no pudiera encontrarlo por su propia cuenta y como llegó a esta conclusión, fácil. Mitsuki invitó a todas las chicas del reino, a la mayoría de las princesas y como no, a su prometida.
Era su cumpleaños, el decidía que hacer, el decidía como festejarlo y con quien hacerlo, pero como a la "Vieja Bruja" no le pone atención, decidió armar un plan para escaparse de aquels martirio. Así como a su mamá no le importará lo que pensará, a él tampoco le importaría.
Mientras tanto Izuku estaba ayudando con los preparativos de la fiesta, a causa de que su príncipe no apareció durante todo el día, se sentía cansado y frustrado por lo insensato de su majestad en desaparecer, sin decir nada.
Debían arreglarse para la celebración, pero primero debía encontrarlo antes que nada, hiba tan inmerso en sus pensamientos que no se dio cuenta de la persona que estaba adelante y chocó contra ella haciendo que ambos se callerán.
En otro lado Mitsuki finalmente encontró a su hijo, rápidamente lo llevó a su habitación para que se arreglará, resulta que lo encontró en los jardines debajo de un árbol. Se sentía culpable, sabía lo que pensaba, pero que podía hacer, se arrepentía día y noche por desgraciar la vida de su hijo, pero ya no había marcha atrás, si Katsuki iba a borrar el trato, debía convivir con más gente, su verdadero amor no iría corriendo a sus brazos.
Los sirvientes los ayudaron a vestirse, la reina vestía un hermoso vestido color durazno, los encajes estabas decorados con brillantes, la falda no llegaba a topar el suelo, usaba unas zapatilla blancas, de joyería se puso su corona y un pequeño collar con un corazón.
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Solo un año más
RandomKatsuki Bakugo, futuro heredero de Aura, tiene sólo un año para encontrar al amor de su vida, antes de que se vea forzado a casarse con su peor enemigo. Izuku Midoriya, un chico que parecía que perdió todo lo que tenía y sin ningún camino fijo apare...