Extra

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Abrió sus ojos con pereza, estirando su mano hacia su móvil que sonaba indicándole que ya debía despertarse para el instituto.

— ¡Charlotte, tu alarma a estado sonando por cinco minutos, ya levántate y ven a desayunar! —Gritó o más bien ordenó su madre. Dió un gruñido por eso, odiaba que la llamarán por su primer nombre, le parecía demasiado anticuado y aburrido.

— Lucia, cielo, levántate antes de que tu madre destruya la casa —Dijo su padre amablemente con un toque de temor.

— Tsk, dame dos minutos —. Su padre asintió sonriéndole colo siempre hacía.

— deberías ser menos vaga si no quieres problemas con tu madre —. Habló la criatura amarilla.

— solo está exagerando, Pollen.

«¿Cómo es que alguien tan tranquilo como el término con alguien como... Mí madre?»

Rodó los ojos olvidando ese pensamiento. Se apuró en buscar en su armario lo que se pondría, su sudadera negra y jeans negros rasgados, juntos con sus tenis gris. Una vestimenta nada colorida, pero le gustaba.

Tomó su mochila y bajo observando a una rubia que la miraba molesta.

— ¿Irás así?, ¿No tienes que dar un discurso y mostrarte bien ante el público? —. Tal vez no debió de haberle mencionado ese detalle a su madre.

— no es la gran cosa, mamá, además, yo dije que pensaría si lo haría —. Pasó a su lado directo a la cocina hacia el refrigerador.

La rubia suspiró irritada sentándose en el sillón agitada.

— tranquila, cariño, ya sabes cómo es ella —. Dijo su esposo intentando animarla.

— todo esto es tu culpa.

— ¿Porque? —. Preguntó desconcertado.

— es igual a ti —. Respondió con un mueca que lo hizo soltar una leve carcajada, se acercó a ella acariciando su cabello cariñosamente —. Todo esto es por tu rebeldía de adolescente, tu eras igual de testarudo y vago.

— yo no recuerdo haber sido así—. Dijo indignado. La rubia enarcó una ceja.

— te recuerdo que tuve que ayudarte para que no reprobaras el año, otra vez.

— no es lo mismo —. Dijo, cruzando sus brazos con un puchero adorable para la rubia, abrazó a su esposo de la cintura mimosa.

— pero aún así, te amo hippie —.  El la observó con cariño agachándose a su altura tomando su mejilla con delicadeza.

— yo también te amo, rubia —. Murmuro, besando sus labios con dulzura.

— vayan a un hotel —. Dijo la peli negra con asco —. Estoy desayunando, tengan más respeto —. Se quejó, mientras bebía su té.

— cuando tengas un novio, yo te haré lo mismo —. Dijo la rubia.

— ¡Ella no traerá a ningún "novio" aquí! —. Protestó su padre —. Mí abejita es pequeña para esas cosas —. Se cruzó de brazos lanzando humos por las orejas por la furia, de solo pensar que un patán intentará robar a su pequeña, lo enfurecía de sobremanera.

Ambos esposos comenzaron a discutir sobre el tema, su hija los observaba ya acostumbrada a ese tipo de actitudes de ellos.

— bueno, me voy —. Mencionó, tomando su mochila y acercándose a sus padres —. Adiós, los quiero —. Besó la mejilla de ambos, y salió rumbo al instituto.

[...]

— ¡Lu, espera! —. Grito la peli-marrón, acercándose a la nombrada.

Te Salvare-Lukloe/ViperBee- [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora