—Todo está marchando de acuerdo al plan, ahora solo debemos deshacernos del peón para comenzar a repoblarlo.
—Cuando usted lo ordene, comenzaremos la misión.
☆゜・。。・🐺🌙🐺・。。・゜★
— ¿Por dónde empezamos?
Derek se detuvo, todavía agarrando su mano y sonriendo como niño. Jeanine aún no terminaba de asimilar el cambio abrupto de humor, el lobo que la sostenía pasó del semblante abatido a un estado de euforia como jamás lo había visto antes. Parecía un cachorro cargado con azúcar.
—Donde tú quieras.
Derek sonrió, observó alrededor. El lugar plagado de luces, sonidos y movimientos, parecía que todo marchaba a grandes pasos y ellos estaban detenidos. Una hilera de farolas negras de brillantes luces blancas iluminaban las decoraciones de árboles pequeños, de esos que nunca perdían sus hojas, entre ellos se situaban bancas ornamentales hechas en madera, con refinados tallados que decoraban cada una, grabados de animales, flores y hasta paisajes.
—Ya sé.
Derek sacó una moneda del bolsillo interno de su chaqueta, comenzó a darla vuelta entre sus dedos.
— ¿Cara o cruz?
—Cara.
La lanzó al aire, y luego la atrapó entre sus manos, él tenía la expresión victoriosa en su rostro, curiosamente ya no tenía los ojos hundidos y el cansancio retrayendo sus facciones. El retiro le había sentado bien, sin embargo, pese a verse bien por fuera, ella sabía que seguía igual de débil por dentro.
Sonrió, ahora tenía una oportunidad y no pensaba arruinarlo, ya encontraría la forma de remediar el daño que estaba sufriendo por la soledad.
— ¡Cruz! —Exclamó.
— ¡Hiciste trampa! —Jeanine reprochó entre risas.
—No seas una mala perdedora, Jeanine, yo escojo el primer juego.
A lo lejos, en la parte final del predio, se veía la enorme e intrincada montaña rusa conduciendo coches a gran velocidad por sus carriles.
—Hamacas colgantes.
Ella frunció el ceño, Derek adoraba las montañas rusas y no perdía oportunidad de subirse a una si podía.
—Creí que elegirías ese —apuntó a lo lejos.
Derek se encogió de hombros.
—Pero a ti te da miedo.
Jeanine rió bajo.
— ¿Quién lo dice?
El lobo frente a ella esbozó una sonrisa afilada, la miel se convirtió en ámbar.
—Recuerdo bien que cuando éramos jóvenes, nunca quisiste subir conmigo, te daba miedo.
—Teníamos trece.
— ¿Y?
—Y ahora soy adulta. —Jeanine se acercó, ladeando la cabeza—. ¿Tal vez se invirtieron los roles?
Derek entre cerró los ojos, a través de las rendijas podía ver el brillante color moverse, el lobo estaba activo viéndole a través.
—Siempre encuentras la manera de sorprenderme —dijo, y luego jaló para avanzar—. Vamos, Oh... Mira... ¡Chocolate!
El rumbo fue cambiado rotundamente y ella reía viéndolo caminar con prisa hacia un puesto en donde vendían frutas con cobertura de chocolate.
— ¡Espera! Acabas de comer galletas, y una barra con nueces y maní.
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Libérame [Serie Moon Fighters 4]
WerewolfCondenado a pasar el resto de su vida solo, Derek Miller trata de mantenerse firme como alfa del clan Moon Fighters. Pero ya no es tan sencillo, él quiere lo que se le ha sido negado, pareja y familia, una vida al lado de la única persona a la que a...