Pov Juliana
_ Mamá, ella es Valentina. Es mi_ miré a la rubia sin saber decir que somos, no habíamos hablado de esto.
_ Soy su novia, Valentina Carvajal. Un placer señorita_ le dijo de una forma muy educada, extendiendo su mano. Mi mamá la tomó con una sonrisa cómplice, creo que la veo mejor.
Antes sólo estaba acostada sobre la cama, pero hoy está sentada y con una mejor cara, ya hasta está agarrando color_ Me puedes llamar Lupe cariño, y no sabía que mi pequeña tenía novia_ me mordí los labios evitando reír al ver a Valentina tan nerviosa, parece una niña pequeña.
_ Si, bueno. Yo tampoco, no digo que no sabía, que va. Usted me entiende_ dejé un beso en su mejilla, mirándola tiernamente, ella suspiró supongo que está tratando de calmarse. La rubia está diferente, no sé a que está jugando conmigo pero me gusta.
Siento que se está preocupando por mi, está intentando ayudarme y anoche me pidió abrazarme al dormir, dijo que no quería tener sexo, que sólo quería abrazarme durante toda la noche, y la dejé hacerlo, porque no le puedo negar nada_ Respira hermosa_ le susurré al oído.
No entiendo porque está tan nerviosa, le expliqué que mi mamá es un amor, que ella sabe sobre mis gustos sobre las mujeres y los acepta sin ningún problema_ señorita Lupe, le juro que nos estamos protegiendo_
_ ¡Val!_ chillé pegándole en el costado, joder. No he hablado de eso con mi mamá, de hecho le he hablado muy poco de la rubia...
_ ¿De qué hablas?_ preguntó mi madre con el ceño fruncido, Val señaló a su entrepierna con el dedo índice.
_ ¿No le dijiste qué tengo pene?_ suspiré pesadamente, pasando una mano por mi rostro, esto tiene que ser una broma. Creo que se la está cobrando por lo que dije en la cena de sus padres.
_ ¿Osea qué si tendré nietos?_ noté cierta emoción en la voz de mi madre, que alguien me diga como me puedo enterrar aquí mismo.
Iba a hablar pero la rubia me interrumpió, acostándose a su lado_ con calma suegra, que a penas llevamos cuatro días_ me crucé de brazos mirando esa escena, mi mamá sonriendo con el rostro iluminado, la mujer que me gusta justo a su lado mirándola con cierta admiración.
Si alguien me hubiese dicho unos años atrás que iba a estar aquí y ahora con Valentina al lado de mi madre, me hubiera reído en su cara por estar inventando esos sueños que no se cumplen, pero aquí está, diciendo que somos pareja y aunque tal vez lo somos por un contrato, yo pienso que es real, que si es mi novia y se que ella también lo está mirando de esa manera, puedo verlo en sus ojos. Me mira de una manera diferente y eso me encanta, me fascina en todos los sentidos posibles.
_ Tienes que cuidarla, te estás llevando a mi más preciado tesoro. No es porque sea mi hija, pero te estás llevando a una mujer increíble, que es ca_
_ Lo sé_ murmuró Val interrumpiendo_ que es capaz de dejarlo todo por su familia, de abandonar sus sueños para que los demás estén bien_ se levantó de la cama, colocándose justo frente a mí_ vas a ser la madre de mis hijos, si llego a tener quiero que seas tú_ inhalé aire sintiendo su beso en mi frente.
Ay rubia... Ya estás perdida, y eso me encanta_ ¿Hablas en serio?_ quise saber esperanzada, pero se que si lo dijo en serio. Ella no se anda con rodeos, si tiene que decir algo lo dice y ya está. Es de las personas que sabe lo que quiere, no teme decir lo que piensa. Esas son una de las cosas que más me gustan de ella.
_ Tal vez, te lo voy a dejar de tarea culona_ rodé los ojos pegándole de nuevo en el costado, odio con toda mi alma que me llame así, es horrible a parte de que no sé porque lo hace...
