La Desolación de Smaug- Capítulo 1

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Flashback-Bree los limites de la Comarca.

La pequeña ciudad era atormentada por una fuerte lluvia, las grandes gotas caían sobre las personas pero, sobre todo en un enano más alto del promedio quien se dirigía a la taberna El Poni Saltarín, al entrar todo era un caos.

Personas por aquí, personas por allá, y por supuesto muchos borrachos, atravesó a toda esa gentuza y por suerte encontró una mesa, se sentó y decidió pedir un poco de comida pues el viaje fue agotador. Disfrutaba tan placenteramente que fue interrumpido por un par de miradas no muy amigables... decidido, lentamente se fue acercando a su espada pero fue interrumpido nuevamente por una nueva persona que se sentó enfrente de él.

-¿Puedo acompañarte?- preguntó sentándose en la silla- dame lo mismo- le dijo a una de las meseras del lugar refiriéndose a la comida del enano- aun no me presento, mi nombre es Gandalf, Gandalf el Gris.

-Yo se quién eres- mirándolo seriamente.

-Bueno, está es una buena ocasión... ¿a qué viene Escudo de Roble a Bree?-interesado.

-Recibí noticias de mi padre, fue visto vagando cerca de las Tierra Brunas fui a investigar... no había señales de él- decepcionado.

-Thorin han pasado años en que solamente se oyen rumores con respecto a Thrain-tratando de que el enano bajara las esperanzas.

-Se que aún vive, lo puedo asegurar... mi padre antes de desaparecer ¿qué le dijiste esa vez?-mirando sospechosamente al mago.

-Le aconsejé que marchara rumbo a Erebor a reunir las siete tropas de enanos a destruir al dragón y recuperar la Montaña Solitaria y te diré lo mismo a ti, recupera tu hogar perdido- mirándolo a los ojos

-No es casual está plática ¿o si?- ironizado el porque de la llegada del mago.

-No, no lo es... la Montaña Solitaria me preocupa Thorin ese dragón lleva ahí demasiando tiempo, tarde o temprano mentes obscuras voltearán hacia Erebor, me encontré con desagradables personajes en mi jornada por el norte, me tomaron por un vagabundo-mostrando su molestia.

-Lo lamentaron con seguridad- con un toque de gracia.

-Uno portaba un mensaje en lengua negra, una promesa de pago-

-¿Por qué?- confundido.

-Tu cuello, alguien te quiere muerto Thorin, no puedes esperar más eres él heredero al Trono de Durin, reune a las tropas de enanos así tendran la fuerza y poder para recuperar Erebor- advirtiendole del peligro-Debes hablar con las siete familias de enanos, que cumplan su juramento- convenciendolo.

-Las siete tropas juraron lealtad a aquel al que tuviera la joya del Rey, la Piedra del Arca eso es lo único que los unirá y en caso de que lo olvidaras la joya la robó Smaug- recordando la desgracia de su pueblo.

-Y si te ofresco apoyo para reclamarla-

-¿Cómo? esa joya está a medio mundo de aquí, sepultada los pies de un peligroso dragón-

-Si, así es... es por eso que un saqueador es importante- dando algunas opciones.

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Actualidad

Un pequeño hobbit escondido entre algunas piedras revisaba si los orcos lograron seguirlos y así fue, ellos estaban muy cerca, sin embargo eso no era lo único que vió, también logró ver a una gran bestia que afortunadamente alejó a los orcos.

-¿Dónde está el grupo?-se acercó rápidamente Thorin a preguntarle por Azog.

-Muy cerca... a un par de lenguas no más, pero eso no es lo peor- preocupado.

-¿Los huargos percibieron tu olor?- preguntó alerta Dwalin.

-Aun no, pero lo harán... hay otro problema-

-Te vieron- contestó Gandalf.

-No, no es eso-

-¿Ah? ¿Qué les dije? silencioso como un ratón, excelente para saquear- logrando que algunos rieran.

-¿Podrían escuchar? intento decirles que más allá hay algo- desesperado por las constantes interrupciones.

-¿Qué forma tenía?, ¿tal vez de oso?- con uma mirada como si supiera de quien está hablando.

-Si, pero más grande mucho más-

-¿Tu sabías de esa bestia? yo digo que mejor volvamos- aterrorizado contestó Bofur.

-¿Y que nos atrapen los orcos?- reprendiendo al enano.

-Hay una casa no muy lejos de aquí, donde tal vez nos den refugio- advirtiendo.

-¿De quién es la casa? ¿amigo o enemigo?-contesto el líder enano desconfiado.

-Ninguno, nos apoyará o nos matará-

-Que opción tenemos- rendido.

A lo lejos se oyó un fuerte rugido como una advertencia hacia lo que querían hacer.

-Ninguna- contestó el mago.

Desesperados por encontrar un refugio corren con cuidado para llegar a un lugar seguro sin embargo, se encuentran con la bestia. Helena trata de despistarlo un poco pero éste logra encontrarlos de nuevo.

- ¡Por aquí, a la casa corran!-

-¡Abran la puerta ahora!- demandó el Rey.

-¡Empujen!- opusieron los enanos.

Helena pasó entre todos y abrió la cerradura que estaba más arriba del alcance de los enanos logrando que todos pasarán poniéndose a salvo.

- ¿Qué era esa cosa?- preguntó Oin.

-Es nuestro anfitrión, su nombre es Beorn y es un cambia pieles, a veces es un gran oso negro o a veces es un fuerte y gigantesco hombre razonable, sin embargo no es realmente afecto a los enanos- mirando preocupadamente la gran puerta.

-Ya se va- susurró uno de los más jóvenes.

-Si, ya apartate de ahí, eso no es natural nada de esto lo es, es obvio que está bajo un hechizo obscuro- apartó Dori a su acompañante de la puerta.

-No seas necio, no tiene más encantamiento que el suyo. Ahora escuchen duerman un poco todos están a salvo por esta noche, eso espero-

H.N

The lie of love  ₹Thranduil₹Donde viven las historias. Descúbrelo ahora