Capitulo 6 "Mundo."

20 1 0
                                    

— ¿Enserio crees que la princesa este viva?—me pregunto Aranza viendo como las chicas subían las provisiones al nuevo barco—.

—No lo sé pero era aceptar este trabajo o dejar que hicieran cebiche humano como sugirió Pam—dije en una pequeña risa examinando el nuevo timón—.

—Mejor busquemos a una princesa que posiblemente ya éste muerta. Voy al almacén para ver si ya están acomodados todos los suministros.

—De acuerdo—asentí mientras me aseguraba que tuviera todas mis armas conmigo—.

— ¿Ya nos vamos capitana?—oí la voz de Drew para después ver como se dirija hacia donde yo estaba pero esperen.... ¿Estaba caminando?— Capitana—repitió pasando una de sus manos frente a mi cara—.

— ¿Estas caminando?—pregunte golpeando repentinamente uno de sus muslos—.

— ¿Te diviertes?—pregunto en una sonrisa de lado—.

— ¿Cómo es posible que estés caminando?—pregunte alejando mis manos—.

—Básicamente es cortesía del rey. Todo tritón y sirena puede tener piernas si el rey te lo concede con su tridente y como estoy a tu disposición no podía estar todo el tiempo bajo el agua ¿No crees?

—Sí. Demasiado correcto—dije viéndolo de arriba abajo— ¿Ya te habían transformado antes?

—No. Es la primera vez porque la verdad no quiero ofender a tu especie pero nunca le he visto necesidad de cambiar mi linda cola por unas simples piernas.

—Lo bueno que no es una ofensa—dije poniendo los ojos en blanco haciendo que el soltara una risa— Por cierto ¿Qué idioma era la que hablabas la otra vez con el rey?

—Es bloop nuestra lengua natal.

—Con razón no la reconocí.

—Solo las criaturas del océano pueden hablarlo al igual que solo nosotros podemos entender a la perfección todos los idiomas de tierra firme—dijo pasando su lengua sobre sus labios—.

—¡¡CAPITANA!!—grito Aranza
mientras corría hacia nosotros—.

—¿Que pasa?—le pregunte una ves que estuvo frente a mi ya que estaba demasiado agitada tanto que ni siquiera noto las piernas de Drew—.
—Es una emboscada necesitamos que dirijas y por cierto sirena luego me cuentas lo de tu ausencia de aleta pero si no quieres morir sin ser pescado te sugiero que igual te muevas—dijo dirigiéndose a Drew y asi como llego se volvió a ir para avisarle a todas—.

—Ok comandante pez ya oíste manos a la obra pero si no sabes que hacer solo escóndete yo me encargo porque este es mi terreno—le dije dando media vuelta y tomando dirección a mi puesto. Lo mas común en el Mediterráneo era embestir con los espolones con que estaban equipados los trirremes y abordar la nave enemiga, pero con lo que esos piratas no contaban era con toparse con una tripulación de mujeres a las que subestimaron demasiado—.

Solo se escuchaba el sonido de espadas y tablas de madera quebrarse por toda la cubierta; la tripulación enemiga era muy grande pero en su mayoría eran hombres de pocas habilidades y sobre todo muy ebrios. Mientras estaba en plena lucha observe como a lo lejos uno de los enemigos quiso clavarle una espada en la espalda al descuidado de Drew que estaba luchando mano a mano con un chico más o menos de su estatura, así que en un segundo saque uno de mis mosquetes y le disparé a ambos enemigos provocando su tambaleó provocando su caída por laalfanjes.Como pude me abrí camino hasta llegar a el y le tendí uno de mis alfanjes.

—Ten esto. No quiero que mueras—asegure con voz firmé—.

¿Segura que es eso? O ¿Acaso no puede vivir sin mi capitana? —pregunto de forma coqueta—.

Amor en guerra (De C. Arredondo.)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora