capítulo 40: nostalgia

1.4K 125 23
                                    

Luka:

El chico se encontraba sentado sobre su cama y tocando una guitarra acústica (sus tonos le parecían un poco más suaves y dulces que en la eléctrica) , intentando expresar lo que sentía. La melodía que salía de aquellas cuerdas era melancólica y en ciertas partes dolorosas. Escuchó la puerta abrirse, sonrió, más no dejó de tocar hasta que una figura femenina irrumpió en su habitación.

-Vaya - comentó Juleka- es muy hermoso, ¿Sabes?, Aun que me parece algo triste.

-No me he sentido bien últimamente- se disculpó dejando la plumilla a un lado junto con su instrumento - ¿Y como te fue?- preguntó.

-Bueno, ella nos ayudó a elegir vestidos y ropa para la fiesta del viernes.

-Me alegra que vaya - sonrió el chico- No me gustaría verla triste.

-Ja, bueno, es más por Alya que por ella - se sentó en la cama - Aún te extraña - sonrió con cierta tristeza poniendo una mano en el hombro de su hermano.

Él suspiró.

-Y yo a ella, es sólo que no veo muy... sano que ahora continuemos, ella tiene que decidir.

- No entiendo, dijiste que ibas a luchar por ella...

- Jules - dijo su hermano poniéndole una mano en el hombro- A veces hay que reconocer cuándo ya no puedes hacer nada más y aceptarlo. En éstas situaciones lo más importante es que no salgas herido...

Ella se quedó pensándolo, supuso que él tenía razón, además no quería que ni su hermano ni su amiga salieran heridos, lo miró de nuevo.

- Quieres salir corriendo por ella, ¿O no?.

Él sonrió.

- Siempre ha provocado eso en mí.

Juleka sonrió.

- Supongo que no irás a la fiesta, y no te hagas tonto, Marinette me dijo que te había dado una invitación antes de ... Eso.

- No creo que sea bueno aparecerme de la nada- confesó.

- Bueno, te dejo - dijo parándose - Deberías hacer una canción para la banda, eso que estabas tocando sonaba genial.

Él sonrió.

Antes de que Hawk Moth usara los miraculous.

Marinette:

Todo el ensayo estuvo ansiosa y volteando a ver si Lila no hablaba con nadie, o si Lila no era víctima de un akuma, aún que a decir verdad se encontraba muy tranquila y feliz por sus palabras antes dichas.

En la mente de Marinette no dejaba de sonar esa frase "Adrien estaba enamorado de Ladybug". Sabía que no le servía de nada mentirle a ella, ¿Y si no mentía?.

Al finalizar la clase de literatura se disculpó con Luka por lo que había dicho cuando estaban hablando de "La sirenita". El sonrió.

- No importa, Marinette, sé que lo dijiste sin pensar y no quisiste lastimarme - sonrió- por otro lado, ya me dieron calificaciones y no tengo nada que hacer, estaré en la biblioteca , a veces hay cosas interesantes.

Ella sonrió. ¿Cómo lograba ser tan perfecto?.

- Está bien - aceptó - Te mando mensaje cuando salga.

El resto del día se pasó de manera lenta, y ella oía todo como una especie de conversación lejana. Al terminar las clases se acercó a Adrien.

- ¡Adrien!- llamó cuando el chico salía del salón.

Te encontréDonde viven las historias. Descúbrelo ahora