Cap 15: "Mi Querida Dulce"

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*Narra Chris*

Dulce… Un cuerpo de infarto, una cara bonita, sabe moverse y… Como lo esperaba, no es diferente a todas las demás.

Había sido romántico con ella, luego de que ella me besara habíamos comenzado a desvestirnos de camino a mi habitación, cuando por fin la había desnudado por completo Dulce se avergonzaba de su cuerpo.

Luego, cuando entré en ella, noté que era muy estrecha y sus expresiones no eran de una mujer que haya tenido sexo alguna vez. Oh no. Acaso era virgen? Y yo como un animal portandome brusco con ella. Después de unas cuantas arremetidas estaba a punto de encontrar mi liberación y, al parecer, ella también.

Y no sé por qué, pero sentí la necesidad de besarla. Y entonces llegamos al orgasmo. Me derrumbe junto a ella y aunque sentí que sería muy inoportuno de mi parte, necesitaba preguntárselo.

Chris: Puedo preguntarte algo?

Ella levanta su cabeza, la cual reposa sobre mi pecho, y asiente levemente mientras yo acaricio su cabello. Su suave cabello con un aroma delicioso, mi otra mano descansa en su cadera, esas que me hicieron volver loco hasta hace un rato.

Chris: Eres virgen?

Noto como se tensa de repente. Imbécil, eso soy.

Chris: Perdón, soy un imbécil por preguntarte eso.

Dulce: No, no, no. Está bien, es sólo que… Me da un poco de vergüenza la respuesta.

Me da tanta ternura…

Chris: Ey, no tienes que tener vergüenza, ok? No me voy a reír si me dices que sí eres virgen o…

Ella suspira con los ojos cerrados y luego me interrumpe.

Dulce: Nunca he tenido sexo con un hombre que la tenga tan…

Me hace señas indicando con sus manos… Ok, tal vez sí es motivo de reírse, pero me aguanto. Abro mis ojos sorprendido.

Chris: De verdad?

Ella asiente y baja la mirada avergonzada, joder, es algo muy gracioso, pero no quiero hacerla sentir mal si me río. No quiero que se sienta mal por eso. Suavemente le tomo el mentón para levantar su mirada.

Chris: No te sientas avergonzada por eso. Ok?

Ella me sonríe y se ve tan hermosa haciéndolo que le respondo con el mismo gesto. Es muy preciosa. Se acerca a mí y me da un beso en los labios, demasiado corto, pero muy dulce. Como ella. No quería que el beso se acabara, así que lo profundicé, la acerqué aún más a mí y adentro mi lengua en su boca, encontrándome con la suya.

Seguimos besándonos, pero después de un rato el sueño ya me estaba afectando de tal forma que la abracé y me quedé completamente dormido.

Quizá ella sí sea diferente, es una mujer muy hermosa, y dulce. Muy dulce. Es tierna y parece no tener demasiada experiencia con las relaciones de una sola noche, pero yo tampoco la tengo. Quizá y ella sea diferente.

Pero cuando desperté ella ya no estaba aquí. Debí de saberlo, era obvio que iba a ser igual a las otras. La verdad es que ya no sé ni por qué me sigo creyendo de que alguien podría ser diferente. No sé por qué pensé que ella sería diferente.

Pero como siempre estaba confundido.

Me levanté de mala gana, me duché y luego me alisté para ir a la universidad. El primer día fue muy tedioso, nombres, anotaciones, libros y copias y demás. Luego fui a trabajar, por suerte hacía poco tiempo, ya que luego tenía las clases de baile. Y estaba muy emocionado por eso.

Saliendo del trabajo me di cuenta que me había olvidado de mi bolsa para ir a la Academia. Hoy no era un buen día para andar en el carro, la gente se atascaba en las calles y yo estaba llegando tarde…

Este día no estaba yendo nada bien.

Llegué a mi departamento y me cambié y tomé mi skate, ya no quería lidiar con el tráfico. Llegando a la Academia por fin, subí las escaleras intentando no tropezar por la rapidez con la que iba, al llegar abrí la puerta y todos los que estaban en la pista voltearon a verme.

Ok, incómodo.

Caminé lentamente acercándome a Paulina que estaba regañando a unas chavas que… No puede ser! Al dirigir mi vista a aquellas chavas me doy cuenta de que son Dulce y su amiga del antro.

Pau: Niñas, por favor! Dejense de tanto chisme. Bueno, como les decía… Él es Christopher y es nuevo aquí en la ciudad. Y, a partir de hoy formará parte del Grupo A.

Ella me da un golpe suave en la espalda y yo solo le sonrío a todos esos ojos que están clavados en mí, en especial los de la hermosa castaña que me acompañó en mi cama anoche.

Paulina comenzó con una charla en la que nos decía acerca de las nuevas personas que iban a integrar al Grupo A, también presentó a el coreógrafo Héctor. Y absolutamente todo el tiempo estuve sintiendo la mirada de Dulce todo el rato. Quizá pueda hacerla sufrir un poquito. Todas las mujeres son celosas, no?

Pues veamos si surte efecto en mi querida Dulce…

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Hola!

Bueno, qué les pareció el capítulo? Qué fue lo que más les gustó?

Espero que les haya gustado!

Las quiero!💖
Besos!✌😘

Ocho Pasos - De Orgullo ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora