Día 8

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Sal con él. Ya sea que vayan al cine, a jugar bolos, a un museo de arte, o a caminar por alguna plaza. Procura equilibrar estas dos ideas: demuéstrale que te gusta, pero también deja que el haga el trabajo.

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Hacía ya varios días desde que Harry le había sugerido a Draco la idea de salir juntos por Hogsmeade. Pero desgraciadamente solo había sido eso, una idea.

Draco era un chico realmente terco, y aunque se moría de ganas por ir con Potter al dichoso pueblo no pensaba acercarse al chico a preguntarle cuando demonios iba a a ser la dichosa cita.

No fue hasta ese fin de semana que el Gryffindor se acercó a su mesa mientras Draco desayunaba y le había preguntado delante de TODO el mundo si quería ir a pasar el día con él. En ese preciso momento Draco quiso mandarlo a la mierda por exponerlo así delante de todo el gran comedor, pero de verdad que quería esa cita.

Así que ahí se encontraba. Parado y muerto de frío esperando a san Potter.

El Niño dorado llegaba 7 minutos tarde...

-Hola Malfoy- saludó el chico. Lucía su despeinada melena, y aunque  hiciera un frío de los mil demonios, el chico estaba completamente sonrojado. Quizá por la carrera que se hechó para llegar "a tiempo" a la cita con Draco, o quizá por los nervios de tener una cita con él. De todas formas se veía jodidamente sexy.

-Hola Potter-  Ahí se encontraba de nuevo embelesado con aquella mirada tan tan verde. Quería besarlo, pero no iba a hacerlo. No sería digno de un Malfoy comerle la cara a besos sin antes haber tenido una cita por lo menos.

Caminaron hasta Hogsmeade charlando de distintos temas, riendo por cualquier chorrada.

-Y dime Malfoy- preguntó Potter-¿ Qué piensas hacer cuando salgas de Hogwarts?- preguntó Potter mientras jugaba con sus manos.

¿Debería él coger su mano y caminar juntos? Eso era lo que hacían las parejas. Draco se regañó mentalmente. Ellos NO eran pareja.

-Viajaré por el mundo, y luego volveré y seré el siguiente ministro de magia.-

Potter rio ante la idea.

-¿Así? No te veo como ministro de magia. - se burló.

Dichoso Gryffindor.

-Pues si, y de hecho seré el mejor. Mi primera norma será prohibir esas dichosas gafas tuyas. Son realmente horribles.-  Si iban a jugar a las burlas Draco se encargaría de ganar. - De echo, también prohibiré poder salir a la calle tan sumamente despeinado. Y definitivamente borraré Gryffindor de Hogwarts.-

- Qué bajo has caído Malfoy. La única forma de que Slytherin pueda ganar a Gryffindor es tener que borrarla.- dijo Harry sacando la lengua dandole un leve empujón a Draco.

¿Desde cuando Potter tenía la confianza de darle un empujón?

El resto del trayecto fue tranquilo. Llegaron a Hogsmeade y pasaron la tarde allí. Fueron al bar de las tres escobas y pasearon por el pueblo.

Draco llegó a la conclusión de que Potter era un chico entretenido y bastante divertido. Realmente podría pasar más tiempo con él.

Llegaron a Hogwarts por la noche, dándose leves empujones, riéndose de las tonterías que Potter decía o hacía y completamente muertos de frío, porque era invierno y hacia un frío tremendo.

-Quedémonos aquí un rato- sugirió Potter.

-¿Estás loco?¿Acaso has visto el frío que hace?-

-Anda porfa- dijo Potter cogiéndole del brazo y haciéndole sentarse junto a él en la hierba.

-Potter suéltame.- Dijo Draco. Ante eso el chico se río y se acercó peligrosamente a él.

-¿Draco tienes cosquillas?- preguntó Harry.

¿No estaría pensando el chico hacerle esa cosa que en su opinión era una máquina de tortura y que solo podía hacerle Pansy?

-Claro que tengo estúpido-  le dijo- Pero ni se te ocurra poner tus manazas en mi HARRY-  demasiado tarde, el moreno se había lanzado sobre draco e intentaba con éxito buscarle el punto débil al rubio.

Hacia frío, ambos chicos estaban mojados porque había nevado recientemente y la hierba se encontraba mojada, pronto sería la hora de la cena y además alguien podría verlos.  Pero todas esas cosas no le importaban a Draco. No si tenia a Potter subido encima suya. En realidad podría estar acabándose el mundo y a Draco no le importaría, porque amaba a aquel chico y haría lo que hiciera falta para estar siempre a su lado.

De pronto Draco sintió que Potter se bajaba de él y se acomodaba a su lado. Draco se giró para poder verlo. ¿Ahora si podía basarle?

- He estado pensando- soltó de repente Potter- Bueno no es algo muy importante la verdad, quiero decir, si que es importante para mi, pero seguro que a ti te da igual. Incluso creo que te reirías , puedes reírte, no me importa, o sea no es que no me importes pero...

-Potter al grano- suspiró Draco.

-Creo q me gustas- dijo Potter mientras cerraba los ojos fuertemente.

Draco no era un chico con suerte, de hecho había tenido muchos malos días últimamente, pero aquel chico de gafas redondas, pelo despeinado y sonrisa hermosa le hacia el hombre más feliz del mundo.

Draco no quería a Potter, lo amaba.


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Bueno pues... aunque a veces me de ganas de borrar la historia y rendirme aquí estoy.
Prometí terminarla y eso es lo que haré cueste lo q me cueste 😅

Gracias por leer.

Drasly ;)

Como conquistar a un chico en 10 días/ DrarryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora