•.¸♡ Parte II ♡¸.•

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La noche cayo rápidamente. Y con ella los malestares que estuvieron presentes en los cuerpos de aquellos dos individuos, ajenos a su situación.

Creyendo que simplemente los malestares que tenían se irían con la noche.

Pero vaya casualidades. Porque estaban equivocados.

A medida que pasaba la noche, los síntomas o malestares que tenían ambos, solamente empeoraban.

Jungkook había vomitado dos veces y su estómago aún se sentía susceptible. Ni tan siquiera pudo probar el seolbing que yoongi le había comprado.

A manera de disculpa, por haberlo dejado "accidentalmente" sólo.

Si, como no. Jungkook no le creyó la patética excusa que le había dado su hermano.

Pero volviendo a su "enfermedad" el pequeño siente como si su alma fuera arrancada de su cuerpo, y por mucho que sienta miedo. Él no le dirá a Yoongi nada de nada.

Porque su hermano había decidido pasar la noche en su apartamento, así que si se va a quejar de dolor. Prefiere hacerlo en silencio, a alarmar a su hyung. Porque de seguro lo que comió temprano y le cayó mal.

Por otro lado taehyung estaba en las misma condiciones que jungkook, o quizás peores.

Era la cuarta vez que se levantaba a vomitar en la noche. Y aunque su hermano jimin le haya preparado un te de manzanilla, las náuseas y el mareo seguían presentes.

Taehyung sentía como si el alma se le escapara del cuerpo.

Tenia espasmo, fiebre alta. Pero aún así se negó de ir al médico. Hasta había tenido una pequeña discusión con su hyung.

Pero taehyung odiaba los hospitales, el jamás, jamás de los jamases iría a pisar uno en su endeble vida.

Así que, fingió estar mejor y para parar la discusión con jimin, se había ido a su cuarto a recostarse. Temblando del frío.

Observó por la ventana como la luna estaba brillando en su mayor apogeo, y sonrió cálidamente por fin cerrando sus ojos, dejándose ganar del sueño y el cansancio.

Esa noche ambos soñaron lo mismo. Esa misma noche los talismanes hicieron de las suyas.

"Por favor as que pare, que no duela. Por favor huye.... Corre, yo.... estaré detrás de ti, corre amor mío. Protegete

A la mañana siguiente, ambos se despertaron con sudor en la frente, acalorados como si hubieran corrido una maratón.

Desorientados y un poco aturdidos, ambos refregaron sus ojos, intentando disipar el sueño.

Sin percatarse de su alrededor. Ambos se pusieron de pie, caminaron aún soñolientos hacia sus baños, y enjuagaron sus bocas.

La misma rutina repitieron los dos, tomaron un poco de agua y se lavaron el rostro, para así disipar cualquier chispa de sueño.

Uhg, cuando se vieron en el espejo, pegaron los dos al unísono el mayor gritó de su vida. Haciendo que obviamente sus hermanos mayores llegarán corriendo a sus cuartos asustados por tremendo gritó.

Q-que mierda.... —murmuro jungkook al verse en el cuerpo de taehyung.

Oh, puta madre.... —habia maldecido taehyung al verse en el espejo, y comprobar que ese no era su rostro. Sino el rostro del punk.

— ¿Que diablos te pasa? —habia preguntado Yoongi al entrar al cuarto de su menor.

— Yoongi-ah.... —solto inconscientemente.

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