Parte 6 Compartiendo tiempo.

2K 202 51
                                    

El pelinegro estaba con su madre y hermana viendo una película. Poner el celular en silencio era la principal regla en la noche de películas.

De repente el timbre de la casa sonó, era su padre que llegaba de trabajar.

–Ya llegué familia– Se reportó el alfa aflojando el nudo de su corbata, mientras se dirigía a la sala donde sabía que estarían –¿Noche de películas?

–Así es ¿Te nos unes? – Comentó su cariñosa esposa.

–Sí, solo iré a cambiarme. Ah y Loki una chica te espera en la entrada– Finalizó su padre de decir despreocupadamente.

–Uuuh una chica– Dijo pícaramente su madre.

–¡Vaya!, hubiera jurado que sería un chico– Comentó Hela recibiendo una mirada amenazadora del pelinegro.

Loki se sorprendió al ver Sigyn tan bien vestida y en su casa.

–Hola Loki– Le saludó feliz como siempre.

–Sigyn ¿Pasa algo?

–Bueno no respondías mis mensajes así que quise venir personalmente a tu casa, ¿Estas ocupado?

–No, para nada, no respondía porque tengo el celular en silencio y tenía poca batería, a lo mejor ya se apagó.

–Bueno no te preocupes, solo venía a invitarte al convivio que se hace en la plaza los domingos, la de hoy tiene un encanto especial.

–Hmmm no lo creo Sigyn, no me siento como para esas cosas.

–Peter me dijo que también iría, pero estará con alguien y no quiero estar sola.

–¿Pasa algo hijo?– Preguntó su madre quien había escuchado parte de la conversación en su camino a la cocina.

–Nada, Sigyn quiere que la acompañe a un festejo en la plaza.

–Que bien se escucha, deberías ir.

Ya se esperaba esa respuesta de su madre.

–Incluso te voy a encargar que vayas para que nos digas que tal esta e ir el próximo domingo todos juntos.

El pelinegro suspiró conociendo a su madre y como no le dejaría hasta que aceptara.

–Pasa, en 15 minutos me alisto.

○○○○○○○○○○○○○○○○○○○○○

–Wade ¿Qué te parece si compramos una nieve de fresa, o mejor una crepa o palomitas caramelizadas?

Peter desbordaba felicidad. No recordaba la última vez que lo había sonreír tanto y tan emocionado. Quizás se podía comparar con el momento en que comenzaron su relación.

–Pide todo lo que quieras Peter.

De repente escuchó el comentario de una persona que los veía a lo lejos –Que tierno, padres así ya no se ven–

Era cosa de siempre escuchar ese tipo de comentarios, pero ver la sonrisa de Peter hacía que quedaran de lado, a lo menos mientras estaba junto a él.

–Ten, te compre una crepa– Dijo el chico regresando de un puesto.

–¿Nos sentamos a comer?

El chico asintió y encontraron un buen lugar donde casi no había personas.

–¿Esta buena? – Le preguntó curioso Peter.

Wade masticó rápido para poder contestar –Sí

Mi instinto de protegerte.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora