♦♠ XV ♣♦

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Ese mismo día, SeokJin y NamJoon se encargaron de aquella visita molesta que había irritado al mayor a un nivel que el de 23 jamás quiso haber conocido. NamJoon casi escapa del lugar al SeokJin solo alzar la voz. El hombre no dejaba de insistir en o vender, comprar, hacer un intercambio de altos precios.

- No voy a hacer nada de eso, no le venderé ningún tipo de droga por tan poco precio, no compraré nada de lo usted quiera darme por un precio tan alto y mucho menos intercambiar lo que a usted le de la gana y le salga de los pantalónes. -informó SeokJin con fuerza y rapidez, estaba realmente molesto por la incompetencia de aquel hombre frente a él.

El sirviente y algunos guardias de seguridad llegaron a agarrarle un poco de miedo al tono fuerte que SeokJin usaba contra aquel hombre que tenía mucho más poder que él, su propia persona siendo el que peligra que ese tipo pueda hacerle cualquier cosa; pero SeokJin era uno que defendía sus creencias y lo que quería. El de 27 se levantó acomodando su saco de vestir.

- Larguese de mi casa, ahora. - ordenó.

- ¿Acaso eso es una maldita orden, escuincle? -SeokJin, lo miró y luego arqueó una ceja. - ¿Qué me harás? ¿Amenazarme?

- No tienes idea de lo que puedo hacer. - frunció el ceño y miró a los de Seguridad. - ¿Podrían por favor sacarlo de la casa?

Los guardias asintieron con rapidez y agarraron al hombre de los brazos a la fuerza. SeokJin estaba casi hecho furia, pasó por un lado de todos y fue a su cuarto cerrando de un portazo. NamJoon se quedó detrás del sirviente quien lo miró de reojo. El menor entre los novios fue al cuarto del de 27 para tocar la puerta.

- ¿SeokJin? ¿Todo bien? -el mayor abrió la puerta, para así ver a NamJoon.

- Sí. Solo necesito desestresarme. - mencionó SeokJin.

- ¿Necesitas haga algo por tí? - SeokJin negó un poco.

- Quiero descansar luego de ducharme. - NamJoon asintió.

- ¿Quieres ir a mi cuarto a descansar? - SeokJin sonrió y asintió.

- Iré, solo deja que me duche y ponga cómodo. - NamJoon sonrió para ir a su cuarto y esperar a SeokJin.

El de 27 pronto llegó a la habitación, tocando suavemente la puerta y luego entrando con cuidado después de escuchar un leve 'pase'. NamJoon al ver a SeokJin se sentó en su cama y abrió sus brazos. El mayor miró el cuarto, acercandose al de 23. El cuarto era de colores oscuros y toques rojos por doquier, se sentó en el suave colchón de la cama y abrazó a NamJoon, que había notado la mirada levemente curiosa de SeokJin.

- No te gusta. - susurró escondiendo su rostro entre el cuello y hombro de SeokJin.

- Es muy oscuro; pero esta bien. - NamJoon suspiró y miró a SeokJin.

- Tampoco era como que lo iba a decorar de otra manera por ti. - Mencionó serio y SeokJin rió.

- Entiendo. - se separó un poco. - No es que me importe como decoras tu habitación.

Ambos se recostaron y sonrieron con ternura para descansar un rato. Las horas se pasaron rápido ambos estaban dormidos mientras se abrazan, fue cuestion de unas horas a que alguno se despertara y comenzara a mirar al otro, admirandolo, esperando a que despertara para llenarlo de besos hasta el amanecer.

- ¿Qué? - SeokJin despertó y se estiró sobre la cama para después alcanzar la lámpara a su lado.

- Nada, te ves bonito mientras duermes. - acarició la mejilla de SeokJin para robarle un corto beso. - Me desperté con ganas de besarte toda la noche.

¿Apostamos? {NamJin}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora