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Yoongi.

Llegue demasiado temprano a la escuela, quería aprovechar que no había nadie para hacerle una pequeña broma a Jungkook, quiero ver su reacción. Coloque una cubeta de agua arriba de su casillero, solo tengo que esperar para que llegue y jalar la cuerda y que el agua caíga en su cuerpo, será divertido.

Salí afuera de la escuela para esperar a Jungkook, todos empezaron a llegar, vi a lo lejos a la rata, me sorprendí al verlo con su noviecito ese, me metí a la escuela preparando todo, vi como la rata llegaba con sus amigos, me preparé, él se acercó a su casillero sin percatarse de la sorpresita que le tenía, que estúpido es. Él abrió su casillero y yo jale la cuerda, la cubeta de agua se dio la vuelta y empapo a Jungkook.

Él se sorprendió, el enano y J-hope se quedaron con la boca abierta, todos se empezaron a burlar de Jungkook, él volteo y se encontró con mi mirada, me encogí de hombros y reí, puso su ceño fruncido y tomo su mochila de gimnasio, camino a este, todos se estaban riendo de él y yo igual.

Decidí seguirlo, vi como se metió a los vestidores de hombres, yo también me metí, lo vi quitándose la ropa, su cuerpo ya lo conocía pero no así con la luz del día, mi pantalón me empezaba apretar, ¿me está provocando acaso?.

¿Quieres que te ayude?– me recargué en la pared y él brinco, me miró y giro los ojos.

–¿Qué diablos quieres?, ¿no te bastó con mojarme?– gruño y yo sonreí.

Sólo quería darte una sorpresita– sonreí y me acerqué a él, él me tomo del cuello y yo quite mi sonrisa por una expresión sería.

Pues tus malditas sorpresas no van conmigo. Ten mucho cuidado Yoongi, no quieres que se enteren que te acuestas con cualquiera o más bien, que eres un niño en la cama o aún mejor, que inventas una relación falsa, eso suena mejor, ¿No?– sonrió y yo quite sus manos de mi camisa, lo tome del cuello y lo pegué a la pared.

Ten mucho cuidado Jungkook, di algo y tu vida será una verdadera mierda por el resto del año– susurró en su oído y él me empuja, lo miró y él me fulmina con su mirada.

Lárgate, quiero cambiarme– giró los ojos y se puso su camisa del Instituto.

No quiero, ya vi todo eso– me crucé de brazos, él bufo, veía como se cambiaba y mi erección se hacía más grande ocasionando que mi pantalón me apretara. Jungkook terminó de cambiarse y empezó a meter su ropa en su mochila deportiva, me acerqué y lo abrace por atrás, él brinco, empecé a besar su cuello, necesitaba quitar mi erección y Jungkook era el indicado.

Sueltame Yoongi, tengo que ir a clase– no quería soltarlo, él tiene que ayudarme a bajar mi erección.

No te irás de aquí tan rápido– empecé a acariciar sus pezones por encima de su suéter, él se soltó de mí agarré, tomó sus cosas y me miro con asco y odio.

Arregla tus problemas sólo, pervertido– camino a la salida y yo hable antes de que saliera.

Ya verás rata dije amenazante y él me ignoro por completo, ¿Ahora como voy a bajar mi erección?, me va a empezar a doler la polla, carajo, pero Jungkook no se libra, ya llegará el receso y no tendrá tiempo de desayunar.

Salí de los vestidores y me encamine a mi salón de clase.

No prestaba atención a la clase, más bien pensaba en como le haría para que Jungkook se alejara de su novio, no puedo seguir mi plan si tengo algo que me estorba; enamorar a Jungkook será más difícil de lo que creí, si tengo a ese bastardo en mi camino no podré hacer bien mi plan, tengo que hacer que la relación de esos dos fenómenos termine en un dos por tres para así poder seguir con mi plan malévolo.

Pervertido /BTS/ Yoonkook. ●Intentó de Edición●Donde viven las historias. Descúbrelo ahora