La casa de mi tía era enorme, como una mansión.Perfectamente podría perderme. Subí a mi habitación la cual era el doble de grande que mi antiguo salón.Me di una buena ducha para tranquilizarme y mentalizarme.Guarde y coloqué todas mis pertenencias en mi cuarto.Era muy bonito pero necesitaba algo más de decoración.También conocí a los empleados de mi tía, eran muy simpáticos. Mi tía me llamó y yo bajé corriendo para ver qué quería. -¿Quieres ir hoy al centro comercial? necesitas ropa y zapatos nuevos.Hoy vas a conocer a nuestra vecina que es muy simpática. -Esta bien.-Le sonreí.
Nos fuimos en coche, por el camino me estuvo explicando que está mujer estaba divorciada y tenía dos hijos, uno de mi edad. Cuando llegamos empezamos a entrar en muchísimas tiendas.Las dos íbamos cargadas de ropa. -¿En serio te puedes permitir todo esto?.- -Nunca suelo gastarme mi dinero, siempre ahorro, por eso muchísimo dinero.Cuando quieras algo que sea legal, me lo dices.-Ambas nos empezamos a reír.
En el fondo sabía que intentaba animarme, pero nunca he sido muy materialista.Lo único que quería en ese momento era a mis padres.
Al llegar a casa aluciné con la cantidad de ropa y zapatos que tenía para mi. Decidí ponerme un top gris, unos vaqueros y mis tennis blancos.
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Decidí maquillarme un poco, a lo natural como siempre. Bajé al salón y estuve un rato mirando la televisión. -Cariño, ¿me haces el favor de sacar al perro?.- -Claro tía.-Tenía un cachorro de pitbull, lo rescató de la calle hace un par de meses.
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Como era un cachorro muchas veces me tiraba.Me tiró tanto que me choqué con alguien. -Lo siento, el perro me tira mucho.-Dije con una sonrisa. -No pasa nada, es relindo el perro.-Se agachó y empezó a acariciarlo.-Soy Catalina, ¿y vos?.- -Yo soy Ada, encantada.- -Che vos no sos de aquí, ¿cierto?.- -Soy de España, todavía no conozco a nadie.- -No te preocupes, toma mi celular apunta.-Me dio su número de teléfono y me dijo de quedar algún día.
Volví a casa y le conté a mi tía que había hecho una amiga.Me sentía feliz.
La casa de nuestra vecina estaba a diez minutos andando de nuestra casa. -A lo mejor está uno de sus hijos, se sociable.- -Si Sara.-Mi tía pegó a la puerta y abrió una mujer muy bonita.Suponía que ella era nuestra vecina.Mi tía le dio un fuerte abrazo. -Yo soy Alícia, un gusto conocerte Ada, me han hablado mucho de ti.-Dijo con una sonrisa y me abrazó.
Al entrar vi a un niño pequeño sentando en el sofá. -Él es Emi, es algo vergonzoso, si queres habla con él mientras nosotras dos preparamos todo.-Dijo Alícia, yo afirmé con la cabeza y me acerqué a él. -Hola lindo, soy Ada.¿Qué ves?.-Me senté a su lado. -Estoy viendo mi caricatura favorita.Yo soy Emilio, pero llámame Emi, y vos sos muy linda.-Le sonreí. -Vos sos el lindo, yo soy española, a veces hablo cosas que a lo mejor vos no entiendes.- -A mi hermano le gusta mucho España, pero vos sos mía yo te conocí antes.-Era muy tierno. -Claro Emi.-Le sonreí.
Estuvimos hablando un poco más.Me levanté un momento para preguntar donde estaba el cuarto de baño. -Alícia, ¿donde está el cuarto de baño.- -Arriba cielo.- Al subir vi cuatro habitaciones, dos estaban abiertas a si que suponía que una era de Emi y de Alicia. Pegué en una de las puertas y casi entraba. -Ma ya me estoy vistiendo.- -Perdona pensaba que era el cuarto de baño.-Cerré rápidamente y me dirigí hacia el cuarto de baño.Como siempre pasando vergüenza.
Al bajar Emi ya no estaba.Se había ido con su hermano a la casa de su padre. -Mi otro hijo estaba en su habitación, ¿lo has visto?.- -No pero por casi, pensaba que su cuarto era el baño.-Sonreí incómodamente. La cena estaba riquísima.Al terminar yo fregué los platos mientras que ellas quitaban las cosas de la mesa.
Nos despedimos de ella y volvimos a nuestra casa.Llegué y me puse el pijama.Hablé un poco con Laura y comencé a llorar. Estaba bien, la gente parecía simpática pero echaba de menos a mis padres y a Laura. Mi tía entró en mi cuarto y me abrazó. -No sé qué hacer con mi vida.-Le dije mientras que me apartaba y me secaba las lágrimas. -Lo que tú veas conveniente.En estos momento todo te parece difícil e imposible pero ya verás que poco a poco todo va a ir a mejor.- -Eso quiero pero no sé Sara.- -Toma anda.-Me dio una entrada para la Fms. -De verdad que te quiero mucho.-La abracé y cuando se fue me dormí.Estaba muy cansada, tanto física como mentalmente.
