-Me voy mamá.-
-Ten cuidado y mucha suerte en tu primer día de clases.-Me dio un beso en la mejilla y me fui.
Por el camino estuve pensando sobre el instituto, la gente nueva y en Mateo.No me lo podía sacar de la cabeza ni un segundo.Cogí el autobús para ir a mi instituto el cual estaba lleno de estudiantes.Me senté al lado de un chico que llevaba los auriculares puestos.
Sabía que estaba mal mirar el teléfono de una persona ajena pero me quedé impactada al ver que tenía una foto de Mateo de fondo de pantalla.
-Oye.-Le dije al chico, este se quitó un auricular y me miró.
-Dime.-
-Sé que está mal que haya mirado tu teléfono pero no he podido evitar ver esta foto, ¿de qué lo conoces?.-Dije señalando su teléfono.
-Pues compite en la fms argentina, es mi freestyler favorito.-Dijo con una sonrisa.
-¿En serio?.-Sinceramente me puse muy feliz.-¿Me puedes contar todo lo que sepas sobre el?.-
El chico aceptó y durante todo el camino me estuvo contando cosas sobre él.Se llamaba Mateo Palacios, pero su nombre artístico era Trueno, era bastante famoso y tenía bastantes canciones en YouTube que enseguida me descargué.Manu se llamaba Manuel Vainstein y su nombre artístico era Replik.Al parecer ambos competían en la fms Argentina.
-Esta es mi parada.-Le dije con una sonrisa.
-La mía también, que casualidad que estudiemos en el mismo instituto.-Nos bajamos del autobús y nos fuimos directamente al centro.
-Mi clase está por aquí, ya nos veremos.-Me fui hacia mi clase y allí estaba Laura esperándome.Me senté junto a ella.
-Tengo información de los chicos.-
-¿¡QUÉ!?.-Todo el mundo empezó a mirarnos y de repente entró la profesora.
-Después te cuento.-
Las horas pasaron rápidas y llegó la hora del recreo.
-Cuéntame todo ya.-Nos sentamos en un banco y empecé a contarle todo lo que sabía.
-Voy a buscarle en Instagram, aunque no lo voy a seguir.-Dijo Laura.
Estuvimos hablando y mirando fotos de Manu y de Mateo durante todo el recreo.
-Illa debemos de olvidarles.-
-Lo sé, pero es complicado.-Agaché la cabeza.
-Ya lo sé, no es nada fácil pero no podemos estar comiéndonos la cabeza, seguramente ellos ya se olvidaron de todo.-Era cierto, ellos eran famosos y seguramente ya tendrían a otras chicas al rededor de ellos.Igualmente era un amor imposible, éramos de dos continentes diferentes.
Las clases acabaron y volví a coger el autobús para volver a casa.Allí estaba el chico de la otra vez, parecía que me guardaba el sitio.Me acerqué a él y me senté a su lado.
-Perdona antes no me presenté, soy Ada.-
-Yo soy Marcos.-
Estuvimos durante todos la camino hablando de nuestras vidas en general.
-¿Te apetece quedar un día para cenar o algo?.-Me puse bastante nerviosa, no sabía que contestarle, era mono y buena persona pero yo estaba enamorada de otro.
-Perdona pero yo estoy enamorada de otro chico.-
-Venga dame una sola oportunidad, solo una.-
-Vale, ¿el sábado te viene bien?.-
-Me viene perfecto.-
Al subir a mi casa me tendí en mi cama y comencé a pensar en Marcos.Era un chico bastante agradable pero a mi me gustaba Mateo.Si que es cierto que yo debía de olvidarme de él y comenzar a fijarme en otros chicos y Marcos era un buen candidato.
Agarré mi teléfono y empecé a mirar el Instagram de Mateo, aunque se
llamaba Trueno en Instagram.
Mateo era tan guapo que se me caía la baba cada vez que veía fotos suyas.
-Joder no puedo seguir así.- Dije en voz alta.
Estaba completamente enamorada de un Argentino famoso.Era un amor tan complicado que cada vez que pensaba en él se me hacía un nudo en la garganta.Aunque yo seguía con esa sensación de que lo vería de nuevo.
Hoy era veintidós de septiembre, eso significaba que era mi cumpleaños.Ya había pasado justamente una semana de que salí con Marco.
Me levanté de mi cama para asearme y me dirigí hacia la cocina donde estaban mis padres.
-Cariño para desayunar te he echo tortitas.-Mi madre me conocía perfectamente.-Desayunamos todos juntos y ahora abres tus regalos.
Estuvimos desayunando todos juntos en mi cocina y después nos dirigimos hacia mi salón para abrir los regalos.
-Estos son de tus abuelos, tus tíos, de nosotros y de un desconocido.-Dijo señalando cada caja, la última era la que más me llamaba la atención.
Abrí todos los regalos menos el último, ese lo quería abrir en mi cuarto.
Lo puse en mi escritorio y con ayuda de las tijeras conseguí abrirlo.
A dentro había una pequeña carta:
"¿Posta te creías que me iba a olvidar?
Disfruta de tus diecisietes y vete de joda todos los días."
Se me saltaron las lágrimas, adentro había una camiseta y una chaqueta Adidas que olía a él.
Después de este maravilloso regalo, decidí pasar pagina y empezar con Marcos.Sabía perfectamente que no me gustaba del todo, pero hice lo peor que se podía hacer en este mundo, utilizar a otra persona para olvidar a otra.
