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Cap (2/3)

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Recién acababa de terminar la video llamada que sostenía con su madre y su hermana por lo menos una vez por semana. Ellas estaban felices de saber que las cosas en White Hole estaban yendo bastante bien. Además de seguir así, pronto podría enviar por ellas, aunque lo más probable era que eso sucediera cuando las clases de Gracey terminaran, así no tendría que cambiarse de escuela a mitad de semestre.

Las echaba tanto de menos. Poder llegar a casa y abrazarlas después de un largo día. Poder probar la comida de Gracey. Poder escuchar a su madre hablar sobre todo y nada...si, echaba de menos todo eso, pero se consolaba pensando en que pronto estarían juntos de nuevo.

Se puso en pie dispuesto a ir a la cocina y lavar los platos que había usado para la cena, cuando su teléfono empezó a timbrar. Se trataba de Goff, así que respondió tan rápido como pudo y esperaba cualquier cosa, menos lo que su amigo y compañero le dijo.

"Tengo una cosita ebria que se autoesposo a una reja..." eso basto para dejarlo completamente descolocado. Ni bien la llamada terminó, corrió a su habitación para ponerse un par de pantalones y una sudadera pues andaba simplemente en boxers y luego corrió fuera del apartamento.

Su mente corría hacia todas direcciones tratando de encontrar una razón por la cual Thomas Carrington estuviera ebrio y esposado. No lo conocía bien, pero podía jurar que el lindo castaño no era de los que disfrutaba embriagándose para luego armar escándalo.

Logró conseguir un taxi en una de las avenidas principales y le pidió al conductor que fuera tan rápido como puidera. El club sunshine estaba cerca del centro, pero no en las calles principales por lo que fue un poco difícil llegar y más aun cuando toda la revuelta policial había provocado un poco de tráfico.

Había exactamente cuatro patrullas estacionadas y aun quedaba bastante gente curioseando a los alrededores. Pero Dima no necesitó acercarse demasiado para escuchar a Thomas.

—¡Quiero a mi oficial engreído! — gritaba en chico mientras se recargaba contra la reja que bordeaba el estacionamiento del club. Algunos de sus compañeros policias observaban la escena con obvia diversión, otros parecían aburridos...seguro acostumbrados a cosas peores. Y luego estaba Norman Garrick que estaba cerca de Thomas viéndolo como si quisiera golpearlo, eso basto para que Dima se acercara sin dudarlo.

Goff fue el primero en verlo y no dudo en acercarse con la expresión entre aliviada y preocupada.

—Hombre, que bueno que llegaste— susurró dándole una mirada furtiva al lindo castaño— un par de minutos más y estoy seguro de que Garrick hubiera arrancado a tu chico de esa reja.

—Gracias por avisarme— dijo a cambio acercándose hacia donde Thomas estaba. —Hey ¿qué se supone que estas haciendo?— dijo con suavidad hacia el chico, consciente de que en ese momento, Garrick, ya había notado su presencia.

El lindo castaño giró el rostro, sus ojos un poco desenfocados, pero cuando lo reconoció, le regalo una sonrisa melosa que hizo al corazón de Dima saltarse un latido. Joder, que incluso ebrio era una hermosura.

—Pero si es mi oficial engreído — dijo arrastrando las palabras, al tiempo que intentaba darse la vuelta olvidando que una de sus manos seguía enganchada a las esposas —Auch.

—Tranquilo, déjame arreglar eso para ti —extendió una mano hacia Goff y este entendió al instante entregándole la llave de las esposas. —Listo, ahora eres libre.

El chico se le tiró encima abrazándose a su torso y frotándole la mejilla contra el pecho. Dima estaba al tanto de que la repentina actitud amistosa de Thomas se debía al alcohol, pero eso no quitaba que se sintiera bien tenerlo tan cerca. No estaba echo de piedra como para no sentir el calor del cuerpo contrario o notar lo bien que encajaba entre sus brazos.

Un Beso Real (Suerte # 5.5)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora