Misión n° 4396: "Ethical Hacking" Final.

1.2K 100 83
                                    

Saeyoung estuvo durante tres días con fiebre, y con los restos de la droga que Melissa le había inyectado en su cuerpo. El hecho de tener fiebre, era un bien indicio según indicaba Melissa, ya que el cuerpo de Saeyoung estaba reaccionando como debería. Solo necesitaba de un par de días para descansar, sin embargo, de todas formas lo mantenían en observación. No lo dejaron levantarse de la cama, así que le dejaron su computador a sus pies, y le prometieron que dentro de tres días se enfrentarían a él para continuar con el entrenamiento.

Mientras tanto, Vanderwood estaba preocupado y un poco desconfiado al respecto. Quizás debió intervenir antes de que Melissa le inyectara la droga, pero tampoco es que Saeyoung se encontrara tan mal en este momento, es solo que su cuerpo necesitaba descansar. Es más, estaba consciente, despierto en su habitación, pero no se encontraba saltado o moviéndose por todas partes como lo hacía habitualmente. Vanderwood no pudo evitar desconfiar de su compañera.

- ¿De dónde sacaste esa droga? – le preguntó un día Vanderwood a su compañera, cuando ella estaba bebiendo un café en la cocina. Melissa se sorprendió por lo inesperada de su pregunta, pero al parecer era algo que le daba vueltas en la cabeza a Vanderwood. Debía ser sincera.

- Hace mucho tiempo, en una misión, me inyectaron esa droga. Las mismas personas a las cuales nos enfrentaremos pronto. – dijo Melissa, con mucha seriedad, pero sin dar muchos detalles.

- ¿Te refieres a Ethical Hacking? – preguntó Vanderwood sin poder creer demasiado.

- No exactamente, pero tampoco están tan alejado de ellos. – dijo Melissa, arqueando los hombros. Vanderwood la miraba sin entender.

- ¿Por qué tanto misterio?

- No es necesario que sepas demasiado. No hagas tantas preguntas que sabes que no puedo responder. – dijo Melissa, seriamente. Vanderwood asintió. Sabía lo que eso significaba, así que simplemente dejó de hacer tantas preguntas. Vanderwood se acercó a su espalda, y depositó un beso en su cuello, mientras la abrazaba por la cintura. Melissa se sobresaltó. Desde que habían tenido sexo el día anterior que no habían tenido ningún tipo de contacto. - ¿Qué haces? – le preguntó, sin entender mucho el comportamiento de su compañero.

- No hacer tantas preguntas. – le dijo, para volver a besarla en el cuello mientras Melissa tenía las manos ocupadas con su café.

Ella lo dejó en un encimero de la cocina, para voltearse, y rodearlo con sus brazos por su nuca. Melissa lo besó con mucha pasión, mientras Vanderwood atraía su cuerpo con sus manos. Cuando dejaron de besarse, ambos sonrieron. Sabían lo que aquel beso apasionado significaba. Vanderwood tomó con entre sus dedos el mentón de Melissa, sonriendo, mientras ella sentía como comenzaba el calor abrasador de su intimidad, y se producían justo gracias a aquellas dos iris castañas que la miraban con deseo.

Podía sucumbir ante él cuantas veces quisiera, cuantas veces fuera necesario para que aquel calor que sentía se apaciguara. Pero por más que lo intentaba, su cuerpo lo ansiaba cada vez más. Deseaba consumirse en aquel fuego que emanaba de su cuerpo, en aquel deseo sobrenatural que le devoraba, en aquellas sensaciones que solo el cuerpo del otro le entregaba, en aquel jugueteo de manos ardientes que se buscaban. No deseaba evitarlo, porque mientras más lo hacía, más se volvía ansiosa. Así que Melissa decidió solo dejar desatar sus pasiones, después de todo, ¿qué podría salir mal? Solo era sexo.

- ¿Dónde te hiciste esa herida? – le preguntó un día Vanderwood, mientras estaban desnudos en la cama.

- Sabes que no tenemos permitido hablar de misiones. – respondió Melissa arqueando una ceja. Vanderwood rió.

Interlace «Mystic Messenger» [Saeyoung/MC/Vanderwood]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora