🌔38🌖

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A la mañana siguiente Jaebum y yo nos despertamos aún con el cielo obscuro, preparamos algo de ropa en una mochila y avanzamos por el gran salón para partir.

Coco apareció de la nada y comenzó a ladrar emocionada. Creía que la llevaríamos con nosotros.
Traté de calmarla porque sonaba demasiado fuerte para tan tempranas horas, pero al contrario de lo que intentaba lograr, se emocionaba más.

─Llévala a la habitación de Mark y le cierras la puerta ─dijo Jaebum en susurros.

─¿Estás loco? Lo va a despertar.

Jaebum negó con la cabeza.

─Está de guardia esta noche, ahí no hay nadie.

Hice una mueca y después tomé a Coco entre mis manos y la llevé.
Me emocionaba el hecho de que no me provocara alergia, podía acostumbrarme a ella. Y al parecer, ella ya estaba acostumbrada a mí.

La dejé en la habitación y cerré. Oí como se quejaba pero traté de que no me afectara.
Pobre, solo quería pasear. Pero nos retrasaba.

Aún con el retraso de Coco, logramos marchamos antes del amanecer. Nos transformamos para poder viajar con más rapidez. Tengo que admitir que yo disfrutaba mucho de los aspectos de mi forma de lobo. Mis sentidos se habían agudizado, y con cada transformación adquiría más sensibilidad. Me sorprendió lo natural que encontré el hecho de cambiar entre una forma y otra, con el simple hecho de pensarlo.

Perdí la noción del tiempo y, sin embargo, de alguna manera supe que estábamos llegando a nuestro destino. No podía explicarlo. Mi paso se fue volviendo paulatinamente más lento; pasé de correr a caminar, y finalmente me detuve por completo. Respiraba con más dificultad de lo normal, los nervios me controlaban.
Al fin conocería todos los secretos. Mis padres habían muerto ahí.

Jaebum se dio cuenta de que aminoraba el paso y de que no iba a su altura. Aún con su forma de lobo, volvió a mi lado y dejó caer la mochila a mis pies. Después se apartó de mi vista y se metió detrás de un matorral. Yo me transformé, me puse un pantalón corto y una camiseta de tirantes. Le arrojé la mochila.

Escasos minutos después de que él volviera a mi lado, vestido igual que yo, y con forma humana, él me dijo:

─¿Reconoces el lugar?

Me tomó de la mano.

─En realidad no. Y sin embargo sé que es aquí.

Comencé a sentir escalofríos conforme avanzaba, los matorrales se espesaban y la luz del día comenzaba a apagarse. Yo sabía que, con los años transcurridos, me sería difícil ubicar con exactitud el sitio. Las cosas cambiaban, algunos árboles habrían muerto y otros habrían crecido. Pero al ver un muro de pierda cuya base estaba recorrida a lo largo de un denso matorral, lo supe.

Me arrodillé para apartar el matorral y descubrí una pequeña cueva. Las imágenes me bombardearon.

Escondite

─¡Silencio, Youngjae!

Mis padres…

Me puse de pie rápidamente, con la respiración entrecortada, y miré a mi alrededor.

─¿Jae?

─Recuerdo cosas. Me trajeron aquí. Querían… ─Me dejé caer al suelo y enterré la cara en las manos─. Se transformaron. ¡Eran fantásticos! Cuando oímos a los cazadores gritando que habían visto lobos… hubo disparos. ¡Y sonaban muy fuerte!

Luché por recordar más y más. Jaebum se arrodilló a mi lado y puso la mano sobre mi rodilla.

─No lo fuerces ─dijo él.

Yo sacudí la cabeza.

─No, yo… mamá me empujó dentro de esa cueva. Entonces se transformó en humana y se vistió. Los cazadores estaban ebrios. No dejaban de disparas para todos lados. Era un caos.

Sacudí la cabeza de nuevo. No veía nada con claridad. Lo único que sabía era que mis padres tenían forma humana en el momento de morir, porque estaban vestidos. A los dos les habían atravesado el corazón.

─Me quedé esperando, aterrorizado y en silencio ─continué yo, desviando entonces la vista hacia la pequeña cueva, en ese momento oculta─. Oí pisadas. Era uno de los cazadores. Me encontró y me sacó de ahí. Supongo que jamás tendré todas las respuestas ─dije, volviendo entonces hacia Jaebum─. Creo que mis padres querían mostrarme que eran para que yo no tuviera miedo. Pero después de lo ocurrido, yo siempre he tenido miedo. No comprendía que era a lo que ellos trataban de evitar que le tuviera miedo.

─¿Aún tienes miedo? ─preguntó Jaebum.

─No ─contesté. Toqué su mejilla─. Ahora te tengo a tí.

─Por el resto de mis días, Jae ─dijo él.

Esa noche acampamos cerca de una serie de pequeñas cascadas.

De pie, bajo el gran cielo negro, yo me incliné hacia atrás y me apoyé sobre el pecho de Jaebum. El me estrechó con los brazos y bajó la cabeza para acariciarme y besarme el cuello.

Solo debía esperar por la luna para haber encontrado a quien amaría por siempre. Y estaríamos juntos al menos mientras ambos respiremos.

Alcé la vista a la luna. Menguaba hacia la oscuridad.

Aún nos acechaba el peligro ahí afuera. Bio-KR no se daría por vencido tan fácilmente. Pero nosotros tampoco.
Lucharíamos junto a los guardianes, porque yo ya era parte de ellos. Y estaba seguro de arriesgarme a cualquier situación. A enfretarme a quien sea necesario para radicar ese mal.

Esa noche, sin embargo, estábamos a salvo.

Me di la vuelta en brazos de Jaebum. Él inclinó los labios sobre los míos y me besó intensamente. Su sabor y su fragancia natural me embriagaron en un segundo. Confirmándome así, lo mucho que lo amaba.

Y de momento, me bastó con eso. De momento, eso lo era todo para mí.

×××××

WUUUUUUUU.

YA TERMINAMOS ESTO PERSONITAAAAAAAAAAAAS.

Vamos a llorar todos :'u

La otra parte (y última) es el epílogo que se encuentra enlazado con algunos capítulos de Full Moon. Y bien ¿qué quiero decir con esto? Pues que cuando lleguemos a una parte específica de Full Moon pues publicaré aquí el epílogo.
Si me explico, ¿no? Jajajaja.

¿Qué más puedo decir? Muchas gracias por todo, All World sabe que las historias no triunfan si no hay personitas que las lean. Y yo las tuve a ustedes ;;
Deseo que este proyecto siga avanzando bien y pues que todos vayan y sigan conmigo en Full Moon.

Las espero, personitas.
Las tqm, I'm out.

20.08.19

#1GO MOONLIGHT || 2JAE ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora