Get It Up, Baby! 'Cause I'm An Animal...

4.6K 373 354
                                    

Hola! Hola! ٩(^ᴗ^)۶

TERCERA ADVERTENCIA: Si, es justa y necesaria. Esta historia NO promueve las relaciones tóxicas ni trata de romantizar las violaciones bajo ningún concepto, recuerden que esto es FICCIÓN con el ÚNICO fin de entretener. 

Ya empezamos con el PWP, aunque debo admitir que este capitulo es bastante ligero, lo mejor vendrá después, se los prometo! ┌|゚з゚|┘

—0—

Akutagawa abrió los ojos con pesadez, sentía el cuerpo completamente entumido y un insoportable dolor de cabeza. La habitación en la que se encontraba estaba sumida en la más profunda oscuridad, la única luz visible era la que se colaba por debajo de la puerta. El azabache se sentó, tratando de enfocar mejor el lugar en el que se encontraba, sintiendo la textura de plástico de aquel colchón inflable sobre su desnuda piel...

"Un momento..."

—¡¿QUÉ MIERDA...?! —Buscó con desespero su ropa, o en su defecto una sábana con la cual cubrir su desnudez.

"¡¿Dónde estoy?! ¿Qué es lo que este psicópata quiere de mí? ¡Tengo que buscar una salida de aquí!

Gateó a tientas por el suelo, palpando a su alrededor tratando de hallar algo que lo ayudara a defenderse o cubrirse. Sus pupilas estaban completamente dilatadas, buscando adaptar su visión a la pobre iluminación del lugar. Nada, no había absolutamente nada en ese cuarto. Recorrió el lugar de esquina a esquina, cruzando por el centro, el eco de las descalzas plantas de sus pies era lo único que rompía la quietud del ambiente.

"¡¿Qué mierda está ocurriendo aquí?! ¡¿Dónde diablos estoy?! ¡¿Dónde está mi ropa?! ¿Y si ese malnacido regresa...?

—Tengo que guardar la calma... Tengo que guardar la calma... —Akutagawa respiró profundamente un par de veces, alejando la turbulenta neblina de miedo que comenzaba a envolver sus pensamientos. —Debe haber otra manera de salir de aquí, una ventana o una rejilla de ventilación.

El azabache estaba a punto de comenzar de nuevo a recorrer la habitación cuando escuchó unos pesados pasos detenerse detrás de la puerta, después de unos segundos se escuchó el sonido de una cerradura comenzar a ser abierta. Con rapidez y sigilo, Akutagawa se escondió en una de las esquinas del cuarto que quedaba paralela a la puerta. Pensó que, si él no podía ver nada en la oscuridad, su atacante tampoco podría lograr verlo.

Aquella podía ser su única oportunidad para poder escapar, esperaría el momento adecuado y atacaría a su captor por la espalda, aplicándole una de las muchas maniobras de defensa personal que Kunikida le había enseñado en los entrenamientos que tenían en la Agencia. El desconocido entró a la habitación con tranquilidad, cerrando con un suave empujón la puerta detrás de él y volviendo a ponerle el seguro. De nuevo todo quedo sumido en la más absoluta oscuridad.

—¿Jugando a las escondidas, mi amor? —Akutagawa contuvo la respiración, guiándose de su sentido del oído para localizar al extraño dentro de la habitación. —¿Por qué no vienes y te acercas un poco más? Te prometo que no voy a morderte, a menos que tú quieras.

De nuevo aquel timbre de voz que le resultaba vagamente familiar, pero al mismo tiempo sonaba tan desconocido.

—Si no vienes... —Una profunda risa resonó en las vacías paredes. —Entonces yo iré por ti, cariño.

Akutagawa se pegó aún más a la pared, tratando de fundirse con el frió cemento. Escuchó al extraño comenzar a moverse por toda la habitación, el seco sonido de sus botas mantenía al azabache en estado de alerta máxima, mirando hacia todas las direcciones posibles para tratar de adivinar donde aparecería su captor. Atsushi miraba las reacciones del detective gracias a su habilidad, deleitándose con su incertidumbre y miedo, disfrutando los ligeros temblores de su cuerpo desnudo y el sudor que recorría su blanca piel haciéndola lucir más apetecible.

Animal Attraction.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora