Animal Attraction.

Forever Yours, My Pretty Boy.

Hola! Hola! ٩(^ᴗ^)۶

Y en el capítulo de hoy aprenderemos a como chantajear a nuestro crush con algo que tenga alto valor sentimental para él/ella (｀∀')Ψ

Waaah estamos a unos 3 o 4 capítulos más para que esto acabe! Espero estén tan emocionados como yo ┌|ﾟзﾟ|┘

Bueno, sin más que agregar, disfruten la lectura!

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Akutagawa descansaba sobre el cómodo colchón de la cama, básicamente era lo único que hacía desde que Atsushi lo secuestró y lo dejó encerrado en ese lugar. Durante todo el día el albino estuvo pegado al azabache como una garrapata, colmándolo de atenciones innecesarias, abrazos asfixiantes, besos cariñosos, caricias tranquilas y muchísimas palabras bonitas revestidas en azúcar. Se habían bañado juntos en la enorme bañera que el menor tenía en su cuarto de baño personal, el ex mafioso se encargó de darle un profundo masaje a los entumidos y adoloridos músculos del detective, besando cada herida con amoroso cuidado.

Akutagawa se encerró en una burbuja de indiferente mutismo helado, ignorando la presencia del albino, dejándose hacer como si no fuera más que un simple títere sin voz, sin capacidad de moverse. No tenía intención de cruzar ni una sola palabra con el menor, mucho menos ahora que estaba seguro que sus compañeros en la Agencia lo estaban buscando, que Tanizaki lo estaba buscando con tal desespero; Atsushi se había dado cuenta rápidamente del radical cambio de actitud en el actuar del azabache, comenzando a sentirse mal por la manera en la cual lo había tratado horas antes.

—Ryuu... —Lo llamó después de que ambos terminaron de comer en la habitación, sentados sobre el colchón.

Akutagawa ni siquiera lo miró, sus ojos grises estaban clavados fijamente en el colchón, como si fuera a encontrar ahí la respuesta a las interrogantes más importantes del mundo, como si el colchón fuera la octava maravilla del mundo; Atsushi dejó escapar un suspiro de molestia, pero con un profundo matiz de culpabilidad. Sabía que el único responsable por la fría indiferencia del detective era él mismo, por haber forzado al azabache a mantener relaciones sexuales sin su consentimiento, por haberle gritado, por haberle rasguñado y mordido como si no fuera más que un simple pedazo de carne que podía usar a placer.

—Conseguí un enorme pay de higos solo para ti... —El albino sonrió apenas un poco, dulcificando el sonido de su voz. —Podemos comerlo juntos...También puedo conseguir un poco de té con bastantes cubos de azúcar ¿Qué dices, cariño?

Akutagawa seguía sin mirarlo, el azabache apenas y parecía respirar de lo recto e inmóvil que estaba, la expresión de su rostro era más muerta y plana que la de una pared. Atsushi sentía una fuerte molestia pulsar en su pecho, odiaba ver esa expresión en el hermoso rostro del detective, lo odiaba con todo su ser pues lucía exactamente igual a la expresión que él solía tener cuando estaba bajo la "protección" de Dazai, además de que la pequeña Kyoka también portaba una expresión bastante muerta todo el tiempo cuando ambos realizaban misiones para la Port Mafia.

Recordar su pasado no era algo que el albino encontrara agradable, muy por el contrario, odiaba tener que acordarse de todo lo que vivió durante su juventud antes de conocer al señor Mori; los horribles entrenamientos con los que Chuuya disfrazaba su odio hacia él, las torturas físicas y psicológicas de Dazai, tener que rememorar todas esas veces en las cuales acabó sin piedad con la vida de muchas personas con sus propias manos, todo por el simple hecho de no ser más que un niño asustadizo, un patético niño huérfano que Dazai había rescatado de morir en las calles de Yokohama con el único propósito de servir al castaño para alcanzar sus objetivos.

Pero todo eso estaba en el pasado, ahora nada de eso importaba en lo más mínimo y todo se lo debía al hombre que tenía enfrente; vivir con Mori le enseñó a construir su carácter, evolucionando de ser una simple marioneta que recibía órdenes a diestra y siniestra a ser el dueño absoluto de sus decisiones y acciones. Ahora estaba seguro de lo que deseaba para su futuro, un futuro que planeaba compartir con su amado Ryuunosuke a su lado, un futuro en el cual los dos fueran plenamente felices, terminando de sanar las heridas que Dazai provocó en ambos.