— Las cosas van bien a pesar de que lo conocí anoche, hoy me lo encontré y terminé en su casa. No es peligroso, estoy dentro.
— Y es por eso que te elegí, eres excelente en lo que haces — halagó Mitchel —. Y ahora que tienes acceso a su casa no volverás al club.
— De hecho si planeo hacerlo, hay algo en ese lugar que me da mala espina, no creo que todo sea tan legal en ese lugar — coloqué mis manos sobre la mesa — dos pájaros de un tiro, Caldwell y el Boulevard.
— Está bien, puedes seguir explorando el terreno.
— Gracias — di un suspiro — ¿Por qué no me dijiste que tiene hermanos?
— No lo sabía, te recuerdo que el expediente fue borrado al igual que muchos nombres.
— Logré sacarle muchas cosas y tiene dos hermanos, Nicolás y Caín. Él dijo que perdió contacto con ellos desde que su padre murió. Y hoy acaba de llegar uno de ellos.
— Los mantendremos vigilados, eso es de gran ayuda ¿Recorriste la casa?
— No es una casa, es un departamento en la zona residencial
— ¿Algo más? — preguntó quitándose las gafas.
— No, eso es todo. Si no te molesta quiero irme a casa y descansar un poco.
— Claro, nos vemos el lunes.
Salí de la oficina, Ryan aún estaba sentado en mi silla, no sabía que decirle, sólo quería gritarle lo imbécil que es, pero no es el lugar correcto para hacerlo.
— Alenna ¿Podrías darme mis llaves?
— Aquí tienes corazón, nos vemos más tarde
— Gracias. Y te prometo que te contaré todo.
— Tienes que hacerlo, o te torturaré para sacarte la verdad —. Advirtió con gracia.
Los sábados en la noche son siempre iguales, la ciudad es un caos, pues la gente sale a divertirse al igual que yo, tengo la corazonada de que él Boulevard es algo más que un club, haré lo posible por descubrirlo, así que iré está noche.
Tomé una larga ducha, puse maquillaje y volví a usar la gargantilla de pedrería falsa, jeans y un par de zapatos cómodos y tres juegos de lencería de los colores permitidos.— Creí que solo trabajarías los viernes — dijo Marcus al verme entrar por la puerta trasera.
— Mi cliente me pidió que viniera el día de hoy — mentí.
— Entonces llegas tarde.
— No todos tenemos auto para cruzar la ciudad — me quejé.
— Me importa una mierda, prepárate, tendremos un invitado especial.
Recordando el camino llegué al camerino donde todas las chicas lucen su diminuta lencería.
— ¿Que haces aquí? , creí que ya no vendrías — dijo Krystal a mis espaldas.
— ¿Y por qué no? — Pregunté dejando caer mis cosas al suelo —, necesito el dinero y por eso es que regresé. Se que solo dijiste que los viernes pero mi cliente de ayer me pidió venir hoy.
— Hubiese preferido que no lo hicieras — añadió con tristeza.
— ¿Por qué? — la miré y esta me hizo callar poniendo su mano en mi boca.
— Te lo explicaré más tarde, ahora vístete, creo que vendrá alguien importante.
— ¿Qué color usaré hoy? — pregunté temerosa de su respuesta.
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El Mayor (+18)
Teen FictionLarisse Hawk Hermosa, encantadora y manipuladora, esas son las características que la describen. Una agente del FBI capaz de hacer caer a los peores criminales de la ciudad, su determinación la ha catalogado como una de las mejores Las vivencias de...