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No sabía cuánto tiempo había pasado desde que se congeló mirando la foto que Jimin le había enviado. Si bien no era catalogada como pornográfica, pues tenía su ropa puesta y no mostraba su cuerpo desnudo, pero sí que se veía jodidamente sexy.

No iba a mentir diciendo que nunca había pensado en él más allá de lo permitido, tampoco se avergonzaba de algún que otro sueño húmedo que tuvo las primeras noches después de haber observado a Jimin en aquella fiesta. Era humano, después de todo, y un adolescente con las hormonas algo alteradas.

Relamió una vez más sus labios mientras volvía a ver la foto. Observando desde la mano de Jimin en su entrepierna, algunos botones de la camisa desabrochados dejándole admirar su piel, cómo su lengua lamía su labio inferior. Maldita sea, Jungkook iba a tener un problema allí abajo si dejaba que sus pensamientos fueran más allá. Allá en donde presionaba a Jimin contra una pared, sus cuerpos tan cerca que podría sentir el calor corporal del chico, aquellos labios suaves y pomposos pidiendo a gritos ser mordidos y chupados.

Jeon sacudió la cabeza, un suspiro tembloroso saliendo de sus labios. Debía detenerse, Jimin había dejado de contestar sus mensajes hacía cerca de media hora, y el hecho que estuviera solo y ebrio en una fiesta no le agradaba demasiado.

Marcó su número, ya se lo sabía de memoria, y esperó a que atendiera la llamada. Intentó una segunda vez cuando la primera lo atendió el buzón de voz, caminando de acá para allá en su habitación.

- Jimin, por fín atiendes- exclamó sin siquiera esperar a que el chico dijera algo- Eataba preocupado, no contestabas mis mensajes y...

- Oh, hola Jungkookie- Jimin lo interrumpió, su voz sonando con diversión- Te extrañé mucho.

- Estuvimos hablando hace media hora- dijo Jungkook, no había pasado por alto cómo el rubio arrastraba ligeramente sus palabras al hablar- ¿Sigues en la fiesta? Dime que estás con tus amigos.

- Sip, ellos están aquí- Jungkook soltó un suspiro aliviado. Entonces Jimin se rió- Pero no sé en dónde. Los perdí de vista hace mucho, y esta casa es enorme.

Pasó una mano por su cabello, cerrando los ojos por un momento. ¿Cómo se suponía que iba a lidiar con un Jimin ebrio estando a kilómetros de él? Lo que más le preocupaba es que pudieran apeovecharse de él, y Jungkook no podría hacer nada para evitarlo.

- Jungkook...

Se quedó helado cuando escuchó el gemido de Jimin. ¿Qué diablos estaba haciendo?

- ¿En dónde estás?- preguntó, tratando de no darle importancia a lo que había escuchado.

- En la habitación de alguien- dijo Jimin- Oh, esta cama es tan cómoda. Me gustaría que estuvieras aquí.

- ¿De qué hablas, Jimin?- preguntó entre risas.

- Hmm, me gustaría que estuvieras en la cama conmigo- Jimin susurró- Ha pasado mucho tiempo desde que...

- ¿Desde que...?

- Desde que estuve con alguien. Ya sabes a qué me refiero.

Y claro que Jungkook sabía de qué hablaba, pero quería que fuera Jimin quien lo dijera y no mal interpretar las cosas. Era bastante curioso cómo reaccionaba Jimin ante el alcohol. ¿Realmente su libido aumentaba estando ebrio?

- ¿Jungkook?- llamó momentos después. El nombrado hizo un sonido para darle a entender que lo escuchaba- ¿Cuándo fue la última vez que tuviste sexo?

Jeon casi se atraganta con su propia saliva. No porque el tema lo pusiera nervioso, sino porque aún era raro escucharlo a Jimin hablar de ello.

- Um, el día anterior a que vinieras a Seúl- Jimin se quedó en silencio desde el otro lado de la línea, y Jungkook se odió por haberlo mencionado- Escucha, Jimin...

Talk to Me // KookminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora