ƚ ℓ ҽ ϝ ℓ α ɱ ҽ. [Terminada]

Tercer verso.

Capítulo 17.

Su corazón latía constantemente, estaba contento, era la mayor alegría del mundo.

Sentir aquella sensación en su pecho era tan dulce.

Hoy se encontraría con el doctor, tal vez fue esa la razón por la cuál se levantó tan temprano, cosa que sorprendió muchísimo a sus hermanos. No dio muchas explicaciones para salir, solo dijo que iría a algo y salió de casa como si ese tipo de respuestas fueran de lo más normales en el mundo.

Estando en el parque no dijo nada, solamente espero con una sonrisa, se sentía avergonzado más que nada en esos momentos.

--dime, ¿esperaste mucho?--al escuchar aquella seductora voz le hizo sentir un escalofrío recorrer todo su cuerpo, sonrió girandose y lo abrazo sonriendo--¿cómo debo interpretar eso?
--acabo de llegar--le respondió--estoy tan feliz de verte.
--yo también--acaricio sus cabellos--, Luffy-ya ¿estará mal si te robó un beso?

Los colores subieron por sus mejillas a una velocidad impresionante, su corazón latía cada vez más rápido, no podía creer lo que escuchaba en esos momentos por lo cuál con una sonrisa lo miró mientras asentía completamente feliz--quiero un beso de Torao.
Dichas estas palabras el doctor se inclinó al mismo tiempo que tomaba por el mentón al monito, sus labios se comenzaron a aproximar, cerró sus ojos el menor y con una sonrisa Law rompió con aquella barrera invisible llamada "espacio personal" beso aquellos labios tan suaves y carnosos, aquellos que había anhelado desde hace tiempo, era cierto que le robó su primer beso de una forma fugaz en el consultorio, pero no era justo que un simple rose de labios así pueda llamarse beso, por ello esta vez fue mejor.
No pudo evitarlo, ahora sus manos lo rodearon por la cintura mientras el pequeño rodeaba sus delgados brazos en el cuello ajeno, la gente que pasaba los miraba y susurraba mil cosas de aquellos actos indecentes, nada propios para ser presenciados en público, todo por ser hombres.

Law rompió con el beso, necesitaban aire pero aún seguían unidos por un fino hilo de saliva, el alemán río mientras Luffy solo pudo esconderse en el pecho ajeno--también me gustó, tranquilo. Bueno, ¿a dónde quieres ir? Podemos ir a comer o solamente estar juntos, lo que quieras está bien por mi
--tengo hambre.
--entonces vamos a comer--acaricio sus cabellos--¿quieres ir de mi mano?
--¡¡Siempre quise eso!!
--no tienes que gritar, con un simple si, entiendo.
--perdón...

El doctor suspiró mientras hacía una mueca pero de inmediato la borró, no podía enojarse con el pequeño, era literalmente ¡imposible!, por ello sus manos se tocaron con timidez, lentamente sus dedos comenzaron a entrelazarse, Luffy se ruborizó de golpe, había imaginado tantas veces aquel momento que le era imposible de creer, durante tanto tiempo deseo sentir aquello, anhelaba tanto un amor de esa forma que, tenerlo ahora le hacía llorar.

Fue lo que noto Law, los ojos del pequeño comenzaron a llenarse de lágrimas, el dolor de la pérdida, haber sido literalmente la puta de todos, las drogas, el alcohol ¡todo!, odiaba todo eso, aquellas sensaciones tan dolorosas y asquerosas a la que se sometió, todo eso eran como manchas negras las cuales cubrían su cuerpo completamente, pero las caricias del doctor aliviaban todo dolor--¿te sientes mal?--cuando tocaba su mejilla y se acercaba a susurrar en su oído, era hermoso, sentía que ahora estaba en un lugar mejor.
--¿prometes jamás dejarme?
--¿y como piensas regresar a tu casa?
--¡Law!
Sonrió--si planeara dejarte, ¿crees que te habría besado en la primera cita? Escúchame niño libre de drogas, no voy a dejarte.
--¿¡cómo puedo estar seguro de eso!?--hizo ahora un berrinche.
--¡porque te amo!--pero aquel berrinche fue calmado--, no se si un niño como tú lo va a entender pero, me enamore de ti. Aquel tiempo en el hospital fue el suficiente como para sentirme completamente bien a tu lado, eran breves momentos si, pero fue el suficiente para que me hicieras sentir algo por ti, aún no entiendo que fue lo que me hiciste pero estoy bien con ello, porque ninguna mujer fue capaz de eso, solo tú, no tuve que besarte o acariciarte en ese tiempo, solo hablando, me enamoraste siendo tú, ¿te queda claro?