Capítulo 12

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La tarde llego rápido, Ruth iba por todo el camino en silencio solo pensando si era verdad todo eso. – ¿Podemos cenar esta noche en mi casa? Él le decía.

—Tengo cosas que hacer, hoy no puedo. –Está bien. Se escuchaba triste.

Ya en casa Ruth colocaba la cena en la mesa cuando escucho el timbre sonar. –Ya voy, espere un momento por favor. Abre la puerta allí se encontraba Marcos con un ramo de flores, chocolates y helado. Se sorprendió al verlo. Él se acerca le entrega las flores y la besa. –Vine a ayudarte. Ella no encontraba que decir solo dijo –Pasa.

-Ummm que rico huele aquí llegue en buen momento. Ella sonríe. –Aparecer sí. Buscare otro plato. Estando ella en la cocina buscando dentro de los gabinetes un plato. Él se acerca la abraza apretando su cintura a Ruth se le cayó el plato del susto se gira y le grita –ME QUIERES MATAR MARCOS con la mirada ida, la besa muy lento, baja sus manos hasta el glúteo de ella lo aprieta fuerte haciéndola gemir. Él la llevo hasta el sofá. Sin más que decir Marcos la besaba desesperado, devorando sus labios y aunque Ruth comenzó a empujarlo queriéndolo hacer parar al final corresponde el beso.

Ella no podía negar lo bien que besaba Marcos. – ¿Dios que bien besa? Era tan imposible alejarse de los labios del él. –Eres tan hermosa... -le susurro cerca del oído, quito la ropa después desabrocho el brassier negro, dejándolo caer en el suelo. Beso suavemente su lóbulo y lo mordisqueo despacio haciendo que ella soltara un suspiro de placer. La empujo suavemente al sofá haciéndola sentar con el pulgar comenzó a acariciar los labios de ella. Ella gimió de placer.

—Ruth... si quieres... Suspiro Marcos. – ¿Puedo parar?

Ella desabrocho la camisa y bajo su pantalón, excitada, y vio el bulto erecto que se marcaba en el bóxer que llevaba puesto Marcos. Estaba demasiada deseosa ya quería tenerlo dentro de ella.

Ruth baso su bóxer lo tomo con mucha delicadeza el pene en su delicada manos derecha, mientras que la izquierda estaba siendo de apoyo en la cintura de él, ella se acercaba muy lento y comenzó a lamerlo de abajo hacia arriba y de arriba hacia abajo, con la mano lo comenzó a masturbar haciendo que el gimiera muy fuerte.

–Chúpamelo todo entre suspiro. Ella obedeció, metiéndolo en su boca. —Dios que delicioso. Susurro ella. Marcos enredo el cabello de ella y la ayudaba a seguir chupándosela. Ella lo introducía mas adentro, haciéndole gemir fuertemente. Ruth sintió aquel exquisito y espeso semen bajar por la garganta y goteándole en los senos. Ruth se para limpiarse pero este la besa y acaricia los senos de ella haciéndola gemir mientras pellizcaba un pezón.

Él se sienta aun con su pene erecto la jala indicándole que se suba, Ruth baja sus patín sube los pies en el sofá, el vuelve a jalarla poniendo la vagina de ella en su boca. Comienza a lamer y besar su clítoris suavemente introduciendo un dedo en ella, ella empieza a gemir. —No pares susurraba con los ojos cerrado. El sentía el dedo muy húmedo indicándole que estaba muy excitada, saco el dedo dejo de chupar el clítoris la agarro con las dos manos de la cintura y la penetro con fuerzas haciéndola gritar. Ruth comenzaba a moverse lento de arriba hacia abajo y de abajo hacia arriba. Sentía como chocaba el pene con las paredes de su vagina y como rosaba su clítoris. Marcos la ayudaba apretándole el trasero y besándola.

Ruth comenzó a gemir con más intensidad, Marcos le susurraba cosas sucias al oído haciendo que el orgasmo de ella saliera. Saliendo el orgasmo ella se puso dura arriba de él y mordió su mano izquierda, él se acercó y la beso. Ruth se detuvo por unos segundos y volvió a moverse lento luego con intensidad haciendo que Marcos gimiera y se viniera dentro de ella.

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Próximamente nuevos capítulos
Espero que le esté gustando la novela

Besos

@bianelytr

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