Capítulo 23

214 6 0
                                    

Llegamos a Cuba no me había dando cuenta en que momento me quede dormida en el hombro de Marcos, junto a nosotros se encontraba Connor.

Sentí un beso muy frío en la frente el cual me hizo despertar y estrujar mis ojos. En ese momento ya no estaba Connor solo él y yo.... y unos cuanto pasajeros más.

—Despierta ya llegamos, sonrió Marcos. Yo asentí y salimos del avión.

*******************

Estando en el hotel, dejamos la maleta en el carro del botón. Ya me encontraba en el dormitorio deshice de mis tacones me estaban matando literal me dolían hasta los tobillos mejor dicho el alma y al fin la ropa que llevaba puesta. —Libreeeee soy... quien me escucha jajaja. Entre al baño, tome una relajada ducha.

Salí del baño me dirigí a las maletas para sacar la ropa estaba totalmente en toalla. Saque unos pantalones de color gris con un lazo en la cintura, un poloche blanco totalmente liso y unos tenis blancos.

 Saque unos pantalones de color gris con un lazo en la cintura, un poloche blanco totalmente liso y unos tenis blancos

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Ya tenía un tiempo en la habitación, organizaba la ropa en el armario y puse las maletas a un costado del closet. Mi teléfono sonó y tome la llamada.

Hola hija es mamá.

—Mami Te extraño a ti y a papi.

—Lo se amor pronto iremos a Casa.

—¿Cuándo madre? Tengo meses sin verlos.

—Hija es complicado este proyecto, tu padre y yo haces todo los posibles por terminarlo a tiempo pero se ha dificultado las cosas una parte de los trabajadores de la obra enfermaron y eso nos atraído atrasos.

—Entiendo madre. Espero que todo marche y poder verles.

—¿Cómo van las cosas por allá hija?

—Pues por ahora marchar muy bien, ahora mismo estoy en Cuba por motivo de trabajo. Y así van las cosas conmigo.

—Hija ten cuidado usa condon por favor aun soy muy joven para hacer abuela, jajajaja

—Mamá no digas eso de broma por favor.

—Aunque no le has contado si algún chico tiene tu corazón, pensándolo bien ¡No estaría del mal ser abuela!!!   Jajaja nuestras familia crecería más pero tendría que ser un hombrecito.

—Santo cielos madre como se te ocurre decir eso no, no, no.... pero ...

—Pero que Russo??? Hay alguien. Bingo no me equivoco de mi hija.

—Mami mejor hablemos luego si tengo trabajo. Te quiero.

No la deje hablarme y le colgué.

Toco sonaba en la puerta, camine hasta abrir la y no puedo creer la figura que está frente a mi.

—¿Ruth estás haciendo algo? Tenía una sonrisa muy hermosa en su cara.

—No por ahora Sr. Connor, pero la mirada mía era neutra.

—¿Podemos salir a almorzar?

-Si, claro ¿por qué?. Solo deja buscar mi bolso y bajamos. El solo asintió.

Llegamos al restaurante no muy lejos del hotel solo a unas cuantas calle y de verdad que este país es precioso. Un joven nos indicó dónde sentarnos, nos entregó el menú.

—Te parece bien si pedimos una entrada luego plato fuerte y al final el postre??? Connor dijo.

— Si, pero deseo tomar algunas cerveza después yo invito. Le guiñe un ojo. Y el solo sonrió. Al parecer él es todo un caballero a pesar del mal comportamiento en la empresa.

Connor llamó al chico, le dijo que trajera su especialidad en la comida de aquí. El chico asintió y se retiró.

Teníamos un pequeño rato en silencio hasta que Connor rompió el silencio.

—Y dime Russo que de ti, cuéntame tienes novio??

Wao está hombre es súper directo. —No pero si.

—¡!!! ¿Cómo así ? Explícate.

—Bueno estoy conociendo a alguien tenemos muy pocos meses. No estamos tratando y ver qué sucede.

—Yo que él actuaría rápido, eres muy hermosa, tomó mi mano y la besó.

—Gracias, mis mejillas ardía por esa actitud.

Por suerte llego la comida y interrumpió este incómodo momento. No puedo negar que esta comida esta buenísima lo mejor que había probado definitivamente mente. Toda la comida fue en silencio hasta retirarnos.

—Oye Russo que te parece si vamos a bar en la noche me debes mis cervezas.

—Hooo claro verdad ya lo olvidaba, podemos a esos de las 8:00 o 9:00.

—Eso está más que Perfecto.

Llegamos al hotel, eran las 1:00 pm. Caminaba hacia mi habitación y me encontré a Marcos frente a la puerta con una expresión molesta y fría.

—¿Dónde estabas? Te estuve buscando como loco por todo el hotel, te llame varias veces. Me sostenía del brazo.

—¿Qué te pasa??? Yo tenía hambre, salí a comer y como ves aquí estoy, por favor suéltame que pareces mi padre. Lo mire con rabia que se cree este ahora no lo había visto así.

—Lo siento nena, es que no sabia de ti y me puse histérico. Solo te venia a decir que tenemos una reunión a las 3:00 y otra a la 6:00 de esta tarde después de eso iremos a cenar.

—Lo siento tengo compromiso en la noche. La mirada de él cambió.

—Como así Ruth, a donde irás???

—Acaso no tengo derecho de salir con algún compañero de trabajo esos no son tus asusto y te recuerdo Sr.Marcos que nos estamos tratando apenas.

Marcos

Mierda que carácter tiene esta mujer, pero me llena de rabia que Salga con otro hombre que no sea yo.

—Está bien lo lamento.

—Gracias por comprender así que si me permite entrare a mi dormitorio a vestirme para la reunión. Se veía súper molesta no la había visto así nunca.

La PasanteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora