¥Amor Prohibido¥+18

> CAPÍTULO 24 <

Hoy era viernes. Ya no aguantaba más, ya quería terminar con esta tortura. Mañana, después de que hoy pasara lo que debía de pasar con Jays, me iba a reunir con los tres a decirles que terminaba con el trato.

Después de unas semanas yo me había separado de mis amigos, de Elías, de Angel y ya no le había vuelto a hablar a Angélica.

Iba llegando a la universidad, con pasos lentos y un poco deprimidos. Escuche que alguien me gritaba y voltee.
-¡MARIANA!
-¿Ah? Hola
-¿Que te pasa? Desde aquella noche no me has vuelto a hablar, mira si no querías hacerlo simplemente debías de haber elo dicho, no te hubiera obligado a...
-¡NO! - lo interrumpí- no es eso, simplemente es...otra cosa
-Oye... Sabes que cualquier cosa puedes contarmela
-No, esto no puedo decírselo a nadie
-Mmm... Bueno
-Si, bien, te veo al rato en la clase, debo arreglar unas cosas
-Si claro, te veo al rato

Me dispuse a caminar por la universidad para encontrar a alguno de los dos, ya sea a Iván o a Jays, pero no los veía por ningún lado.

Ya era hora de llegar a clases así que corrí al salón, entre justo antes que en maestro. Camine y me senté al lado de Angel.
-Vaya, pensé que nunca llegarías-me dijo susurrando
-Yo también lo pensé
-¡Buenos días chicos, como saben hoy checare el proyecto final para que la próxima clase le aplique el examen final a quien me haya entregado el proyecto!
-¡Mierda! El proyecto- dije igual susurrando
-Descuida, te he visto muy distraída estos días y sabía que se te iba a olvidar, por eso te hice uno, toma
-¡No te pases! ¿¡Es serio?!
-Si
-¡Ahhh, te amoo!- dije dándole un enorme abrazo

Primero paso Angel a dejar su proyecto y después pase yo.
Paso la hora de la clase y salimos a nuestro pequeño descanso.
-Oye, quieres ir a mi casa hoy a estudiar
-Si... ¡NO! no puedo...
-Mmm... Bien, será otro día, ya ni modo
-Si, o bueno, déjame ver, voy a ver si puedo mover algunas cosas y te digo ¿va?
-Esta bien, esperare tu respuesta

Pasaron las clases y yo estaba dispuesta a hablar con el trío de babosos. Estaba buscando a los únicos dos perros qué van en esta escuela. Camine hacia el patio trasero, casi nadie viene a este lugar más que las personas que quieren paz y tranquilidad, parecía estar solo pero vi a Jays a la lejanía, así que corrí hacia el.
-¡Jays!
-¿Que paso preciosa? ¿Lista para al rato?
-Justo de eso quiero hablar
-Ajá, te escucho
-Necesito hablar con los tres, quiero romper el trato
-¿Escuche bien? ¿Acaso nuestra perra quiere dejar de ser de nuestra propiedad?
-Si, ya me harte de esto
-¡NO TE SERÁ ASÍ DE FÁCIL ZORRA! ¡TU SERAS DE NOSOTROS HASTA QUE NOSOTROS QUERAMOS! ¿¡OÍSTE!? - dijo agarrandome bruscamente del brazo y aparentando lo con mucha fuerza, logrando qué este me doliera
-¡Sueltame animal!
-¡NO DEJARAS DE SER DE NOSOTROS HASTA QUE QUERAMOS! Muy chistosita la putita qué justo cuando me toca tenerla para mi solo, ya no quiere estar con nosotros ¡PUES NO TE SERÁ ASÍ DE FÁCIL! ¿¡ENTENDISTE!?- me soltó derrepente del brazo, quedándose marcados sus dedos en él.
No había nadie donde estábamos, las clases habían empezado, Jays aprovecho la oportunidad y me dio una cachetada, tan fuerte qué logro qué me cayera, así dejando su mano marcada también en mi mejilla.
Se fue hecho una fueria del lugar, yo me quedé tirada en el piso.
Me acerque a un árbol y me senté al pie de este. Una voz muy tranquila y serena me hizo callar mi llanto.

-Una chica tan hermosa como tu no debería de estar llorando

Levante la cara, no lograba reconocer su voz, era profunda, grave y tranquila.
Me quite las lágrimas de la cara y al ver que me sonreía imite su acción.

-Hola, soy Aspen ¿Cual es tu nombre?
-Soy Mariana
-¿En que semestre vas?
-En primero
-Ah vaya, ya casi se termina el semestre, ya vas a ser una chica de segundo semestre
-Si, ya nada más 5 días y se acaba el semestre
-Si... Épocas de exámenes, te veo muy tranquila... O tal vez no... ¿Pasa algo?
-No, nada importante
-Vaya, que bueno que una marca de una mano en tu mejilla no es nada importante
-¡A no! Este... Esto no es nada... Yo...
>Me interrumpió<
-¿Ese era tu novio?
-¿Eh?
-Con el que estabas hace rato ¿Es tu novio?
-¿Que? ¡No!
-¿Entonces porque te trato así?
-Por que... El... No lo se... - no se me ocurrió otra cosa que decirle
-Ah, ya veo, bueno, yo me voy tengo clase en media hora, nos vemos pequeña Mariana

Empezó a caminar alejandose del lugar.
-¡OYE!
-¿QUE?
-NO ME DIJISTE EN QUE SEMESTRE VAS
-VOY EN TERCERO, NOS VEMOS
-ADIÓS... Guapo- lo último lo dije en un susurro

>En ese momento, yo no sabia que un ángel iba a llegar a mi vida, a mi triste y miserable vida. No sabia que iba a llevar a salvarme y hacer recapacitar. No sabia que ese... Iba a ser el comienzo de una nueva historia<

<3