SAVE ME

Adiós

El sonido agudo y molesto de la alarma sonaba en su cabeza, le lastimaba los oídos y lo encontraba repetitivamente molesto, odiaba las alarmas.

Tony sacó un arma de la mochila y le apuntó a su padre, estaba tan nervioso tuvo que morderse el labio y hacerlo sangrar para no tener un ataque en esos momentos. 

"El dolor físico aleja el dolor emocional, el dolor físico aleja el dolor emocional..."

Se repetía una y otra vez intentando no salir corriendo y llorando, sabía que eso era mentira, pero tenía que distraerse de una manera.

-No hagas esto más grande Anthony- Su padre subió la voz para escucharse sobre la alarma- te prometo que dejare esto, solo cálmate y baja el arma-

El mentía, por supuesto que mentía, pero una parte suya, una muy dentro de él quería creerle, quería bajar el arma e ir a abrazar a su padre.
Sí, a pesar de la tortura física y psicológica que le había hecho pasar, el quería perdonarlo, y posiblemente lo habría hecho si no sabría que todo era mentira.
Al final seguía siendo su padre, la persona que lo crió e impulsó sus talentos, que triste que todo eso hubiese quedado en el olvido por la simple noticia de su casta; como si esos días nunca los hubiese vivido, lentamente se volvían recuerdos borrosos, similares a los sueños.

-¡Tu eres un monstruo!- lloró mirándolo con rabia, no podía contener tantas emociones dentro de él y esa era su forma de sacarlas- ¡Tú hiciste todo esto!- jadeo sintiéndose abrumado y mareado por el golpe de emociones y la liberación de estas.

-Tony por favor...- avanzó hacia el, y se detuvo cuando el menor puso su dedo en el gatillo, había aprendido a usar un arma- hijo...-

-¡No, no lo soy!- grito, temblando- ¡no te importo que todo lo que hacías me hiciera daño, no puedes venir a decirme ahora que eres mi padre!-

-Tony, sé que lo que hice estuvo mal pero...- el primer disparo se dio, fue directo hacia la pierna de Howard, quien soltó un grito de dolor y cayó al piso, mientras presionaba la herida.

-No voy a escucharte, ya no...- las lágrimas que minutos antes estaban en sus ojos, habían desaparecido. La cara de Tony reflejaba tanto odio, rencor y tristeza.

Tal vez a Bucky no le hubiese gustado ver así a su niño, no quería que cargara con una acción y dolor tan grande como el de asesinar a su padre, pero Tony lo necesitaba, quería liberarse.

Él no era el capitán América, tampoco un soldado y mucho menos era Bucky, tal vez se arrepentiría de sus acciones o tal vez no, pero en ese momento sólo tenía en la cabeza una cosa, acabar con la vida de su padre.

-No lo harás, yo sé que no- le dijo Howard, jadeando con dificultad- ¡te conozco Anthony!-

Quería decirle algo como "no, no lo haré", pero su cuerpo era de alguien más, él ya no tenía el control sobre el.

La primera explosión se dio en el extremo del laboratorio, debía salir ahora si no quería morir ahí.

-No mereces que te mate- bajo el arma, y se dispuso a irse, dejando su mochila en el piso.

-No puedes irte, To...Tony- sentía tanta rabia escuchar ese apodo en sus labios, pero ya no importaba, de igual forma su padre iba a morir en ese momento. -¡Ella está muerta!- se quedó estático, le miró intentando comprender sus palabras.

-¿Qué?-

-Tu madre, ella...- suspiró cerrando los ojos al escuchar la segunda explosión- Esta muerta- vió a su hijo mirarlo con rabia mientras apretaba los puños- creí que... creí qué tal vez podría hacer modificaciones en su casta para Henry pero... pero su cuerpo no aguantó el medicamento experimental- sollozo sin poder aguantar el dolor, esa maldita herida dolía como el demonio.