Litost: Historia de un secuestro © (EDITANDO)

[01] Cuarto oscuro

Esta obra está dedicada a Sam Rivas. Sam, no necesitas leer la historia, solo la nota final. Ahí se explica todo.

| Invincible - Machine Gun Kelly ft. Ester Dean |

| Emergency - Paramore |

| Waiting for the end - Linkin Park |

| Fix you - Coldplay |

| Gone, Gone, Gone - Phillip Phillips |

| Zombie - Cranberries |

| Superheroes - The Script |

| Brick By Boring Brick - Paramore |

| Bleeding Out - Imagine Dragons |

| What Hurts the most - Rascal Flatts |

| The Answer - Kodaline |

| Echo - Jason Walker |

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Samantha Brown

27 / Octubre / 2022

Trazo otra delgada línea en la agrietada pared, para saber que otro día ha transcurrido. Observo mi trabajo, asegurándome de que haya quedado recta, sorprendida por haber controlado los temblores de mi insegura mano, y luego, contemplo las demás. Ya he llenado la última pared, contando los días con cuarto líneas rectas y una horizontal surcándolas, cada día, equivale a una línea, cada línea, equivale al tiempo que he permanecido en la oscuridad.

Me he estado quedando sin gis últimamente, solo espero que no tarde en darme un nuevo paquete, pues contar el tiempo que llevo aquí, es lo único que evita que pierda la cordura.

No puedo creer que lleve cinco años, diez meses, y veintisiete días, aquí encerrada. Parece difícil de creer ¿no? Díganle eso a las marcas en la pared, yo misma las he sentido, ya que, me es difícil verlas con tanta obscuridad, y las matemáticas nunca mienten. Es sorprendente que todavía no me he vuelto loca, o quizás lo esté, solo que no hay alma con vida que me lo diga.

Él me ha tenido aquí por demasiado tiempo, y nunca he sabido el por qué. No es que ser la hija de un bombero signifique algo ¿o sí? Mi madre es una latina y amorosa ama de casa, lo cual es comprensible, pues sin ella presente, sería un total desastre, tener cinco hijos no es un trabajo fácil. Todavía recuerdo cuando Gaby y yo, solíamos ayudarla, ya que mi hermano menor Kevin nunca paraba de molestar a Miranda, y era nuestro trabajo alejarlo de la pequeña rubia mientras mamá arrullaba a Boby para dormir.

Después del tercer año, he vistos reducidas mis posibilidades de salir de aquí, pues a pesar de que no quiero rendirme, no recuerdo casi nada de cómo terminé aquí, es como si mi mente tratara de bloquear el recuerdo. No sé su nombre, edad, o trabajo, solo sé que sabe quién soy. Y él quiere que adivine quién es, pero, ¿cómo se supone que voy a saberlo? ¿Acaso yo lo conozco?

Rara vez, al pasar mi comida por la pequeña rejilla ubicada debajo de la puerta, escucho su voz, sin embargo, nunca puedo comprender lo que dice, es como si balbuceara alguna oración que no logro comprender.

La luz se filtra, aparte de por debajo de la impenetrable puerta de metal, por un diminuto agujero que se encuentra en la parte superior de la esquina derecha de la habitación.

Gracias a ése fulgor todavía puedo comprobar que estoy viva, sino, cualquiera pensaría que me encuentro en el limbo. Examino mis minúsculas uñas, con la poca luminosidad que llega, Deja de morderte la uñas Sam, solía decirme mi mamá. Había investigado el por qué las personas se muerden las uñas, y recuerdo haber leído un artículo en el cual, decía que era debido al nerviosismo. Antes, lo que me perturbaba, que provocaba la constante acción de morder mis uñas, eran los exámenes finales, no haber contestado las llamadas de mi mamá, a veces, cuando veía una película de miedo también mordía mis uñas, la diferencia entre antes y ahora, es que actualmente mis dedos, con solo la mitad de uña en cada uno, es debido al constante pensamiento de que quizás, nunca podré salir de aquí, o de que el mundo se ha olvidado de mí.