Capítulo 1

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Esa mañana amanecio más gris de lo normal.
El moreno da vuelta en su cama, sintiendo el espacio frio.
Lentamente abre sus ojos, dos amielados ojos miran la habitación, la blanca y fria habitacion.
El moreno se levanta y ve la ropa recogida y doblada en una silla.

Los recuerdos de la noche anterior llenan su mente.
Ese día como los anteriores, habia discutido con su rubio novio, acabando en una reconciliacion apasionada.

Las discuciones eran como siempre debido a la rubia Carter, quien se le acerca y coquetea descaradamente con su alfa.

Pero un mal presentimiento le hizo saber que ese dia todo seria peor.

Se siente melancolico repentinamente, toma una toalla y va a la ducha, sabia donde estaba Steve, sabia que habia ido a correr, sabia tambien que se encontraria con esa tipa, que se iria a desayunar con ella.

Sabia que no llegaria a despedirse a su casa, porque se iria directo con ella a Shield, que no iria a con él a dejar al pequeño Jhonny ni a Peter al jardin de infantes...

Era cosa de un año que Sharon Carter habia estado coqueteando con su marido, pero este era tan denso que no lo notaba, le consideraba una amiga, y aunque todos en Shield e incluso el resto de los Vengadores les advertian sobre las intenciones de la femina, él solo negaba, diciendo que no era posible.

Y si bien, ambos se habían casado, al ser ambos figuras publicas, habia sido esto en completo secreto, solo los más cercanos asistieron, y Iron Man renuncio al primer embarazo, pasando a ser el padre siempre presente para los gemelos Jhonny y Peter Stark-Rogers.

Steve se habia mantenido siendo un agente de Shield, y este mismo, solo mantenia la argolla en un collar para no perderla.

Si, ambos eran una familia a escondidas, y esto a Tony ya le tenia harto, él queria presumir a su novio, queria ser el codiciado Anthony Edward Stark, el genio, millonario, filantropo esposo del gran Steve Rogers, el codiciado Capitan América, poder presumirlo y no esconder a sus maravillosos hijos, poder ir a dejarlos a la escuela él mismo, poderles acompañar de la puerta de su auto más lujoso hasta la puerta de la escuela, que no sea Happy el que deba hacerlo...
Quería mostrar a su familia con orgullo.
Por eso discutian a cada momento con Steve...

Steve decia que ambos se habian ganado demasiados enemigos, que sus hijos correrian riesgos por ambos, que era mejor así, además de decirle que era egoista como pensaba, porque para el rubio, él solo lo decia porque tenia desconfianza de él por Sharon.

Tony como cada día, se dio un baño y fue a preparar el desayuno para él y sus criaturas, otra cosa que habia estado pasando es esa, hace dos meses que Steve dejo de hacer el desayuno para su pequeña familia, aquel aporte era algo fundamental para Tony, pues además de demostrar el amor que le tenia a su pequeña familia, era una ayuda, debido a que asi Tony no debia madrugar luego de la oficina que establecio en su taller, donde cabia destacar que se desvelaba, y dormia muy tarde...

Tony comenzo a preparar los cereales, las frutas y su café cargado para despertar, aquel que Steve ya no escondia.

Otra cosa, Steve dejo de preocuparse por Tony, llegaba tarde, cosa que provocaba las, de por sí, frecuentes peleas.

Tony solo trata de no pensar en ello.

-Arriba, mis pequeñas bestias- dice con un tono amoroso y prende las luces de la pieza, a la vez que Friday abre las persianas, siendo las 7:30 am los pequeños gimotean y se tapan.

Tony sonrie y se sube a la cama, haciendoles cosquillitas y mimos, poco a poco los pequeños se levantan y le besan sus mejillas con unas resplandecientes sonrisas.

Ambos en unos minutos ya se encuentran vestidos y listos para desayunar, Tony va avisando a Happy de que ya habia levantado a los niños.

A un cuarto para las 08 am, ya estaban saliendo de la casa para ir a dejar a los niños al jardin.
Se despide desde el auto, y su chofer les deja en el jardin.

-hola mis niños- les saluda la tia del jardin, quien ve a aquel sujeto de siempre llevarlos, hace una mueca, ella creía como muchos apoderados del jardin, que los padres de ellos no los querian, aunque los niños adoraban a sus padres, tanto los adoraban, que decian que eran super heroes.

Los niños entran y sonrien, comenzando a jugar con sus compañeros, Happy entra y se queda viendo como su jefe ve al jardin con ojos tristes y melancolicos, suspira, no sabe cuanto más aguantara ver en su jefe aquella tristeza por no poder hacer algo tan simple como salir con sus hijos en publico, llevarlos al jardin o al parque, jugar con ellos en un espacio libre...

Su jefe hace años no era feliz.

Déjame volver ~Stony~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora