Simplemente Anónima

14«solo sigue leyendo, que ésto se colocará interesante»

No sé que carajos me está pasando, me estoy confundiendo, claro que no sé lo he dicho a nadie; que confusión más ijuemadre tengo. Me encuentro entre la espada y la pared, me encuentro a pocos meses de irme y tengo el corazón en la mano, tengo ganas de llorar y de romper todo lo que tengo a mi alrededor, no es quiera aburrirte con todo lo que me está pasando, pero no aguanto más y necesito desahogarme, no aguanto más, no puedo más con ésta ijuemadre angustia por el porvenir que en ese mundo que me espera, no sé qres va ser de mi vida, no sé que hacer, no confío en nadie, y menos en alguien que no conozco, en alguien que no veo sino cada dos o tres años si acaso; quiero pensar que todo es un mal sueño y despertar en un lugar mejor, ya no sé diferenciar entre la realidad y la simple ilusión, y no lo digo porque algunas veces me enamore, sinceramente no me preocupa mucho esa clase de temas, me preocupa todo aquello que pueda pasar en mí vida.

-¡ya no más!

Cuando no es una cosa es la otra, estoy rodeada de un sin fines es de problemas y mis miedos quieren enseñorearce de mí y destruirme, destruir mi vida, así como estuvieron a punto de desteuirla hasta que decidí colocar un alto, porque ya era tanta la angustia que estuve muchísimas veces al borde de la muerte inducida, y sí, estoy hablando del suicidio, estoy hablando de ese indecente que llega cuando no lo quieres, y entra a tú vida cuando no lo invitas, esa depresión que te acompaña en la oscura soledad y no descansa hasta verte totalmente destruid@.
Sí, he sido fuerte, porque sí te comienzo a contar todo lo que ha sucedido no término hoy, hay cosas que todavía no tengo claras, no entiendo el porqué de tantas fobias, de tantos miedos, de tantas cosas que me dejan pasmada, inerte, que me dejan en la nada.

Soy diferente, por no decir que soy rara, no soy común, yo me divierto en cosas que otros ven aburridas, siento que soy única y amo ser así aunque no me acepten, de una u otra forma no me parece importante lo que piensen, o no de mí.

***

Estoy en la cima de el árbol que está cerca de mi casa, estoy viendo el hermoso atardecer muerte tras escribo en mi prestado diario, éste árbol mide algunos 5 metros; estar aquí me trae muchos recuerdos, siempre yo que vuelvo a ser niña, siento que nada es imposible, recuerdo todas y cada unas de las travesuras que hice siendo muy niña; recuerdo que todos los días me subía a la cima de éste árbol solo para ver como caía el atardecer, y todas las noches me subía al techo de la casa y le acostaba allí cuando la luz se iba, solo para ver las estrellas, recuerdo que no me crié con niñas, en mi familia hay muy pocas mujeres, me crié entre primos, jugando football con una botella a pié descalzo, me crié jugando al tejo, jugando bolita, al escondido, al tarro botado, al yupy, al llimy, y a un sin fin de juegos inventados; recuerdo que siempre estaba jugando con niños, porque en el lugar donde me crié no había niñas, recuerdo que jugaba play con mis primos, jugaba Mario Bros, jugaba Rayman, jugaba San Andrés, jugaba juegos de lucha libre, juegos de Naruto Shipuden, juegos de Goku; recuerdo que no sabía que era lo que presionaba, pero ganaba de pura choripanes :v, hacía los superpoderes de los personajes y mis primos no sabían cómo los hacía, porque no ellos sabían hacerlos, y luego se colocaban ardidos, pero yo no tenía culpa de eso, ¡de malas!; recuerdo que yo pasaba con uno de mis primos, él se colocaban a cojer gritos por las patas, y a veces metiamos avisas en una botella, y después metimos una araña para ver quien ganaba; después de eso le hacías un funeral al perdedor :v.
Mis dos rodillas están llenas de cicatrices, al igual que mis codos y diferentes partes de mi cuerpo, yo pasaba más en el suelo que de pié, nos pasamos callendo, mi primo siempre se españa la cara y después le daban una buena limpia, por parte mía, no me pegaban, porque mi papá no se enteraba que me caía, así que por eso me salvaba, pues mi tía me encubría y no le decís nada a mí papá, después de todo yo casi no salía y no tenía con quien más jugar, además yo vijilaba que mí primo no se metiera en problemas; recuerdo que una vez estabamos jugando a las escondidas, y nos escondido en la parte de afuera de una casa donde no había nadie, los dueños no estaban ahí, la casa tenía las luces apagadas, así que nos llevamos tremendo susto, pues nos tocaron la puerta como tres veces en ese momentico, y patitas para qué las tengo, comenzamos a correr como si no ubiera un mañana, nos cojieron la libe, pero después nos preguntaron que, qué pasó, y comenzamos a contar lo que pasó, recuerdo que mi primo y yo teníamos un escontite en un árbol de almendros que estaba cerca, el se escondía ahí, y nadie lo veía, por lo general siempre nos vestimos con colores oscuros, pero como yo soy blanca me encontraban con más facilidad, yo no soy rasista, yo quiero a mi primo, pero él es bien negro :v, recuerdo que una vez se escondió en la sombra de un escalón que estaba cerca, si el no me dice que se escondió ahí, nunca me entero; él colocó sus manos delante de su cara y se abrazó con sus manos, de tal manera que nadie lo veía, o sea, tenías que estar muy pendiente s esos pequeños detalles para saber que estaba ahí, sin embargo, ¿¡quién iba a imaginar que él se podía esconder allí!?, por lo menos yo no.

Nos divertimos mucho, no obstante, yo parecía más un niño que una niña, me vestía con un suéter largo y una sudadera, o a veces me colocaba ropa de mi primo, si no encontraba o si no llevaba más ropa; sin dudas esos fueron mis mejores años, y puedo estar grande y él también, pero cuando nos encontramos, nuevamente formamos el desórden, ya no como antes, pero lo hacemos.

Es más, por lo general siempre nos reunimos el 8 de diciembre q colocar las velitas, luego mi tía se quedaba pendiente de ellas para wr no se las robaran, y nosotros nos íbamos a robar velitas y lo que sobraba de las velas :v, luego usabamos un carderito de plomo que yo tenía y lo llenabamos todo, colocabamos unas velitas debajo y deja bamos que eso se prendiera, luego mi primo le echaba saliva, en muchas ocasiones casi se quema la cara el maluco, y eso formaba una reacción química bien espectácular, era como una explosión, salía fuego y por lo general era súper inmensa, más o menos de unos dos metros, pues claro, para la cantidad que hacíamos era lógico que eso sucediera v:, de cosa y no prendiamos la casa, y eso, porque mi tía nos decía que hiciéramos eso lejos de la casa, y así era; recuerdo que comprabamos traqui traqui, cuatro golpes, Chispita las de mariposa, volcanes, y otras cosas más... Algunas veces salíamos al parque más cercano y jugábamos en los Juegos típicos de la región en pleno diciembre; algunas veces íbamos a Corraleja, en conclusión, jamás me aburría con un primo así de pendejo como él, y menos porque si no estábamos jodiendo la vida, estábamos peleando, recuerdo que nos dábamos puño, pero en serio, y cual de los dos quedará más adolorido, no, y para nada hacíamos eso, después estabamos jodiendo la vida de nuevo, como si nada ubiera sucedido.
Recuerdo que yo tenía un apetito igual o mayor que el de mis hermanos, también mis hermanos comen que da miedo, a ellos le servían en una banderita y sin los invitabas a comer y no te decían que no, más o menos te puedo dar un ejemplo, a uno de mis hermanos siempre le servían muchísima comida y quedaba con hambre, así que mi papá le Deci que no había más, le decía que había jugó de tuvo su quería (agua), y se bebía algunos 2 vasos para terminar de llenarce, y yo les hacía competencia, no comía así como ellos, pero comía bastante, sin embargo, después me tocó reducirla un poco a la comida por complicaciones médicas, pero bueno.
En conclusión, esa es una parte de mi niñez que quería compartir contigo.

-¡Carajo!, ya tengo que bajar de el arbol, se está haciendo de noche y mi papá no sabe que estoy acá arriba, como me vea se molesta, así que mejor me bajo.
Bueno después escribo, hasta luego.

Att: Anónima

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