✨forever✨

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Seokjin se sintió un poco cohibido ante la atención recibida apenas entrar a la habitación, iba un poco tarde así que cuando llego al aula, casi todos sus compañeros habían llegado ya. Cuando todos posaron su mirada en él, no supo exactamente qué hacer.

Yoongi había tenido la culpa, el alfa insistía en no despertarlo, de nuevo, así que cuando Seokjin despertó el pelinegro ya estaba listo para irse. El omega lo persiguió por todo el apartamento amenazándolo con una almohada, molesto por tener que arreglarse en un tiempo récord. Sin embargo, no fue algo que Yoongi no pudiera arreglar con unos cuantos minutos besándolo.

Seokjin suspiro feliz al ver que milagrosamente había un lugar al fondo del salón y se dirigió a sentarse. Una vez ahí, saco una libreta y un lápiz de la mochila negra que su alfa le había prestado, por ahora era lo único que tenía debido a que el resto de sus cosas seguían en su casa.

Su profesor entró unos segundos después y comenzó la clase, Jin puso atención desde el primer momento, anotando minuciosamente las cosas más importantes del tema de ese día e ignorando sin querer los cuchicheos de sus compañeros, mucho más interesados en la joya que portaba Seokjin que en la clase al frente. Los omegas soltaban comentarios de envidia e incredulidad y los alfas y betas se encontraban molestos por haber perdido la oportunidad de estar con uno de los más cotizados omegas de su curso.

El Sr. Lee observo furioso a sus alumnos, sabía que estaban así por el compromiso de Kim Seokjin pero no podía culpar al chico cuando este era él único que oía con atención sus palabras y miraba lo que escribía en la pizarra.

Decidió entonces dejar el tema nuevo y poner una actividad por el resto de la clase, así al menos estarían obligados a hacer algo.

"Ahora harán un resumen del tema pasado, para saber cuanto comprendieron"- los jóvenes no se inmutaron ante la nueva indicación.- "Sí no terminan esto no podrán salir del aula"- si sus alumnos se iban a comportar como niños, les daría castigos de niños.

Seokjin comenzó rápidamente a escribir, esperando que al Sr.Lee no le importará que usara grafito en lugar de tinta. Después de un par de hojas pensó que era suficiente y se acercó con su libreta hacia el escritorio. El Sr. Lee lo miro expectante así que Seokjin le dio una pequeña sonrisa tímida y entregó su resumen. El hombre lo tomó un poco sorprendido y comenzó a leerlo, después de unos minutos sólo colocó su firma en el trabajo, dándolo por aceptado.

"Que tenga un buen día Kim, puede irse"- sus alumnos soltaron múltiples protestas y él beta comenzó a preguntarse qué pasaba el día de hoy con todo el mundo.- "No veo a ninguno de ustedes entregando lo que les pedí así que no tienen nada que opinar, terminen su resumen y podrán irse"- soltó fastidiado.- "Como dije, joven Kim, puede irse".

"Gracias"- Seokjin contestó feliz y corrió a recoger su mochila para poder salir.

Salió al pasillo y decidió que iría a desayunar, por el pequeño imprevisto de la mañana no había podido comer nada.

Entro a la cafetería y se dirigió directamente a comprar una manzana, no era un gran desayuno pero en un par de horas comería con sus amigos así que no necesitaba mucho alimento por ahora. Se acomodó en una de las mesas y comenzó a comer en silencio, la cafetería estaba casi desierta y Seokjin se sentía raro al estar solo, sin sus amigos. Ni siquiera podía observar a Yoongi de lejos como solía hacer cuando el chico se distraía hablando con sus amigos.

Se encontraba aburrido mientras mordía su manzana pero sabía que sus amigos estaban en clase y su pareja posiblemente ensayando. Aunque pensándolo mejor tal vez podría llevarle algo de comida a Yoongi, después de todo todavía tenía un poco de tiempo. Sonrió ante el pensamiento y continuó comiendo, comenzó a oír murmullos a sus espaldas y algo en su interior le dijo que hablaban sobre él.

Destiny matters +Yoonjin+Donde viven las historias. Descúbrelo ahora