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las chicas se encontraban bailando en la sala de prácticas, repitiendo los mismos movimientos una y otra y otra vez. su coreografía debía quedar impecable para poder pasar la evaluación mensual con éxito.
no era temprano, no, pues a través de las ventanas veían la oscuridad de la noche amenazando con engullir a cualquiera que se adentrase en ella, mas ellas no tenían miedo.
muy pocas chicas habían vuelto a sus dormitorios compartidos. la vasta mayoría se encontraba en aquella sala, mirándose al espejo mientras realizaban mil y un pasos de baile diferentes, mientras sus pelos estaban calados de sudor y sus pulmones dolían como si fuesen a explotar, pero ellas no pararán, no, porque ellas son trainees tratando de conseguir su más preciado sueño: poder subirse al escenario y brillar tanto como las estrellas que vinieron antes que ellas, poder llenar de orgullo a miles de personas en el mundo con solo tener el más mínimo ápice de éxito. tenían que darlo todo de sí o, si no, todo se desmoronaría sin importar sus previos esfuerzos. ¿a quién le importa el proceso? solo el final debe ser glorioso.
la puerta se abrió de repente, pero muchas de las chicas no se inmutaron. debían seguir bailando.
—por favor, prestad atención, tengo un anuncio que haceros—habló la mujer, una miembro del staff de sm, tras carraspear para atraer la atención de todas las presentes—¿recordáis el proyecto de NCT M1X para el que audicionásteis algunas?
se escuchó un "sí " proveniente de las trainees, algunas emocionadas, otras ansiosas, pero todas expectantes.
—hoy hemos completado la lista de trainees que se van a unir al programa—la mujer explicó a la vez que sacaba unas cuántas hojas de la carpeta que llevaba en la mano—. tened en cuenta que no todas habéis conseguido pasar y que, las que sí lo habéis hecho, tenéis una gran responsabilidad que cuidar al entrar a este programa de supervivencia, así que nos alegréis o decepcionéis tanto, sin importar los resultados de vuestras audiciones.
el murmullo de las chicas subió de volumen.
—¿acaso no es esta una gran oportunidad para debutar? ¿por qué no tendríamos que alegrarnos?
—pensándolo mejor, ojalá no me hayan elegido, ya puedo sentir la ansiedad...
—ni siquiera audicioné y ya me estoy sintiendo nerviosa. suerte para las que sí entren.
—¿qué tan estrictos pudieron haber sido al elegir? porque ya estoy perdiendo las esperanzas.
—guardad silencio, por favor—la mujer volvió a carraspear—. os llamaré por vuestros nombres una por una y quiero que os coloquéis detrás de mí cuando seáis llamadas, ¿sí?
—¡sí!—como una sola voz, las chicas asintieron.
la mujer asintió con su cabeza y, tras colocarse las gafas en su lugar, comenzó a recitar los nombres de las chicas, una por una hasta contar diez.
las mencionadas se fueron levantando, algunas llorando, otras riendo y algunas con visible ansiedad en sus rostros.
—eso es todo, perdón por la interrupción—la mujer hizo una reverencia que las demás trainees le devolvieron—. vosotras tenéis que venir conmigo.
las chicas asintieron y siguieron a la mujer, dejando atrás una sala llena de murmurllos, risas y llantos.
este iba a ser un nuevo comienzo.
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