💔 En Lo Profundo Del Corazón. 💞

Cuando nos alcance la venganza.

Los personajes y las imágenes utilizadas en la historia no son de mi propiedad. Todos los derechos a sus creadores.

Lenguaje y contenido fuerte.

Agradezco las portadas de yan_skiblue y de Mónica tadakatsu.
Una disculpa por la redacción.

Historia con derecho de autor.

<<>>, " ": Son pensamientos del personaje.

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"Los demonios no están fuera, viven dentro de nosotros y cuando los dejamos que nos dominen, acabarán con nosotros"

Estás seguro que no encontraste nada?

El hombre sentado en la semi oscuridad pregunto. Tras él un henorme ventanal por el que se veían caer los copo de nieve, el leve destello de un encendedor al prender un habano le ilumino por un segundo el rostro. Su interlocutor se estremecio al vislumbrar un brillo malvado en las grises pupilas , aunado a la cicatriz que le surcaba el rostro atravesando el ojo, la misma que lo hacía aún más tétrico, tragando saliva miró a otro lado antes de contestar.

- No, el sector donde estaba el local, se encuentra atestado de ellos y si estuvo lo desaparecieron sin dejar rastro. Buscamos e investigamos, pero, nadie los vió y nadie recuerda el lugar. Es cómo sí nunca hubiera estado ahí.

El rechinido de la piel del sillón donde se encontraba el hombre, sobresalto al otro individuo quien temía por su vida, se levantó caminando hacia el ventanal dándole la espalda, mientras exhalaba bocanadas de humo.

- Sigue buscando, estoy seguro que pronto darán señal de donde se encuentran, esa mujer piensa que me ha vencido, sólo espero el momento adecuado, se va a arrepentir de todo lo que me ha hecho. No voy a olvidar el asesinato de la congregación en Japón donde mataron a mis hijas y mi yerno, toda la prensa público sobre el hecho y aún que se dijo que fue un asesino solitario a mí no me quitan de la cabeza que fue un grupo de matones, seguro mandados por esa puta mujer, debería haberla asesinado en el momento que supe que los escondía.

- Señor, no era posible, recuerde que ella estaba protegida por un alto funcionario de gobierno, prácticamente era intocable, fue muy astuta en verdad.

- Por eso mismo, no me trago lo que dijeron en las noticias, de que la matanza la realizó un sólo hombre y lo que es más, un niño!!! Que fue a quien alcanzaron a tomar, una foto en la que sólo se vislumbraba lo que parecía la figura de un niño, lleno de sangre con pistola en mano, hasta lo bautizaron con el nombre de, Príncipe carmesí.
No, eso fue hobra de asesinos bien organizados pagados por esa mesalina barata de burdel.

Exhaló otra bocanada de humo se volvió y lo miró con un brillo asesino en los ojos.

- Búscalos y encuéntralos. Ya es hora de que paguen por sus pecados, dios está de mi lado y estás ofensas sólo se lavan con sangre.

El hombre asustado, salió de la habitación.
Con mirada sombría y oscura, volvió a sentarse.

- Pronto, muy pronto me las pagarán, en cuanto los tenga en mis manos, lamentaran hasta el haber nacido.

***†********†

Kagome llegó con Sesshomaru a una sesión de fotos, promocionaría un perfume, sólo habían pasado dos meses de que llegaron a londres y todos los modelos ya estaban listos, para su primer sesión. Todos eran buenos chicos, las modelos prácticamente se arrojaban a los pies de Sesshomaru y Bankotsu,
Pero, eran ignoradas, eran abejas atraídas por la miel. Los ojos de Sesshomaru eran hermosos, pero fríos y desdeñosos cuando no le interesaban los alagos o le disgustaban las preguntas, pero si algo había aprendido Kagome del carácter de Sesshomaru era que, cuando no quería contestar algo, jamás lo hacía. La mayoría moría por dormir con el, pero eran drásticamente rechazadas.
El otro día durante un ensayo donde estaban presentes muchas de las modelos que irían a la semana de la moda, Kagome, casi rompe en carcajadas ante el último comentario sarcástico de Sango. << Ves! Son como moscas en una caca, aún y cuando está mierda es de calidad, no como Inuyasha y Miroku que ni a caca llegan. >>
Su amiga si que sabía cómo usar el sarcasmo y de paso, hacerla reír, y para colmo, Jack y Ayame le aplaudían todas sus ocurrencias.
Kagome observaba el estudio casi listo, mientras Sesshomaru y Bankotsu escuchaban las indicaciones de Jack y del director, quien estaba más que encantado por no tener que soportar al snob de Miroku y al engreído de Inuyasha.