La belleza de las flores.

Capítulo 16.

-No sé para que te quejas, con esos calzoncillos de boxes se te ve mejor culo.

-Parece que los compraste más para que los disfrutes tu que yo.

-”Of couse.” En esto Jun se quedo un raro parado.

-Jun, cuanto tiempo, es una alegría verte- una mujer se acerco y le dio dos besos en la mejilla -¿Qué tal estás que no se te ha visto en mucho tiempo?

-Estoy bien.

-Sabes que es una gran casualidad, hoy había enviado una invitación a su compañero y a usted para ir a una fiesta.

-¿Compañero?

-Si, uno extranjero atractivo.

-Alcibiades el gandul.

-¡Ah! Bueno, espero verte en la fiesta de seis años de mi estudio, irán muchas conocidas tuyas que han trabajado para tu empresa, por eso he invitado a los representantes de las empresas clientes y tu no puedes faltar. Mientras hablaban yo me ponía a revisar un mensaje que me habían enviado.

-Si, pero no sé si podre ir, esto...que no se me olvide, ella es mi esposa, mi reina espartana, Lady Eurus Sherlock Frye.

-Mucho gusto y disculpe por no presentarme antes, eran mensajes cuestión de familia. Le digo dándole la mano.

-Encantada, pero me darás una respuesta...

-Y ella es nuestra princesita.

-¡Oh! Que linda como duerme, pero respondeme ¿Iras?

-Yo...

-Por supuesto que ira.

-¿Irán los dos?

-Lo agradezco, pero no puedo ir, hoy tengo que probar unos VR en los cual con mi movimiento puedo hacer que se mueva un robot.

-No entiendo bien, pero bueno, parece algo importante.

-Si, algo así, pero ya le dije, Jun puede ir con Alcibiades.

-Muy bien, les esperare a ellos y de verdad me a encantado conocerla, por cierto esas gafas de sol son magnificas.

-Pues estas son las normales, del estilo de Crowley.

-Las buscare, porque me encantan, bueno, os dejo que sigan su recorrido.

-Bye.

-Hasta luego.

-Chao. La mujer se fue y nosotros continuamos con nuestro pequeño recorrido.

-Tengo ganas de tomarme algo y viendo la hora que es ya deberíamos tomarnos algo para que recuperes algo de azúcar.

-Vale, me apetece un helado de moka. Fuimos a una cafetería cercana.

-Mi reina de verdad crees que es bueno que yo salga con el gandul de Alcibiades.

-A ver, en primer lugar te debo una y luego si piensas que no me fije que ella pensaba que ibas solo, con esas frases, tranquilo, no me molesto.

-Sería lógico que tu no te molestaras, ella es Riza Nuji, una ex señorita Tokyo y buena modelo, aunque no tanto como cuando lo haces tu, cuando lo haces para ayudar a Toto nadie te reconoce, por cierto, gracias por no echarle.

-Sabes que en el fondo no lo podrida hacer, no solo por la abuelita, sino que ya le veo como un niño adoptivo, pero no hablamos de nuestro hijo adoptivo, sino de tu amiga.

-Conocida, buenas, camarero, un café y un helado de moka.

-Ahora mismo señor.

-Yo no acepte ir no solo porque quiero dejarte espacio como tu lo haces conmigo, sino que conmigo estarías muy incomodo y no podrías disfrutar.