—Hola… —Saludo Jin a In Myeong. La mujer lo miró y luego desvió la mirada hacia la ventana, como si las nubes fuesen más interesantes que su acompañante. Él frunció el ceño, su paciencia se agotaba.
—Yo no quiero estar aquí pero a diferencia tuya, no soy un grosero.—Se levantó del sillón y cerró las cortinas.—La he saludado amablemente merezco una respuesta, no estoy pintado en la pared.
—Eres todo un niño berrinchudo.—Puso los ojos en blanco.—No sé qué clase de artimaña usó tu madre para convencer a la mía de esta locura.
—Para tu información, fue tu madre quien luchó mucho para conseguir esta cita para ti.—La señaló disgustado. La muchacha suspiró porque en definitiva su madre era capaz de rogar por una cita a ciegas para ella siempre y cuando el hombre tuviera nacionalidad Coreana.
—¿Eres siempre tan fastidioso?—Preguntó ella con desdén.
—¿Fastidioso yo?—Rió con ironía.—¿Acaso no ha notado nunca su actitud, señorita In?—Jin se sentó nuevamente en su lugar. Los habían prácticamente encerrado en esa habitación para socializar, pero lo único que intercambiaron fue mala energía.
—Creo que mi actitud es igual de nefasta que esta cita.—Ella se cruzó de brazos.
—Concuerdo con usted.—Sonrió Jin de medio lado.
—¡Vaya! ¿Qué intenta hacer?—Myeong frunció el ceño.
—¿Yo? Nada.—Se encogió de hombros sin entender.
—Esta coqueteando conmigo.—Ella lo señaló acusadoramente.
—¡Ni loco!—Exclamó horrorizado.—Sin ofender.
—No me ofende.—La expresión de la chica se suavizó.
—¿Cómo fue que terminamos aquí?—Rió Jin burlonamente.
—Mi madre odia a mi novio porque es un chico extranjero. Ella dice que no tiene nada que ver que sea Francés, pero estoy segura que es eso. Mis padres son muy conservadores.—Dijo ella evidentemente molesta. Jin no se esperaba una respuesta tan honesta de una mujer que apenas conocía, así que pensó que el corazón de Myeong realmente dolía.
—Entonces tu madre quiere emparejarte con cualquiera que sea coreano. Eso es bastante injusto señorita In.—Intentó consolarla.
—¿En serio le parece injusto?—Preguntó la muchacha.
—Si, puedo entenderla perfectamente. Yo tambien estoy enamorado de una chica extrajera, mi madre no la odia pero es un asunto algo complicado; pero usted señorita In tiene la oportunidad de estar con la persona que ama y sugiero que no se rinda.
—Joven Kim, no se rinda usted tampoco.—Sonrió por fin aliviada. Kim Seokjin no era como todos los tipos con los que su madre organizó citas, era el primero que no era un patán arrogante y sin gracia. Pero lo más importante: también estaba enamorado.
—Lo mío no tiene remedio.—Sonrió amargamente el muchacho.—Ella ama a otra persona y no me puedo interponer entre ellos, no sería lo correcto.
—Tengo que admitir que usted no está nada mal para ser un idol.—Myeong observó detenidamente a Jin.
—Eso sí que es ofensivo.—Sonrió indignado.—¿Acaso por ser idol soy menos?
—No me malinterprete. Creí que usted era un niño mimado.—Se encogió de hombros. Ahora Myeong parecía una persona totalmente diferente, ya no era una maldita y eso estaba bien para Jin.
—No se equivoca, siempre he sido muy mimado.—Soltó una pequeña risa.—Pero eso no me hace mala persona, señorita In.
—Por favor, dígame Myeong.—Hizo una pequeña reverencia desde el asiento.
—Está bien, usted puede llamarme World Wide Handsome.—Dijo Jin para luego reír con ganas. La chica lo miro sin entender el chiste.—No me haga caso Myeong.—Contuvo la risa.—Simplemente dígame Jin.
***
—¿Que tal la señorita In?—Preguntó la señora Kim en el umbral de la puerta principal.
—Parece ser una buena persona.—Le contestó él, también de pie en el umbral de la puerta.
—¿La verás de nuevo?
—No, definitivamente no.
—¿Así de mal estuvo la cita?
—Eso no fue una cita, mamá.—La miró alzando una ceja.—La señora In y tú no tienen nada de casamenteras. La próxima vez consigan un par de personas que sean solteras y lo más importante: que no estén enamorados de alguien más.
—¿Quieres decir que…?—La señora Kim frunció el ceño.—In Myeong…
—La señorita In tiene un novio que ella ama pero que su madre detesta.
—No tenía idea.—Dijo la señora apenada.
—Tienes una amiga muy… peculiar diría yo.—El muchacho giró sobre sus talones y se adentro en la casa.
—También tienes una madre peculiar.—La señora rió nerviosa.
—¿Que escondes?—Le preguntó Jin a su madre. Ambos vieron como un auto se aparcaba justo frente a su casa.—Dime que no es otra cita.
—Lo es Kim Seokjin, es otra cita.—Le dijo ella encogiéndose de hombros.
—¡Eres increíble!—El muchacho giró sobre sus talones y se dirigió al horripilante salón de las citas.—Esperaré a la pobre chica.
*****
¿Que tal?
No estoy del mejor ánimo, pero espero que ustedes si lo estén.
Disfruten :)
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Who Do U Love? // • Jin • BTS Universe II•//
Hayran KurguTodo el mundo dice: De los errores se aprende y están en lo correcto ¿Pero cuántos errores tienes que cometer para aprender? Kim Seokjin decide que la mejor manera de enmendar sus errores es actuando según lo que dicta su corazón. Pero... ¿Su cora...