Amor ordinario

A kiss

Luego de aquel desastre, Lucrecia se fue a su habitación ambos necesitaban estar solos. Se ducharon asi bajaron su calor corporal, duraron un rato hasta que por fin se sintieron bien y listos cada uno para salir de la ducha. Mientras la chica se aplicaba su respectiva rutina nocturna de cuidado de la piel, Valerio entro en su habitación y no tardo en tirarse en la cama, arropándose con una de las sabana de la castaña. -¿Que haces aqui?- pregunto al verlo instalado en su cama -No pienso dormir solo- dijo y palmeo el sitio a su lado para que ella fuera tambien mientras ella solo negaba con la cabeza a la vez que sonreia -Eres imposible- menciono a la vez que se acerco a la cama y se tumbo a su lado. En poco tiempo se quedaron dormidos había sido suficientes emociones para un día.

Al día siguen te dieron de baja sus móviles, no iban a salir de casa, no había razón alguna ademas en casa tenían todo para pasarla bien. Pasaron parte de ese día poniéndose al día con algunas series de netflix o jugando en la piscina. Mientras estaban allí Lu estaba sentada en el borde mientras Val nadaba. La casa sin sus padres se encontraba tan tranquila o quizás eran ellos quienes se sentían así. El se acerco hasta donde estaba ella saliendo del agua y sentándose a su lado -¿En que piensas?- pregunto haciendo que ella dejara su burbuja personal -Prométeme que no te vas a enojar- lo que pasaba por su mente no era malo pero sabia que no le iba a agradar nada al chico, Val afirmo con la cabeza -¿No has pensado en entrar a un programa de desintoxicación?- aquello dejo descolocado a Valerio nunca se imagino que aquello era lo que pensaba Lucrecia y mucho menos cuando por fin estaban juntos -¿Me estas jodiendo?- pregunto algo molesto y levantándose, a lo que la castaña lo siguió a la vez que se apresuro para tomarle del brazo y evitara que huyera -Cariño escúchame. No lo digo por mal es que pienso que no soportaría que algo malo te pasara por culpa de las drogas- el escucharle hizo que su enojo desapareciera -No me va a pasar nada- asi trato de restarle importancia -¿Como puedes saber eso?, si te pierdo me quedare sola-. El solo imaginarlo hizo que sus ojos se llenaran de lagrimas -No quiero perderte- le abrazo fuerte.

Para el chico era tan difícil esa decision era algo importante y la vez que su mama lo llevo a un centro las cosas no terminaron nada bien por que se escapo -Dime por lo menos que lo vas a pensar-. El la abrazo también y acaricio su pelo -Lo hare, solo no me presiones- menciono tratando de así dar por terminada esa conversación o eso pensaba por que Lucrecia iba a volver hablar del tema. Luego de aquella mini conversacion, pasaron también la tarde juntos pero la noche seria otra cosa por que la noche se hizo para celebrar y pasarla bien en lo cual ellos eran unos expertos.

Ellos no necesitaban a nadie mas para pasarla de lo mejor y todo iba bien, el ambiente era bueno, el dj estaba haciendo bien su trabajo pero sobretodo estaban juntos hasta que apareció un ser nada agradable la cual se hizo notar al instante por que tomo a Valerio del brazo y le planto tremendo beso dejando a Lu sorprendida. El chico la alejo de el y le miro -¿Por que no me dijiste que ibas a venir aqui?- pregunto la chica abrazándole, eso fue lo ultimo que vio Lucrecia pues abandono la pista de baile dejando a la pareja. Ella no iba hacer ningún espectáculo allí aunque en su interior estuviera quemándose, ella deseaba alejarlo de el y decirle que el era de su propiedad, pero no, asi que sin ni siquiera decir nada se fue a casa. Ella no estaba molesta con el, ni con ella sino con la vida por haber hecho que el fuera su hermano por que así como la narco barbie podia besarle cuando quisiera y donde fuera así ella deseaba hacerlo.