Different

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Aquel lugar era tan diferente al sitio que su madre le había enviado, era mucho mejor en todos los aspectos sin embargo aunque enserio trataba de mostrarse optimista le era difícil por que los síntomas de la abstinencia no eran fácil sentía las manos sudorosas al exceso, la ansiedad se lo estaba comiendo haciendo que el estuviera mas irritable y sabia que eso solo era el comienzo. Por eso había abandonado aquel centro en Chile por que la abstinencia era algo que acababa con el, su cuerpo le pedía drogas, tenia ya un buen tiempo consumiendo y sabia perfectamente que no seria fácil sin embargo ahora tenia una motivación por la que aguantar.

Volvió a acostarse y cerro los ojos pensar en Lucrecia le ayudaba a calmarse un poco, asi que su mente viajo a aquella cita en el restaurante donde por primera vez se sintió como una pareja normal aunque nunca había tenido una.

Si era cierto, el había tenido sexo con otras chicas por que virgen no era obviamente pero solo fueron una escapatoria. Al principio pensó que toda aquella locura que estando con otras se sacaría a la chica de la mente y el corazón por que se trataba de su media hermana, cosa que no sucedió solo hizo que se diera cuanta que con un solo beso Lucrecia le hacia sentir tantas cosas que ninguna de las demás pudieron por mas que le hubieran entregado su cuerpo.

Suspiro al acordarse de su primera vez juntos, fue mucho mas placentero de lo que alguna vez fantaseó y eso que lo había hecho mucho. Sentir su cuerpo vibrar de placer debajo de el, ademas de sus jadeos, gemidos solo le hicieron vivir una experiencia única por que no solo buscaba su propio placer sino el de ella, le preocupaba mas el de ella que el suyo, creer aquello que había escuchado alguna vez y que le pareció ridiculo en su momento ahora tenia sentido por que antes el trataba de saciar su deseo, aquello que el cuerpo le pedía, pero estar con ella le demostró que no.

"No es lo mismo tener sexo que hacer el amor"

Llevo su mano desorganizándolo aun mas, abrió los ojos y miro aquel techo blanco -Tu puedes Valerio, tu puedes- susurro dándose ánimos, eso era lo que necesitaba ánimos, no quería darse por vencido tan fácil apenas tenia unos días allí y por primera vez en su vida realmente quería salir de ese hoyo por que no solo se trataba de que al salir Lu le esperaría sino su padre, por fin sentía cierto apoyo y cariño de aquel hombre, cosa que siempre había querido tener una relación con el embajador poder hablar con el y no solo discutir así que el chico en aquella ocasión tenía grandes motivos.

Tocaron a la puerta sacándolo de su burbuja-Pase- menciono en voz alta y un enfermero hizo entrada -Ya es hora de la sección grupal- informo y el chico se levanto de inmediato. Aquellas secciones le ayudaban a darse cuenta que no era el único y que habían otros alli con peores problemas por que su consumo no era tanto comparado con los demás haciéndole saber que si tenia esperanza ademas de que allí también estaban personas que habían abandonado aquel vicio demostrándoles a todos que si se puede y el quería ser uno de esos. Si salía de allí quería ser de esos que servían de inspiración a otros a salir de aquel lugar oscuro y sin ni siquiera planearlo allí no solo le ayudaban con su problema sino que también le daban una idea sobre que rumbo podia tomar su vida.

Amor ordinarioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora