Coffee and Bears

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En su pecho se instaló la ferviente necesidad de un calor inalcanzable. Ella era hermosa en cualquier aspecto, la chica albina provenía de una familia millonaria y aunque odiara escuchar las malas lenguas que rodeaban a la más alta nunca las tomaba en cuenta, era alguien con perseverancia y humildad. Era codiciada y envidiada, compartían algo en común pero no era demasiado segura para poder acercarse a la chica después de todo era solitaria y muy reservada, hasta que afortunadamente el café familiar la recibió con puertas abiertas en un día opaco y frió.

Su sitio laboral es ser mesera, a pesar de ser un café muy concurrido era silencioso y pocas veces la campana le llamaba la atención. Ese día de casualidad su pedido era en las mesas de la entrada, escucho el bendito tintinear y dejo la taza al cliente, sonrió y abrazo la bandeja para no molestar demasiado a los clientes.

-¡Buenas tardes bienvenido a Coffee and Bears! ¿que se le ofrece el día de hoy? –La castaña arreglo su delantal y levanto la mirada. Sin previo aviso una corriente eléctrica le recorrió todo su ser al ver unos ojos grises y opacos inspeccionarla de arriba abajo- Um...

-Buenos días! Perdóname pero a esta estúpida no le gusta hablar –Detrás de la albina salio un chico de su misma estatura pelo morado y puntas verdes, le tenía tanto odio- Queríamos una mesa para dos, no sé si sería una molestia princesa.

Le comenzó a hervir la sangre. Tenía entendido por partes de sus primos que ese estúpido era el prometido de la chica, que bien, ademas de tener a tan linda princesa era tan pobre que buscaba gente fuera de su alcance. Bufo, tomo aire y fingió una sonrisa al ver cómo le tomaba la mano a la fuerza a la chica.

-Claro, si quiere le dejare la del centro tiene mucho más espacio y la música recae tenue-mente en ella. –Sugirió la castaña con la esperanza que aceptara la joven, más quedo en silencio y se removía incomoda tratando de soltarle la mano al chico siendo en vano.

-Yo...

-No, perdona preciosa –el de lentes sostuvo más fuerte su mano y frunció su ceño en modo de molestia- Soy su prometido y como buen futuro esposo tengo que dar la noticia ante el público con o sin palabras. Elegiré la mesa de allá, tiene buena vista para tomar fotos comprometedoras, ¿no lo crees Gabriel?

-Pero... Esas mesas son demasiado frías y-y...

-Gracias por tu preocupación... Ademas tenemos que hablar cosas entre nosotros... –La más alta le hablo con seguridad, colocando su mano en el hombro de la castaña regalándole una pequeña sonrisa-

A pesar de ser tan pequeña le pareció la sonrisa más bella del mundo –O-oh, claro síganme... –Los encamino a la mesa y le abrió la silla a la chica al ver que el estúpido ese solo se sentó. Tomo el menú de su bandeja y se lo entregó a la joven- Cuando se sientan listo de que van a ordenar me llaman –Sonrió levemente, dio un paso hacia atrás con la intención de alejarse escucho que la chica trataba de decirle algo por lo que le dio atención-

-Muchas gracias por tu servicio... –La albina quedo pensativa al no poder recordar el nombre de la castaña avergonzándose-

-Sigfrid, me puede llamar Sigfrid.

-Sigfrid... lindo nombre –Sonrió con sinceridad y le dio le permiso de retirarse- 




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Buenas:D ¿como han estado mis uwu's? 

Espero que bien, ahre. Estoy que el aire me desaparece por meses o años lol, prometo subir mas cositas haci :((💜

26/9/19

NochzAlb💜

[Fʀeddoʟd Oɴe-sʜots]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora