Desperté a eso de las 8 de la mañana aún refugiada en el cálido pecho de Joe que en comparación con anoche subía y bajaba a un compás calmado y tranquilo.
Tenía que despertarlo para que se vistiera así que con dulzura comencé a besar su pecho con dulzura, subiendo hasta sus clavículas, luego a su cuello, mentón… hasta llegar a sus delicados labios.
Ahí estuve entretenida por bastante tiempo, hasta que el muchacho despertó.
- Hola… -Susurró aún con sueño y sus ojos se mantenían cerrados.
- Es hora de que nos vistamos… a Lissa no le molestará que tomemos desayuno todos juntos. –Dije suavemente acariciando su frente- Entraré a bañarme, será mejor que cuando yo salga estés listo.
- ¿Nos bañamos juntos? –Suspiró.
Guardé silencio y pensé bien.
- Seguro –Sonreí y le robé un pequeño beso.
Nos escabullimos hacia el baño y ahí nos encerramos, metiéndonos a la ducha comenzando con esas lentas caricias matadoras.
No pasamos a nada más que eso, ambos sabíamos que ningún cuerpo resistiría más.
Al salir, nos secamos el cabello y al vestirnos salimos por nuestro desayuno.
Para nuestra suerte Lissa aún no se levantaba, así que pudimos disfrutar un desayuno solos.
Mi hermana apareció a la media hora pasada, con Kevin detrás de ella.
- ¿Qué rayos haces tú aquí? –Expresó el hermano de mi… novio…¿Ex Novio – novio? Dios esto me confundía.
- ¿No que ustedes habían terminado? –Dijo mi hermana en un tono de mal gusto.
- Em… si –Dije sin saber que responder.
- Oh…Hayley ¿Podemos hablar? –Dijo mirándome serio.
- Claro –Sonreí.
Joe tomó de mi mano y me sacó de la cocina, nos encaminamos hacia mi habitación y cerró la puerta.
- ¿Qué sucede? –Arqueé una ceja.
- Necesito preguntarte o decirte algo –Susurró acercándose y tomando de mis manos- Sé que todo lo que pasó entre nosotros, hablo de… bueno nuestra separación, sé que la culpa fue mía… y no lo sé, quiero hacer algo por ello, quiero cambiar y sé que no lo hice muy bien este tiempo que no estuvimos juntos… pero…Hayley ¿Quisieras volver conmigo? –Dijo tomando de mi mentón y logrando que nuestras miradas se encontraran.
¿Creen que sería capaz de negarme a esos ojos? Por supuesto que no.
- Volvería contigo todas las veces que fueran necesarias –Susurré.
Acercó sus labios a los míos y terminamos fundidos en un delicado beso… un beso lleno de amor, tranquilidad, pasión, ternura… todos los sentimientos y reacciones que pudimos haber tomado o tenido en esos momentos.
Sus manos quietas en mi cintura y mis manos en sus mejillas, acariciándolas con suavidad.
Pasamos el resto de la tarde juntos… no queríamos separarnos más, pero Joe tendría que irse… supongo que ya deberían extrañarlos en casa.
Cuando se fue, contenta y emocionada corrí al teléfono, me estiré en mi cama y marqué el número de celular de Nick, solo le dije que nos juntáramos en la plaza a la cual siempre íbamos en media hora y así fue. Al verlo caminar serio con sus manos escondidas en sus bolsillos corrí hacia él y lo abrasé. - Adivina que –Dije emocionada abrazándolo. - ¿Qué sucede? –Se alejó serio de mí, pero ni si quiera lo noté. - Joe y yo somos pareja nuevamente –Sonreí emocionada. - Debí suponerlo –Dijo serio. Solo guardé silencio y lo mire fijo. - ¿Sucede algo? –Me aventuré a preguntar. - No, no… nada… solo que, debí esperar este momento. - ¿Qué quieres decir? –Arqueé una ceja. - Siempre supiste que me gustabas ¿Verdad? –Miró el suelo. - Estem… si… -Musité nerviosa. - Pues… pensé que nunca volverías con Joe y que posiblemente los dos lograríamos tener algo, lo siento, fui un inútil –Dijo serio y levantó la vista para encontrarse con mis ojos. - Nick… -Llevé una de mis manos a una de sus mejillas- Te dije que esto pasaría… nunca me escuchaste cuando te dije que podría lastimarte. - Lo sé, lo que pasa es que pensé quesolo lo decías para evitar que esas cosas entre los dos pasaran, ahora me doy cuenta de que si fuiste capas de lastimarme. ¿¡Que!? Dios ¿Ahora me hecha toda la culpa a mí? Si, correcto, sé que soy culpable, pero este chico ahora me tira todo encima.