Capítulo 2, II

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Lauren POV

Impresionada.

Así fue exactamente como me sentí, al mirar esa enorme estructura, que me recordaba mucho a la Casa Blanca.

Apenas podía creerlo cuando vi la universidad con mis propios ojos. Era, por así decirlo, una oportunidad única en la vida, porque si no estuviera allí hoy, probablemente estaría trabajando en algo que realmente no me hacía feliz, y simplemente...solo lo necesitaría. En total, eso debería ser una señal.

Mi teléfono celular vibró y tuve que recordar la contraseña que había ingresado hace unos minutos cuando me detuve en una tienda del aeropuerto y lo compré. Ese dispositivo me ayudaría mucho, aunque no lo iba a usar todo el tiempo. Especialmente porque estoy en una ciudad en la que nunca he pisado antes.

Un mensaje del operador que me da la bienvenida al plan.

Y luego llamaría a mi abuela, porque esa sería la tercera vez desde que llegué. Me gustaría recordarle que no la abandoné, ya que ahora podía.

Al regresar al campus universitario, mis ojos encontraron varios grupos. Todo con actividades, que sirvieron para ayudar con los puntos.

Elegiría algunos que me interesaran más tarde, porque ahora mi objetivo principal sería encontrar los dormitorios y llevar mi maleta allí. Y como un ángel que cae del cielo exactamente al mismo tiempo, una chica se acercó. Sonriendo, realzando la belleza natural que ya tenía.

- Hola! -Dijo amigablemente. Quería devolverle la sonrisa, pero no sé...me parece que sonreír a la gente no es tan fácil. No necesitan más falsedad.

- Hola... - respondí cortésmente.

- Mi nombre es Keana, y hoy estoy ayudando voluntariamente.

- Um...Ok, Keana. -Me aclaré la garganta, luego me presenté. - Lauren.- Sorprendentemente, fui abrazada.

-Conozco a todos en el campus, bienvenida, Lauren. -Se alejó, sonriendo como lo había hecho al principio al acercarse. - ¿Necesitas ayuda? -Pasé mi mirada hacia la gente. Todos tan perdidos en sus mundos, muchos de ellos riéndose como si hubieran escuchado la mejor broma del mundo...Dios, necesitaba mi habitación, necesitaba llamar a mi abuela. Estaba nerviosa.

- S-sí, yo...me gustaría saber dónde están los dormitorios...

- Ah claro. Tú y otras cinco personas...¿Qué tal si cerramos nuestro pequeño grupo para una gira por la universidad? Te ayudará a no perderte en la primera clase después de mañana.

- ¿No empieza mañana? - Keana levantó mi maleta.

- No...mañana tendremos algunas conferencias y será la fecha límite para que los estudiantes se matriculen en alguna actividad extracurricular. Bueno, puedo explicarte cualquier cosa mientras hacemos el recorrido. ¿Te parece?

- Hm...De acuerdo, bien. Gracias una vez más.- Me guiño con el ojo derecho.

- Bueno, comenzaré hablando de la universidad. Columbia es la universidad más antigua del estado de Nueva York, y también fue nuestro recorrido. -Keana presentabs hechos, y yo los escuchaba con curiosidad, hasta conocer la mayoría de los lugares, hasta que finalmente llegamos a los dormitorios.

Ya sabía cómo eran las habitaciones. De hecho, parecían simples. Blancas. Había dos camas individuales, una ventana grande, dos escritorios, dos armarios y un baño.

***

Deportes...Era una hipótesis excluida de mi lista de actividades extracurriculares.

Y para mi felicidad: sí. Había un grupo de debate político. Me gustó eso, pero no tenía idea de lo que sucedió en los Estados Unidos o en el mundo. Como mencioné antes, no me preocupé por tener un teléfono celular o computadora e incluso cualquier otro medio que me permitiera ponerme en contacto con las noticias económicas y políticas de otros lugares.

Solo sabía lo que otros decían, aunque no confiaba mucho.

Entonces...también tendría que descartar eso de mi lista.

Al final, entre las opciones relevantes para mí, estaba el club de música y literatura. Y como había actuaciones musicales, decidí que el club de literatura sería mejor. Sin mencionar que estaba a punto de estudiar periodismo, sin duda sería importante, independientemente del tema de los libros, que los tomara en cuenta.

- Veo que algo te interesa. -Escuché, desviando mi atención del portapapeles donde acababa de firmar y encontrando a Keana una vez más. - Elegiste bien. Pareces el tipo de persona que va a disfrutar este tipo de actividad.

-Es...en realidad, es lo único que puedo hacer que no incluye al público. - se rio Keana.

- Oh, si lo hace. Y es maravilloso leer para personas mayores y niños.

- Cómo sabes...? -Sacó una placa con una foto de ella sonriendo y el nombre en ella.

- Soy vicepresidenta de este club.

- ¿En serio? -Ella asintió con la cabeza.

- Bienvenida de nuevo, Lauren.

- Um...gracias de nuevo. -Keana asintió, mostrando sus dientes completamente blancos en una sonrisa amable.

- Bueno, nuestro turno aquí está llegando a su fin. Más tarde, unos amigos y yo iremos a un bar, ¿te gustaría ir? - Si eso. Bar. Necesitaba beber.

-Claro.

-Entonces te recogeré a las nueve. ¡Hasta luego, Lauren! -Dijo Keana, ya volviendo a donde estaban los dormitorios.

Solté un suspiro de alivio porque era realmente lo que necesitaba en ese momento.

Todavía sorprendida por el tamaño del lugar, decidí dar un paseo por el campus.

Pero desafortunadamente aún no era lo que definitivamente necesitaba para sonreír.

Y estar sola me hizo darme cuenta de que la extrañaba. Me preguntaba cómo debería estar Camila si salía con alguien que la trataba tan bien como yo desafortunadamente no pude, pero no me quejo. Todos los momentos que hemos tenido hasta ahora han sido geniales. Estoy agradecida de que ella haya mejorado mi vida porque estaría aún más decepcionada de mí misma si hubiera renunciado a todo para ser lo que mis padres querían. Por un lado, ser fiel a mí misma fue maravilloso. Eso fue básicamente lo que me hizo "bien" cuando necesite ir a España. Al menos pude disfrutar un poco de mi vida, incluso si fue para llenar el vacío que me causó su falta.

Incluso si tuviera relaciones sexuales con alguien para olvidarla y ser un poco feliz, además de libre.

Pero aún así, parecía que ella era mis alas. Y solo podía volar cuando saltaba. Cuando mis pies tocaron el suelo, esta fue la recaída.

Con las lágrimas corriendo por mi mejilla, me levanté de la hierba donde estaba sentada y suspiré profundamente.

Me iba a dar una ducha y esperaba ansiosamente para emborracharme, porque este era uno de los momentos en que estaba con los pies en la tierra. Y se sentía como un infierno pisarlo.

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Estuve leyendo sus comentarios en el anterior capitulo que fue demasiado fuerte y hubieron comentarios donde decían que Lauren solo andaba de p**a y les diré mi opinión ante eso, hay algo que no están tomando en cuenta y es que todos sentimos las cosas de diferente manera, Lauren parece no estar sufriendo como lo ha hecho Camila, sin embargo lo hace pero trata de ocultarlo saliendo de fiestas y Camila se está cerrando más en si y bebiendo para ahogar el dolor.

Saint - Camren Intersexual (Traducción)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora