Saint - Camren Intersexual (Traducción)

Capítulo 6, I

Camila POV

Si yo creía que ya tenía lo suficiente de Lauren, es porque yo todavía no la había probado bien.

¡Qué tonta chica caliente!

Literalmente era una adicta a ella, en su sabor y en aquel cuerpo tan blanco y perfecto que mis manos ya tuvieron el enorme placer de explorar.

Yo sabía que ella tenía todo para ser sexy, sabía que detrás de esa capa de santa tenía una chica intrigante, y me impresionó el hecho de que me sacara de quicio con tanta facilidad. Yo sabía que había alguien salvaje allí, y yo amaba a la bestia.

Sin hablar de que ese odio que ella sentía por mí...Ah sí, eso dejaría las cosas mucho más calientes.

- Basta... - Mandó, luego del tercer orgasmo. Lauren agarró mi cabeza y me alejó mientras respiraba jadeante. La miré desde abajo y sonreí.

 - ¿Cansada de correrte? Pero todavía tienes veinticinco minutos hasta el segundo período. - Ella bufó, echando la cabeza hacia atrás.

- No me diste tiempo, estoy cansada.

- ¡Oh! Pensé que la que no se dio cuenta de eso aquí era yo! - Lauren me miró. Sus ojos verdes con tonalidad casi mil veces más oscuros, las mejillas sonrosadas y las cejas arqueadas exhibiendo completamente su irritación. Me encantaban los sonidos de nuestras bofetadas y besos.

- Yo estaba pensando en devolvertelo, pero eres una hija de puta, entonces adivina? - Ella sonrió. - Me vine tres veces, y tu no vas a venirte ninguna vez para que dejes de ser una idiota.

¡Mierda!

- ¡Ah, Lauren! ¡Carajo, eres demasiado complicada! - Ella se rió, cubriendo sus labios enseguida. ¡Sin creer que esta chica me tuviera literalmente en su mano! ¡Qué hija de puta!

La observé ponerse los pantalones con dificultades, luego ella finalmente consiguió quedarse de pie. Lauren sonrió y se arregló sus propios cabellos, desbloqueando la puerta al final.

- ¿Entonces es eso? ¿Realmente me vas a dejar aquí? - Ella levantó una de sus cejas, sosteniendo la manija de la puerta enseguida.

- Sí.

- De nada, entonces.

-Graciasss! - Rodé mis ojos. Lauren abrió la puerta y simplemente salió, y yo tomé aire y respiré profundamente, mirando mi erección enseguida.

¿Por qué razones insistía en Lauren?

***

Cerré el armario con fuerza y ​​me fui, empezando a caminar por el pasillo enseguida.

Estaba irritada porque no me corrí. ¡Carajo, hay algo peor?!

- ¿Qué, te has caído sentada y tu codo se ha detenido en tu cara? ¿Que cara es esa? - Dinah preguntó, sentándose a mi lado ya que la señal para el descanso había recién sonado. La miré y ella hizo una mueca, sonriendo enseguida.

- Esa es la cara de quien comió, pero no se quedó satisfecha. - Rodé mis ojos.

- ¿Qué? - Río. - ¿Has follado con alguien?

- No.

- ¿Cuándo? Ahora? ¿Por qué faltaste al primer período? ¡Lauren tampoco estaba- ESPERA! YA ENTENDÍ! - Dinah soltó un grito, carcajándose enseguida. - Ella no te hizo correrte, Camila?! - Asentí. - Pero el sábado me contaste que ella era caliente como el carajo, que ella te dejó enloqueciendo...¿por qué diablos follaron?

- Dinah, yo no folle! - Soltó una risa, viendo que algunas personas tuvieron la atención en nosotras. Ignoré completamente. - Ella lo hizo para irritarme. Y ella lo logró.

- ¿No te ayudó? - Asentí. - ¡Qué hija de puta! Pero tú-

- Yo la hice correrse tres veces, ¿sabes lo irritada que estoy? - Dinah se rió. Yo estaba a punto de golpearla cuando Normani apareció, abrazando la cintura de mi mejor amiga y robándole un pico, sonriendo enseguida.

- Hola mi amor. - Dinah exclamó sonriente. Levanté una de las cejas y solté una risa. ¿Era eso? Mi mejor amiga gallina llamando a alguien amor?

- Hola, guapa. - La morena me miró, así que me vi obligada a dar una sonrisa falsa. Yo permanecía con mi humor de mierda. - ¡Hola Mila!

- Hola Mani, todo bien? - La chica asintió. - Dinah, primero, explícame ¿Qué sucedió? - La rubia rodó los ojos.

- ¿Y no es obvio?

- Te conozco desde que eres bebé...yo no sé lo que debería ser obvio. - Ella rodó los ojos. Normani se rió y la acompañé.

- Al menos yo me corrí. - Entonces yo le levanté el dedo medio, casi acertando el rostro de la chica polinesia. Dinah cayó en la carcajada, y yo, apenas me volví, cansada de aquella payasada.

Pensé que podría mejorar mi estado de ánimo, pero por lo visto, estaba equivocada.

 Comencé a caminar hacia el baño, sintiendo mi rabia cada vez más, y como si fuera a ayudar, tan pronto como abrí la puerta, vi a Lauren con el culo empinado. En realidad, ella estaba lavandose la cara en el fregadero, lo que automáticamente la dejaba en esa posición.

Tiré mi mochila en el suelo y rápidamente fui a ella, sosteniendo su culo y haciéndola encogerse. Lauren rápidamente me miró por el espejo, dejando las manos encima de las mías.

- ¿Qué piensas que estás haciendo? - le devolví la mirada. Sosteniendo su cintura por debajo de su camisa y ella permaneció inclinada, sólo que esta vez, su mano estaba en el fregadero, ayudándose a sostenerse.

- La intención era asustarte, pero me gustó tanto esa posición, que ahora quiero quitarte la ropa y comerte así.

- ¿No crees que ya tuvimos suficiente por hoy?

-Tu lo tuviste, yo no. - Lauren sonrió. Aquello me dejó con más rabia aún, entonces apreté su cintura con más fuerza y ​​simule una estacada, observándola saltarse los ojos y me miró por encima de sus hombros. Vi sus manos apretando el fregadero, donde ella se sostenía.

- ¡Y no vas a tenerlo!

- Si no te gusta, ya estarías lejos de mí, Lauren. - Simulé otra penetrada, viendo que sus dedos quedaban blancos como la fuerza que ella aplicaba. Sonreí maliciosa.

Lauren no respondió, entonces tomé la libertad para llevar mi mano otra vez hasta los botones de sus pantalones, lentamente abriendo. Lo hice todo mientras observaba su expresión en el reflejo del espejo.

- Camila, la puerta... - Avisó. Sonreí y me sostuve en su hombro.

- ¿Quieres que me detenga? - Ella pareció pensarlo por unos segundos. - Porque si me detengo, sólo saldrás después de que te coma. - Lauren se rió.

- Continúa idiota asquerosa...Increíble. -Las manos de ella tomaron las mías con fuerza, luego Lauren las sacó de su propio cuerpo, empujándome al final.

Bufé irritada y crucé mis brazos, observándola tomar algunos papeles toalla, luego ir hasta la puerta del baño.

Me volví y me lavé las manos, brevemente desistiendo de aquella chica, pero sintiendo un escalofrío subir mi espina dorsal, al escuchar el ruido de la llave girando en la cerradura de la puerta.

La observe por el espejo y Lauren sonrió. Sus manos detrás de su propio cuerpo, indicando que ella realmente nos había encerrado allí.

Y entonces yo sonreí y mordí mi labio inferior, yendo hacia ella.

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Oh por Dios!!! Santa mierda! Las cosas se ponen cada vez mucho mejor!😱😏😏

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