Invencible

Origen.

He estado cautivo en esta jaula por más de 10 años... Esos malditos no han hecho más que llevarse a nuestros seres queridos para no regresarlos nunca... ¿Dinero? Me siento tan estúpido... No he visto a mi familia en mucho tiempo... Y no me dan respuesta de ellos. Tengo la esperanza de que estaré con ellos otra vez...

Dentro de la jaula hay una pequeña mesa, una cama, un inodoro, y un pequeño diario... No estoy seguro de que alguna vez este diario salga a la luz y que alguien además de mí pueda leerlo... Supongo que es para tener algo con que distraernos y no volvernos locos...

Después de unas horas, la puerta del final comenzó a abrirse, y una sirena comenzó a sonar... De pronto toda la habitación se tornó de un color rojizo y las alarmas de emergencia no dejaban de ensordecer mis oídos.

— ¡Vamos, sal de aquí! — Gritó uno de los cautivos, desesperado y lleno de manchas de sangre... Algo estaba pasando.

Tan pronto como salí de la habitación, las instalaciones estaban completamente destruidas, había demasiadas personas con la misma vestimenta que la mía por los suelos, y algunas corriendo desesperadamente a la salida. No tenía de otra... No importaba que estaba pasando, pero al parecer era mi única oportunidad de salir con vida de aquí...

Al bajar al primer salón, me di cuenta que aún había habitaciones cerradas... Era arriesgado, pero suponía que debía ayudar en algo... Ellos también tenían derecho a ser libres... Me dirigí hacia una de las puertas y note que había un detector de huella, me era muy extraño que en esta área no hubiera desastres o mancha alguna de sangre... Volví a la habitación de arriba, con la esperanza de encontrar algo que sirviera de ayuda, pero lo que encontré fue a una mujer... Una de esos agentes, con una niño en brazos, tratando de protegerlo de otros agentes, con un especie de traje especial, diseñado para mantenerse libre de cualquier contaminante... Ella retrocedía, y suplicaba repitiendo:"—Por favor... Es... Es solo un niño..." Sin embargo, ellos seguían ignorando sus súplicas, y continuaban avanzando... No sabía que hacer... Y antes de que estos pudieran tocarlos, me lancé a uno de ellos, tome una de las armas que tenían y sin saber cómo usarla se disparó a uno de estos agentes, otro de los agentes se dirigió hacia mi, y lo reventé con otro de estos disparos... No era una bala cualquiera, sino, que tenía un color brillante, de un tono violeta... La agente me tomó del brazo,  y me miró fijamente...

— M-Muchas gracias... Yo sabía que ustedes, no tienen malas intenciones...
— ¿Por qué está haciendo esto?— Pregunté.
— Necesito que por ahora solo confíe, que yo voy a sacarlos de aquí.

Solo asentí con la cabeza y continúe junto con ella. Ambos fuimos al salón donde estaba ese lector, y gracias a las huellas del agente, pudimos acceder.

Una vez dentro, el clima era bastante helado, la luz estaba demasiado blanca, como si se tratase de un cuarto sin ningún tipo de contaminantes, pero por más blanco que se viera, en el aire había algo que te dejaba con los pelos de punta... Era como si, cientos de experiencias hubiesen pasado una y otra vez... Fue un momento tan extraño, y cuando por fin volví en sí, sólo escuché...

— ¡Por aquí!— La agente paso junto con el niño en brazos a la siguiente habitación.

Al dar mis primeros pasos, note una habitación bastante extraña, las luces estaban apagadas, y solo podía diferenciar grandes bolsas negras apiladas en distintos estantes... Al entrar, la luz de inmediato se encendió, el aire era aún más helado que la del pasillo y mis pisadas podían escucharse hasta el último rincón de esta habitación... Me acerque, y note que habían ciertas escrituras debajo de cada una de estas bolsas...

... Septiembre de 1991, Proyecto André...

— ¿Proyecto? — Me acerque a las demás escrituras, y cada una de ellas tenía distintas fechas, y distintos nombres... Si, era lo que creía... Entonces... Entonces...