To Care for a Cat [Severitus]

Capítulo 13

Severus dejó a Harry en su siesta después de que lanzó un hechizo de monitoreo para alertarlo de cualquier cosa que sucediera. Se dirigió a la cocina para comenzar a cocinar la cena.

Le llevó poco más de una hora terminar y servir la comida. Después del susto de ayer, Severus dudaba en dejar a Harry solo por más de una hora. Rápidamente se estaba volviendo bastante paternal con el niño. Quién lo diría, un Snape con sentimientos paternales hacia un Potter.

Cuando salió de la cocina para ir a despertar a Harry, su encanto de monitoreo lo alertó de que Harry estaba en algún tipo de angustia.

Corriendo a su habitación, llegó y encontró a Harry gimiendo mientras se acurrucaba en una bola, con los brazos en alto para protegerse la cabeza de algún atacante invisible.

"Harry", dijo Severus en voz baja, sacudiendo el hombro ligeramente. "Vamos, solo estás soñando. Despierta", dijo más fuerte cuando no hubo más reacción que un gemido y una patada más fuerte.

Sintiéndose inútil, Severus hizo lo único que sintió que podía hacer en ese momento. Sentado al borde de la cama, juntó el cuerpo tembloroso con el suyo. Harry se puso rígidi y comenzó a luchar desesperadamente. Severus mantuvo al chico cerca a pesar de su paliza.

Un momento después estaba agarrado a un gato que luchaba y se rascaba. Harry salió de los brazos de Severus y aún dormido, cayó al suelo con un ruido sordo. Finalmente pareció despertarse. Se sentó allí mirando a su alrededor para buscar cualquier peligro duradero. Sus ojos finalmente se posaron en Severus.

Con los ojos muy abiertos, observó los brazos y las manos arañados. Parecía pensar que estaba en serios problemas y se fue a esconderse.

Solo un poco disgustado, Severus salió en busca de Harry.

"¿Harry?" gritó, manteniendo su voz tan poco amenazante como pudo. Ver al gran Harry Potter, el joven mago que se había enfrentado a Voldemort más de una vez, huir de cualquier cosa en autoconservación era desconcertante. Recordó que Albus le había dicho en el primer año de Harry que casi había sido selwccionado en la casa de Severus. Se había reído de la idea de un Potter en Slytherin, pero ahora podía ver que era completamente posible.

Fue al escondite anterior de Riju, con la esperanza de encontrarlo allí. No pensó que sería capaz de mirar la estantería de la misma manera ya que casi se había convertido en el lugar de descanso final de Harry la noche anterior.

"¡Harry!" llamó de nuevo. No hubo respuesta, así que se agachó y miró debajo del estante. No estaba ahí "Harry, no estoy enojado. Solo estaba tratando de despertarte. Los rasguños se reparan fácilmente. Sal".

Un sonido arrastrado atrajo su atención en la dirección del sofá. Los cansados ​​ojos verdes lo miraron desde debajo del sofá.

"Ven ahora, Harry," la persuadió suavemente. Recibió una pequeña sacudida de la cabeza a cambio. Ahora Severus estaba ligeramente desconcertado. ¿Cómo podía calmar las preocupaciones de Harry?

Se sentó cerca del sofá, evitando el lugar donde se había sentado la noche anterior. Se subió las mangas y recuperó su varita. Con movimientos lentos y deliberados, lanzó hechizos curativos de bajo nivel que convirtieron los rasguños en cicatrices casi invisibles. Sosteniendo su varita débilmente, apoyó los brazos boca arriba sobre los muslos. Se quedó mirando el tatuaje feo estropeando su antebrazo izquierdo con disgusto. Con un profundo suspiro, cerró los ojos para evitar mirar la mancha que marcaba su alma.