7 BESOS (AuronPlay y tú)

Yo no me llamo AuronPlay

El día siguiente fue genial la verdad, me desperté a las 7:00 am para poder aprovechar al máximo todo, me duché y coloque sobre mi cuerpo un jeans, una sudadera blanca junto a unos tenis negros. Hacía mucho frío así que no podía ir por la calle con poca ropa, salí a desayunar fuera del hotel y caminé unas cuadras siempre viendo mi GPS para no perderme. Entre en un restaurant y pedí un café junto a unas tostadas francesas saladas con tocino y huevo; mientras sorbía de la taza de café disfrutaba de la hermosa vista de la ciudad, y los carros junto a las personas pasar a sus trabajos y los chicos a los colegios. Aspiré el olor de la comida, la comí disfrutando de cada bocado para luego pagar y comenzar a caminar por las calles y tomar fotos a las plazas; cada cierto tiempo miraba mi GPS para ver qué tan lejos estaba del hotel. Así pasé el día, caminando y comprando algunas que vi por el camino; almorcé un Butifarra con Mongetes que son deliciosas salchichas asadas a la parrilla que van acompañadas de frijoles blancos, una verdadera delicia. Tomé un taxi con dirección al Museo de Picasso donde pasé bastante tiempo de la tarde admirando las obras del pintor. Me sentía tan liberada y feliz que no quería regresar al hotel, por momentos recordaba la cena con Auron y deseaba que estuviera conmigo pero era una idea que deshacía rápidamente: cuando llegó la noche decidí irme al hotel en un taxi y al llegar a este saludé en la recepción y me fui a mi habitación.

-Dios, que hermosa ciudad, debería ser como en Japón, alquilar un novio- Me reí en voz alta para meterme a la ducha y disfrutar de la vista de la ciudad de noche, las luces en los edificios y los carros cruzando las avenidas. Estuve recostada viendo el móvil y conversando con algunos amigos, le dejé un mensaje a mi madre para que supiera como estoy y cuando me iba a acostar me llamaron de recepción al cuarto.

-"Buenas noches señorita __________________, lamento interrumpir su descanso pero hay un caballero que la solicita aquí abajo, su nombre es Raúl"- Quedé estupefacta al escuchar el mensaje ¿Qué hacía aquí y a estas horas?

-"Dígale por favor que en unos minutos bajo, que me espere en la terraza"-

-"Enseguida señorita"-

Corrí rápidamente a buscar algo de ropa, me coloqué un corto vestido floreado estilo bohemio y unas sandalias negras. Bajé por el ascensor hasta llegar a la terraza allí estaba sentado de espalda con una sudadera negra y un jean claro.

-¿Auron? ¿Qué haces aquí?- Caminé lentamente hasta llegar a su posición donde me senté a su lado.

-Bueno pues me agradó estar contigo y dije ¿Por qué no visitarla un rato?-

-Ay mira, hoy me acordé de vos mientras paseaba por la ciudad- Le dediqué una suave sonrisa –Cuéntame qué tal te va-

-Pues bien, sigo vivo que es importante ¿Qué tal el paseo? Verdad que mi país está de puta hostia, como yo claro está-

-Es hermoso, me encanta demasiado y solo llevo un día- Lo miré y pensé que tenía razón, era muy guapo –Mañana quiero ir a la playa a ver qué tal es-

-Pues alegra que te guste ¿Qué harás ahorita?-

-La verdad nada, estaba en el cuarto a punto de dormir hasta que llegaste ¿Me vas a invitar a salir?- Estallé en carcajadas.

-Bueno siendo sincero es que si, quería llevarte a mi casa. Sería un extra en el paseo ¿Qué dices?-

-¿Qué? Eso sería grandioso Auron- Aplaudí como niño pequeño cuando recibe un dulce –Bueno pero debo regresar temprano al hotel-

-Tranquila, yo te acompaño mañana en la mañana ¿Deseas quedarte?-

-No se diga más chaval, ¿Cuándo nos vamos?-