Una montaña de pancakes ya se alzaba ante mi con caramelo derretido y un capuchino de vainilla , me encantaba el lugar tenía una sencillez muy elegante, Maze comía croissants rellenos de chocolates con un café helado.
Con él siempre había algo de que hablar y no me cansaba era como una fuente vital de energía, a tope a todas horas.
Comí todos los pancakes y disfrute mi capuchino al máximo, me había encantado venir y justo mañana quería repetir.
-¿ quieres ir al cine? - pregunto rodeando el auto y abriendolo.
- ¿por la mañana ?- respondí una vez dentro.
- tienes razón - sonrió pero noté algo en su sonrisa, algo que iba mal.
- te pasa algo - sin arrancar tomo el volante con fuerza.
- es que no quiero , no se agobiarte o aburrirte - me miró a los ojos - he esperado esto por tanto tiempo que no quiero que se termine con lo mismo que mis esperanzas, con el tiempo.
- yo ...- le tome de la mano - no quiero jugar contigo y dudo que alguna vez me aburra de ti pero que haré si una otra chica te ...
- eso no va a pasar jamás - me interrumpió sonriente luego se movió y me besó - vamos a probarnos gafas
Me reí .
- ¿Gafas?
- si - sonrió guardandose un secreto
-¿ que escondes ?Y no me lo dijo.
30 minutos después- estas me quedan perfectas - comentó arrogante mirandome y la verdad es que el negro resaltaba sus labios rosas
- claro que si - me acerqué y lo bese tomando le desprevenido
- si te ponen así no me las sacaría ni para dormir - comentó con su usual voz ronca.
- me llevo estas - me puse unas que centellaban un azul oscuro en las lentes casi igual que el de Maze pero el suyo era negro.
-¿ si? - tiró de mi y me besó intensamente por algo abrí mis ojos y una niña de unos seis nos observaba con curiosidad.
- Maze - le alarme cuando intento meterme mano.
- queee sólo un poco- dijo mirándome y le señalé a la niña con la cabeza.
Cuando la vio sonrió , tomo de mi mano la dijo un lo siento y nos fuimos a pagar.
-¿ Lista para revelar el secreto ? - pregunto una vez fuera asenti y el toco un botón haciendo que el coche empezará a maquinarse hasta ser un bello descapotable - las damas primero - me abrió la puerta y entre luego en rodeo el coche y hiso lo mismo.
- toma - me entregó una cajita y en ella descubrí una sortija con sus iniciales incrustados.
- cuando has conseguido esto.
- cuando me mirabas distrayendote de todo a tu alrededor - alardeo
- as matado el momento - me queje sonriendo le todavía y colocando me el anillo - es precioso, gracias.- damelas esta noche - arrancó y nos abrimos paso hacia donde el sólo sabía sin contar a ese ser omnipotente claro.
¡Un parque de atracciones !
Hacia diez años que no iba a ninguno- vamos a convertirte en una chica menos gruñona - me susurro y me tomo la mano guiando me hacia el lugar de ocio.
Nos metimos en muchas atracciones incluso la lanzadera y dos veces la montaña rusa, tenía algodón de azúcar hasta la garganta contando con dos burritos y un perrito caliente también tenía un pez que maze me a habia ganado pero finalmente lo regalamos a un niño de ojos azules muy parecidos a los de mi novio, nos fuimos en una nueva a tracción y nos ganamos un CD de música reggaetón, quise ir donde una pitonisa pero se negó rotundamente y como en realidad me daba miedo ir sola lo disimule con que no iría por que nuestro amor era una piña, juntos o nada.