Teen Wolf One Shots [CERRADOS] ✓

26. Scott McCall

Me mordí el labio inferior, nerviosa, mientras no dejaba de mirarlo fijamente. Sé que debería dejar de hacerlo, pero es superior a mis fuerzas. No soy capaz de despegar mi vista de él. Es como si un imán me impulsara en su dirección.

—¿Es que no te cansas?

Miré en otra dirección, hacia Malia, que me miraba con una ceja alzada.

—¿Que?—murmuré confusa

Malia puso los ojos en blanco. —De acosarlo con la mirada

Sentí como mis mejillas se calentaban, haciendo que la coyote me mirara con una ceja alzada.

—Es que no lo entiendo—murmuré, volviendo la vista a él—Es como si una fuerza invisible me impulsara hacia él.

Era consciente de que había dicho una salvajada, pero la joven a mi lado no dijo nada durante unos segundos.

—Deberías pedirle ayuda a Lydia—murmuró—Yo de esto no tengo ni idea

Suspiré, asintiendo.

—¿En qué necesitáis mi ayuda?

La voz de la rubiofresa me hizo saltar en el sitio, haciendo que luego pusiera mi mano en mi corazón y me girara a mirarla. Dejó un beso en mi mejilla, sonriendo levemente, mientras hacía lo mismo con Malia, quien hizo una mueca pero no dijo nada.

Lydia se sentó entre las dos. —¿Y bien?—insistió

—Ade no deja de acosar a Scott con la mirada

—¡Malia!—gruñí

Me miró divertida.

—Creo que me gusta—murmuré

Lydia se giró a mirarme, aburrida, como si lo supiese desde hace tiempo.

—¿Y?—habló, alzando una ceja—Eso ya lo sabía

Abrí la boca indignada. —¿Cómo lo ibas a saber tu si no lo sabía ni yo?

La banshee hizo un gesto.—Mamá Lydia siempre sabe detectar eso

Bufé, angustiada, mientras Malia intentaba por todos los medios no reírse.

—Pues dile a mamá Lydia que no tengo ni idea de lo que hacer—murmuré más para mi que para ellas

—Eso tiene solución

Alcé una ceja, temiendo su respuesta. Lydia sonrió ampliamente.

—Vais a ir a una pista de patinaje—dijo

—¿Que? Pero si no le he pedido nada

Ahora la que bufó fue ella.

—De verdad que no se como puedes sobrevivir sin mi—dijo, poniendo los ojos en blanco

Escuché un bufido que sonó a risa por parte de Malia, por lo que la fulminé con la mirada, recibiendo una sonrisa divertida de ella.

—Stiles y yo estaremos también ahí—dijo la rubiofresa, como si fuera obvio—Para que Scott no sospeche

Fruncí el ceño. —No va a pasar nada si estáis vosotros delante

—Es que no van a estar delante, tonta—intervino Malia, cada vez más divertida—Sólo es una excusa

—Exacto—apuntó la rubiofresa

—¿Y que excusa vais a poner?—pregunté

Lydia volvió a sonreir. —No es de todo excusa—dijo—Vamos a celebrar nuestros cuatro meses

—Cuatro meses con Stiles—murmuró Malia, riéndose—Si que tienes paciencia

—Lo mismo podemos decir del pobre Isaac—intervine, defendiendo al pecoso de mi primo

Me reí al ver a la coyote toda roja.

—Entonces está decidido—dijo Lydia

Asentí, haciendo que aplaudiera como una niña pequeña. La miré raro cuando se levantó del sitio y se me quedó mirando.

—Vamos, tenemos que ir a decírselo—casi me ordenó

Malia murmuró algo de que iba a mirar donde estaba Kira, cuando las tres sabíamos perfectamente que iba a buscar a Isaac.

No dije nada mientras Lydia me arrastraba hasta la mesa en la que estaban los chicos. Estos alzaron la vista al oír pasos. Stiles esbozó una sonrisa boba al ver a la rubiofresa de mi amiga, recibiendo otra igual. Se besaron en saludo, mientras Scott apartaba la vista incómodo y yo me aclaraba la garganta. Después de mil años, se separaron, aún sonriendo como tontos.

—Hola bebé—murmuró el pecoso, con voz de enamorado. Luego me vio y sonrió de forma amistosa—Hola, Addy.

Hice un ademán de saludo

—Cariño, ¿le has dicho a Scott lo que vamos a hacer para celebrar nuestros cuatro memes?—preguntó la rubiofresa, mirándome de reojo

Stiles sonrió de lado. —Estaba por decírselo cuando llegasteis

La pareja se giró a mirar al lobo, que estaba menos incómodo, pero que los miraba con curiosidad y sin entender nada.

—Vamos a ir a patinar—dijo Lydia—Los cuatro juntos

Scott alzó las cejas y me miró, haciendo que sonriera

—¿Los cuatro—preguntó el moreno, sin creérselo

—Si, los cuatro—murmuró Lydia, mirando brevemente a su novio

Scott hizo una mueca con los labios

—No seas aburrido—lo regañó Stiles

—Vamos, Scott—intervine—Será divertido

Lydia me codeó al sentir el doble sentido, por lo que le dirigí una breve mirada fulminante. El lobo ahora sonreía, sin dejar de mirarme.

—Está bien—aceptó

Sonreí aliviada de que aceptara.

La pareja compuesta por Stiles y Lydia chocaron los puños sin que nadie los viera, aún sonriendo, mientras nos veían.

El plan estaba en marcha.

PRÓXIMO SHOT: DEREK HALE