"Tightrope" L.S♡

Capítulo 4

Antes que nada, quiero agradecerles las bonitas palabras que me dejaron en el aviso y también pedirles una disculpa por tardar tanto en actualizar, espero que les guste el capítulo y lo disfruten.

(...)

Las lágrimas habían dejado de caer hace un buen rato, sus ojos lucían rojos e hinchados, se encontraba abrazada a su madre pensando en todo y nada, había muchas cosas en las que no encontraba explicación alguna.

Temía no encontrarlas.

Le intrigaba el que lo más probable que por miedo u odio, nadie se haya preguntado por qué se llevaban a cabo tales actos. Sabía muy dentro de ella que, si había una respuesta, porque siempre hay explicación para cualquier acto que se cometa, sin embargo, lo más seguro es que para esto nadie la sabe.

Una de las preguntas que más le rondaba era, ¿Desde cuándo?

No encontraba explicación lógica para lo que sucedía con los omegas varones, lo que les hacían era algo monstruoso, inhumano, no tenía nombre como tal.

¿Por qué matar a un cachorro inocente?

Mejor dicho, ¿Por qué matar a un omega?

Se supone que los omegas son la fuente de vida en la manada, son criaturas hermosas, con una gran belleza, delicados, amables, dulces, cariñosas por instinto sin ninguna pisca de maldad, pero la duda más grande que tenía era porque solo los omegas varones.

¿Hay alguna diferencia entre omegas varones y hembras?

Su respuesta para eso es no, no cree que la haya. Aún no puede creer que su propia madre haya pasado por algo así, recuerda que cuando era pequeña, la mayoría del tiempo ella no le permitía leer ningún tipo de libro antiguo, ni nada que tuviera que ver con la historia de la manada, si lo hacía era por su padre, sin embargo, su madre nunca estuvo de acuerdo con eso, ahora entiende el porqué.

Quiere saber más, quiere encontrar respuestas.

Tiene miedo de acabar en la misma tragedia, sabe que su alfa le ama demasiado, son almas gemelas, pasaron por mucho y tienen tres hermosos hijos, sin embargo, su padre también juraba amar a su madre y al final la lastimo demasiado.

A lo lejos veía a sus cachorros jugando en el agua aventándose del improvisado columpio que les había construido Caleb. Ahora le surgen más dudas, pero ahora respecto a él. No entiende porque su madre dice que él es un gran amigo, si estuvo presente cuando sucedió eso y no hizo nada para detenerlo.

Quería preguntarle, pero ya no quería que su madre volviera a recordar nada de ese horrible acto.

¡Diablos! Ni siquiera puede ponerle nombre alguno, si no estuviera todo esto sobre que los omegas son demonios y todas esas otras mentiras, ahora mismo tendría un hermano, hubiese más omegas varones, ni si quiera se tendría miedo al dar a luz a uno.

Cierra sus ojos y suspira tratando de calmar un poco su mente, es demasiada información en menos de una hora, sin embargo, los abre de nuevo al escuchar hablar a su madre.

—Sé que puede ser abrumador el saber todo esto, aun así, si tienes dudas o quieres saber más, todo está en el libro —Carraspea para librar su garganta de cualquier nudo—. Pero también puedes escucharlo de mi propia boca, se por tu mirar que aún tienes dudas, así que puedes preguntar.

—Tengo tantas, pero solo puedo pensar en una —Dice en un susurro. No la pueden culpar, necesita saber porque Caleb es un "buen amigo", aun cuando no hizo nada para defenderla.

—Pregunta entonces.

Suspira. —¿Por qué dices qué Caleb es un muy buen amigo? —Pregunta mirándola directo a sus ojos. Ve cómo su madre parece al principio desconcertada, pero después da una pequeña sonrisa, eso la deja un poco confusa, así que sigue—. ¿Por qué sonríes? No entiendo, él estuvo ahí y no hizo nada para defenderte, eso no es algo que hace un buen amigo.